No tenia claro si ver ¡Shazam! La furia de los dioses del director David F. Sandberg, protagonizada por Zachari Levy, y me he encontrado lo que esperaba, para bien y para mal.
PUNTUACIÓN: 6/10
Billy Batson y sus hermanos adoptados han recibido los poderes de los dioses pero aún están aprendiendo a compaginar sus vidas de adolescentes con sus alter-egos superheróicos. Pero cuando las Hijas de Atlas, un vengativo trío de antiguos dioses, llegan a la Tierra en busca de la magia que les robaron hace mucho tiempo, Billy -alias Shazam- y su familia se ven envueltos en una batalla por sus superpoderes, sus vidas y el destino de su mundo.
Shazam! fue creado por Bill Parker y C.C. Beck en las páginas de la editorial Fawcett en 1940 con el nombre de Captain Marvel. Años más tarde, DC Comics compró en 1972 esta editorial que había caído en declive, incorporándolo a su catálogo editorial como SHAZAM!, ya que por tema de derechos, estos habían caducado y Marvel Comics los adquirieron para su personaje Capitán Marvel. Si quieres saber más del personaje del comic, en las últimas semanas publiqué reseñas de varios de los comics más icónicos del personaje de los últimos años que puedes leer aquí.
Para ¡Shazam! La furia de los dioses repite David F. Sandberg como director, demostrando que Warner, a través de New Line, quedó contento con su trabajo en la primera película de 2019. De hecho, demostrando que no hay que arreglar lo que no está roto, Henry Gayden, guionista de la primera película, repite firmando el guion junto a Chris Morgan. La película de 130 minutos ha contado con un ajustado presupuesto de 125 millones que visualmente luce mucho mejor que la película anterior. La producción cuenta además con fotografía de Gyula Pados, montaje de Michel Aller y música de Christophe Beck.
Zachary Levi y Asher Angel interpretan a Shazam / Billy Batson, la estrella principal de la película. Jack Dylan Grazer y Adam Brody interpretan a Frederick «Freddy» Freeman, el hermano adoptivo de Billy, discapacitado físico y fan de los superhéroes. Grazer interpreta la forma normal de Freddy, mientras que Brody interpreta su forma de superhéroe adulto. Rachel Zegler es Anthea / Anne, una de las tres hijas de Atlas junto con Lucy Liu como Kalypso y Helen Mirren como Hespera, que forman el trio de villanas (iniciales) de la película.
Grace Caroline Currey interpreta a Mary Bromfield, la hermana adoptiva mayor de Billy, madura y con inquietudes académicas. Currey también interpreta la forma de superheroína adulta de Mary. Ross Butler e Ian Chen son Eugene Choi, el hermano adoptivo más joven de Billy y un jugador obsesivo. D. J. Cotrona y Jovan Armand hacen de Pedro Peña, el hermano de acogida mayor de Billy, que es abiertamente gay, tímido y sensible. Meagan Good y Faithe Herman interpretan a Darla Dudley, la bondadosa hermana adoptiva menor de Billy. Completarían el reparto Djimon Hounsou como Shazam, el último miembro superviviente del Consejo de Magos, que otorgó sus poderes a Billy Batson, tras designarle como su campeón, y Marta Milans y Cooper Andrews como Rosa y Victor Vásquez, los padres adoptivos de Billy y sus hermanos.
Reconozco que tuve mis dudas sobre si ver o no esta película. Y es que una cosa es hacer una película para todos los públicos y otra que la película sea infantil. Shazam! era infantil, y justo porque reconozco que no soy su público objetivo, me plantee evitarme el suplicio. Pero luego pensé que quedaba muy raro haber hecho unas reseñas de comics del personaje a modo de previa de la película, para luego no hablar de la película en si. Además, tras ver la primera película, al menos ya sabía lo que me esperaba y podía ajustar las expectativas.
