Archivo de la etiqueta: Kai Proctor

Crítica de Banshee Temporada 4 (HBO) Todo lo bueno llega a su fin

Banshee llega a su fin. La serie creada por Jonathan Tropper y David Schickler disponible en HBO ha sido una gran serie de acción de temática noir. Y aunque esta cuarta y última temporada es la peor de todas, creo que proporciona un satisfactorio final.

PUNTUACIÓN TEMPORADA 4: 6/10

PUNTUACIÓN GLOBAL: 7/10

Tras los dramáticos sucesos del final de la temporada anterior, Lucas Hood regresa a Banshee sin su placa pero con una nueva motivación: cazar a un macabro asesino en serie y localizar a un aliado perdido en la cuarta y última temporada de esta exitosa serie.

Banshee es un drama criminal estadounidense creado por Jonathan Tropper y David Schickler para Cinemax, que en España puede verse en HBO. Cuenta además con Allan Ball, creador de True Blood.

Tienes disponible en el blog mis críticas de las temporadas uno, dos y tres. Si te gustan las series de acción protagonizadas por antihéroes, te recomiendo que veas esta serie, pero obviamente, hablar de la cuarta temporada implica SPOILERS de las anteriores.

Así que sigue leyendo bajo tu responsabilidad. Estás avisado.

Banshee siempre ha sido una serie honesta en su propuesta, una serie de corte criminal protagonizada por antihéroes con su propio código de conducta que siguen hasta el final sin importar sus consecuencias. Si el protagonista Lucas Hood (Antony Starr) mola mucho, también lo hace su villano el jefe mafioso empresario de éxito convertido en alcalde Kai Proctor (Ulrich Thomsen), al que también han sabido construir como una persona compleja, que aunque es violento y claramente malvado, también tiene matices positivos aplicados a su familia, encarnada en su sobrina Rebecca Bowman (Lili Simmons). Y tras varios años, por fin sabremos el final de su enfrentamiento, un final que sorprenderá a más de uno.

Las escenas de acción siempre han sido uno de los puntos fuertes de la serie, aunque hay que reconocer que en esta temporada no tenemos números tan brillantes. Y aunque en las primeras temporadas se repetía un esquema claro de al menos una escena de acción y otra de cama por episodio, en esta última no son tan explícitos y se centran el todo el drama que han sufrido los personajes y como se dirigen hacia su final.

Lo peor de Banshee es que esta cuarta temporada no está al nivel de las anteriores. Desde el primer fotograma hasta casi el final es un WTF !! tras otro que restan atractivo al conjunto. A esto hay que añadir que a la figura de Proctor, en esta temporada los agentes de la ley tienen que enfrentarse a un asesino en serie y a los neonazis que quieren arrebatarle a Proctor el control del mundo criminal de la zona. Y al final ambas amenazas no están a la altura, con unas resoluciones demasiado simples.

Esto no quita para que los últimos 10/15 minutos de la serie en la que se cierra el camino para todos los personajes haya sido super emocionante y satisfactorio. Sobre todo en lo referido a la figura del protagonista Lucas Hood, el expresidiario sin nombre que llegó a Banshee buscando encontrar su pasado y que tendrá que decidir ahora su futuro.

Quizá esta cuarta temporada no haya mantenido el nivel, pero al menos nos ha dejado con un buen sabor de boca con su perfecto final.

Aunque estoy triste por el final de Banshee, me alegra saber que HBO acaba de estrenar Warrior, la nueva serie de Cinemax. ¿El creador de Banshee Jonathan Tropper se une con Justin Lin para adaptar una historia de Bruce Lee? ¿Artes marciales en el San Francisco de finales del XIX, bellas mujeres y molonismo máximo? Warrior tiene todas las papeletas para convertirse en mi próxima serie favorita.

Comparto el trailer de esta última temporada de Banshee, que sirve de resumen de lo visto hasta ahora:

Banshee ha sido una serie dirigida a un público adulto que me ha dado un más que correcto entretenimiento y que recordaré con una sonrisa en el rostro.

PUNTUACIÓN TEMPORADA 4: 6/10

PUNTUACIÓN GLOBAL: 7/10

 

Si te gustó este artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que sigas mi blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Banshee Temporada 2 (HBO)

La segunda temporada de Banshee, serie de Miramax disponible en HBO España, no ha sido tan buena como la primera pero nos ha dejado un montón de momentazos con nuestros carismáticos y rotos protagonistas.

PUNTUACIÓN: 7/10

Banshee es una drama criminal que sigue los pasos de un ex convicto que asume la identidad de Sheriff Lucas Hood (Antony Starr) en la pequeña y apartada ciudad de Banshee, en Pensilvania. La segunda temporada comienza con la llegada de un agente especial del FBI (Zeljko Ivanek) que abre una investigación sobre el tiroteo entre Hood y el zar de la mafia de Nueva York Rabbit (Ben Cross), a quien Hood traicionó y por lo que cumplió 15 años de cárcel, y que vimos al final de la primera temporada.

La ex compañera de crimen de Hood, Carrie (Ivana Milicevic), trata de arreglar las cosas con su esposo Gordon (Rus Blackwell), que es el fiscal del distrito de la localidad, y con su hija, Deva (Ryann Shane).

Y mientras todo esto sucede, un horrible asesinato desencadena problemas entre la comunidad Amish y la tribu Kinaho, y durante la investigación, Lucas y sus ayudantes se enfrentarán a una banda rebelde de motociclistas Kinaho. Este hecho, unido a la guerra abierta entre el jefe del crimen local, Kai Proctor (Ulrich Thomsen) y el nuevo jefe de los Kinaho, Alex Longshadow (Anthony Ruivivar), crea un polvorín que amenaza con estallar.

Banshee ha sido desarrollada por el creador de True Blood Alan Ball siendo creación de Jonathan Tropper y David Schickler. Ball, Tropper y Schickler también son productores ejecutivos junto con Peter Macdissi y Greg Yaitanes.

Si voy directo al grano, esta segunda temporada me ha gustado un poco menos que la primera, aunque considero que estamos ante un fenomenal entretenimiento que sabe a lo que juega. Banshee triunfa gracias a sus carismáticos protagonistas, el sheriff Lucas Hood, su ex-amante Carrie o el jefe del crimen local Kai Proctor, que son personajes rotos a los que la vida ha golpeado fuerte y que no se dejan doblegar. Me encanta la complejidad de todos ellos y como pueden realizar actos heroicos y criminales casi a la vez. No siendo personaje «buenos», sí que tienen su propio sentido de lo que es correcto y lo que no, y lo defienden hasta las últimas consecuencias.

Pero no son solo los protagonistas, todo el reparto es importante y cuenta con matices chulos durante esta temporada. En el lado policial, los agentes de Banshee Siobhan Kelly (Trieste Kelly Dunn) es una dura agente que sufrió malos tratos por parte de su antiguo novio, Emmett Yawners (Demetrius Grosse) un agente afroamericano que aguanta estoicamente el racismo del condado, o el agente Brock Lotus, (Matthew Joseph Servitto ), agente que quiere ser Sheriff a toda costa aunque tenga reconocer que a veces Hood consigue resultados que no serían posibles por métodos convencionales.

Fuera de las fuerzas del orden, la sobrica de Proctor, Rebecca Bowman (Lili Simmons) que encuentra en su tío la única persona que la ayuda cuando es expulsada de su hogar amish, o Jason Hood (Harrison Thomas) el hijo del verdadero Hood que llega al pueblo, son otros de los personajes que son oro puro desde un punto de vista narrativo.

Narrativamente, la temporada no me ha parecido tan compacta como la primera. Hay una subtrama relativa a Rabbit, el jefe de la mafia rusa de Nueva York, que no aporta casi nada a lo ya visto y que parece ser un añadido que evita que disfrutemos de lo bueno, que son los problemas que existen en Banshee entre el sheriff y Proctor, y entre él y los Kinaho de Alex Longshadow.

Hecha esta matización de lo menos bueno de estos episodios, la verdad es que en el aspecto dramático y de la evolución de los personajes, la serie vuelve a triunfar. El quinto episodio, en el que Hood recoge a Carrie después de un tiempo fuera del pueblo y contraponen lo que ambos querrían hacer, abrazar y besar a su amado/a, con una realidad en la que saben que no pueden estar juntos, me ha parecido un triunfo total.

En ese aspecto, hay un montón de momentazos de todos los personajes, como cuando Hood recuerda lo que fue entrar en prisión o conocemos al ex-novio de la agente Kelly que la maltrataba. El guión sabe construir buenos personajes que están muy alejados del ideal de héroe, pero que mola ver como intentar mejorar enfrentándose a sus problemas.

Banshee no engaña. En todos los episodios tenemos una o varias escenas de acción y al menos una de sexo, los espectadores sabemos a qué atenernos. Sin embargo, la violencia en esta temporada no va in-crescendo como en la primera temporada, sino que tiene unos estallidos brutales que me impactaron. En este sentido, me ha parecido que los guiones de esta temporada ha sido más crueles con varios personajes, de forma en que parece querer mostrar que no se puede ser buena persona en Banshee, al final el mal acaba por encontrarte y te machaca. Hay de hecho dos personajes cuyo final me pareció que tuvieron un final super inmerecidos. Probablemente por eso impacten tanto.

En este aspecto, el que evite dar finales felices tan trillados en la ficción americana, creo que es otro de los aciertos de esta segunda temporada. Por no hablar de que nos deja a las puertas de una guerra de bandas que puede ser un baño de sangre.

Lo mejor de cualquier serie de televisión es que te deje con ganas de más, y en eso Banshee vuelve a ser un triunfo total, no veo el momento de empezar a ver la tercera temporada. Comparto el trailer de esta segunda temporada, que te invito a que veas:

La segunda temporada de Banshee no es tan potente como la primera, pero sigue siendo una excelente entretenimiento para los que buscamos historias complejas protagonizadas por personajes con matices que viven en mundo grises alejados del blanco y el negro.

PUNTUACIÓN: 7/10