Dicho esto, con sus cosas que luego comentaré, La furia de los dioses me ha gustado mucho más de lo que esperaba, dentro de que hablamos de un «bien sin más». Comenzando por los elementos positivos, la película empieza a tope desde el minuto uno presentando a unas villanas que hacen su aparición a partir de un suceso de la primera película, lo que conecta bien ambas historias. La película combina acertadamente escenas de acción (aunque luego hablaré de la ejecución) con momentos emotivos de los hermanos, ya sea en sus formas de niños/jóvenes o de superhéroe, que a mi me funcionan la mayor parte del tiempo. Como aventura ligera super comiquera (dicho con el mejor sentido posible) pensada para los más pequeños, creo que cumple bastante bien con su cometido. De hecho, en la parte emocional y de los personajes, me ha gustado más esta película que Black Adam, a pesar de contar con La Roca.
La película además muestra una envidiable falta de complejos a la hora de inspirarse en películas como Furia de Titanes y el trabajo de Ray Harryhauser, presentando a unos aterradores (para los niños) monstruos de la mitología griega como enemigos en el tercer acto. Unos seres que a pesar de tener una aparición muy muy limitada consiguieron mantenerme con la sonrisa en la cara mientras estaban en pantalla. En ese sentido, si el climax de la primera película creo que no fue todo lo acertado que debería haber sido, el de La furia de los dioses me ha parecido la bomba, ahora si super espectacular con unos planazos visuales estupendos, y también emocionante al estar el destino del mundo en juego y tener Shazam que arriesgarlo todo para derrotar a la villana.
Aunque hablamos de una familia Shazam! numerosa formada por seis superhéroes más sus padres, realmente los únicos que tienen profundidad son Billy y Freddy, quedando los demás como comparsas en un segundo plano. De hecho, puede decirse que Freddy en muchos momentos le gana la partida a Shazam y le quita el protagonismo la mayor parte de la película, excepto como decía en el climax final. Si eso es algo bueno o malo dependerá del gusto de cada uno, pero a mi me ha dejado con sentimientos encontrados.
Como pasó en la primera película, creo que Zachary Levi cumple con lo que le pide el director a partir de lo que pone el guion. Lo malo es que eso implica un exceso over-the-top de expresiones chungas y frases lamentables que intentan ser graciosas mientras vemos a un héroe con mentalidad de adolescente. Esto es en si mismo uno de los problemas que le veo a la película. De nuevo, entendiendo que yo no soy el público objetivo de la misma. No es un problema de Levi, que excepto en el climax final, acaba resultando cargante la mayor parte del tiempo, sino de lo que el guion le hace hacer. Para más inri, lo que más me gustó de la primera película era el drama de Billy Batson mientras intentaba ajustarse a su nueva familia adoptiva. Sin embargo, en esta continuación el actor Asher Angel que interpreta a Billy ¡prácticamente no aparece! Esto viene en parte provocado por el protagonismo de Freddy que comentaba antes, pero también por una historia que obliga a Shazam! a estar presente casi todo el tiempo. Y para mi, dentro que el arco de Freddy no me parece mal en si mismo, que quite importancia a Billy si es un problema, dado que se está restando protagonismo a la estrella de la película.
Hay otro problema en la película, y es la forma en que caracterizan a Shazam! Por un lado, en los comics tenemos a un niño de 10-12 años habitando el cuerpo de un héroe. Sin embargo, en la película Billy tiene casi 18 años, y todos sus problemas de ansiedad vienen de pensar que su familia de acogida le dirá que se marche al dejar de estar en el programa de ayuda infantil cuando sea mayor de edad. Y para tener 17 años casi 18, la película no deja de mostrarle como un incompetente y alguien bastante tonto, algo que por ejemplo no son ni Mary ni Freddy.
En este sentido, sabemos los poderes de Shazam! provienen de la sabiduría de Salomón, la fuerza de Hércules, la resistencia de Atlas, el poder de Zeus, el valor de Aquiles y la velocidad de Mercurio. Aunque la mayoría de habilidades están presentes, la inteligencia brilla completamente por su ausencia, y eso también es un problema. Me hubiera gustado que la película de alguna manera indicara que al compartir sus poderes con sus hermanos, esta cualidad se la hubieran quedado ellos y no Billy, pero que va. Shazam! es un idiota porque si la mayor parte del metraje. Lo cual por supuesto es otro problema, porque aceptando que igual este humor gusta a los niños pequeños, en mi caso impide que disfrute y conecte con el protagonista.
La película tiene un problema con las villanas, las hijas de Atlas, que no tienen nada interesante que hacer aunque están muy presenten en una parte importante del metraje, lo que indica un problema importante del guion. Y aunque el climax final me gustó mucho y las criaturas míticas me alegraron el día, lo cierto es que la película me hizo recordar que Sandberg como director de blockbusters palomiteros es cutrillo, algo que se nota especialmente en unas escenas de acción que no consigue rodarlas de forma que resulten interesantes. El presupuesto pasó de 90 millones en Shazam! a 125 en esta continuación, una cantidad muy ajustada dada el aumento en la escala de la película. Sin embargo, viendo algunos momentos sentía que a veces no es un problema de presupuesto, sino de habilidad de los creativos. Y como digo el climax me gustó mucho, pero es posible que fuera porque destaca dentro de la mediocridad general en el aspecto visual.
Por suerte para Shazam! La furia de los dioses, estos elementos acaban resultando secundarios gracias a la frescura y el amor que se tienen todos los miembros de la familia, que aportan el núcleo emocional que la película necesita para enganchar al espectador. Al menos conmigo lo consiguieron, cosa que por ejemplo no consiguió Black Adam con su intento de molonismo extremo de tío duro de pacotilla.
Destacar que la película tiene dos escenas post-créditos, la primera divertidísima, y un cameo estupendo de un miembro de la Liga de la Justicia que es además fundamental para la resolución de la película (aunque a la vez es un deus-ex-machina total). Escena que viene precedida por un gag buenísimo en mitad de la película a costa del final de la primera Shazam en la que mostraron a Superman sin que se viera la cara de Henry Cavill, no me acuerdo por qué motivo.
Teniendo en cuenta el ajustado presupuesto de 125 millones de la película, con que recaude 325 ya cubriría los costes de producción y empezaría a dar beneficios. Sin embargo, los trackings de ventas de entradas estaban siendo nefastos, y es estreno este fin de semana con tan sólo 30 millones en USA y 35 en el resto del mundo confirma que isual que Black Adam, la película no cubrirá los costes de Warner / New Line. Que una película de este tipo no consiga recaudar 200 millones en todo el mundo es un ejemplo más de lo dañada que está la marca DC / Warner en el mundo del cine. Aunque en este caso, entiendo que una parte del público no tendrá ganas de ver esta película debido a la naturaleza infantil de la primera parte.
Además, la película se ha visto perjudicada por una campaña idiota en redes sociales, al darse por sentado que esta película no va a tener repercusiones dentro del relanzamiento que James Gunn y Peter Safran van a llevar a cabo a partir de The Flash. Y digo idiota porque la gente debería concentrarse en disfrutar el AHORA y la película que tienen en pantalla, que muestra una aventura autoconclusiva y satisfactoria en si misma, en lugar de pensar en unos planes de futuro que ahora mismo son indeterminados. Representativo de esto fue una conversación de David Sandberg con un idiota en twitter que al mismo tiempo que le decía sin tapujos ni vergüenza que no pensaba ver su película, le exigía saber los planes futuros de Warner con el personaje y si sería importante en el nuevo relanzamiento. A lo que Sandberg le contestó con acierto que la única forma de hacer que Warner vea que Shazam! es importante es apoyando esta película, porque si no interesa a nadie ¿porqué tendría que interesarle al estudio continuar sus aventuras? Esto muestra la locura en que se ha vuelto el mundo del entretenimiento mainstream por una parte del fandom realmente idiota.
En todo caso, se habla del «agotamiento del cine de superhéroes» personalizándolo siempre en Marvel Studios, pero si vemos lo que está pasando en su Distinguida Competencia, su universo cinematográfico está siendo destrozado por el gran público.
Shazam! La furia de los dioses no es una gran película, pero me entretuvo y creo que cumple bien con el objetivo de entrener a un público infantil y juvenil. A veces no se le puede pedir más a una película de este tipo.
Comparto el trailer de la película:
¡Shazam! La furia de los dioses es tan entretenida como intrascendente, pero sabiendo a lo que vas creo que puedes pasar un buen rato.
PUNTUACIÓN: 6/10
Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.
¡Saludos a todos!
Debe estar conectado para enviar un comentario.