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Crítica de Invasión secreta (Disney+)

Termina Invasión secreta, la serie de Marvel Studios en Disney+ protagonizada por Samuel L. Jackson, y lo hace igual que empezó, sin pena ni gloria.

PUNTUACIÓN: 4.5/10

Capítulo 6. Hogar.

La esperanza de la humanidad recae sobre los hombros de Furia.

Este último episodio de Invasión secreta cuenta con dirección de Ali Selim, que ha dirigido toda la serie, con guion de Kyle Bradstreet, creador, junto con Brian Tucker, guionista en todos los episodios. El climax de esta serie tiene una duración de 38 minutos (sin los títulos de crédito iniciales y finales no llega a los 30 minutos de historia).

En el reparto tenemos a Samuel L. Jackson como Nick Fury, Kingsley Ben-Adir como Gravik, el líder de un grupo de Skrulls rebeldes, Emilia Clarke como G’iah, la hija de Talos y nueva heroina del MCU, Charlayne Woodard como Priscilla Fury / Varra, la Skrull la esposa de Nick Fury, Olivia Colman como Sonya Falsworth, una agente de alto rango del MI6 y antigua aliada de Fury. Por último, Don Cheadle como James «Rhodey» Rhodes y un skrull infiltrado y Dermot Mulroney como el presidente de los Estados Unidos Ritson completan a los principales personajes.

Buscando elementos positivos que comentar, Invasión secreta ha mejorado con los episodios cortos de 30 minutos en los que han ido al grano, como ha sido en el final de la temporada. También debo decir que creo que los efectos CGI y las prótesis (si es que se han usado) de Gravik y G’iah del último episodio al menos en la tablet han lucido bastante bien. En general no puede decirse que las producciones de Marvel Studios luzcan cutres o baratas en pantalla, y no es el caso tampoco con esta Invasión secreta, con un diseño de producción que creo que era más que adecuado a lo que se quería contar. Otra cosa es la habilidad para hacerlo o usar los recursos a su disposición.

El problema como ya nos estamos acostumbrando con las series de Marvel Studios en Disney+ no es el concepto general de la serie, que es correcto, sino la mediocre ejecución de todo. Empezando por un guion que me ha parecido super flojo y una dirección sin chispa que vuelve todo anodino y sin interés. Tras haber visto Invasión secreta lo más normal es que NO vea ninguna película o serie dirigida por Ali Selim, un director muy muy flojo, ni las próximas series creadas por Kyle Bradstreet. Cuando se anunciaron las series de televisión del MCU en Disney+ ya comenté que el principal reto al que se enfrentaba Marvel Studios era de calidad, porque era imposible producir tantas películas y series simultáneamente sin que la calidad disminuyera, dado que los creativos brillantes no se podían encargar de todo y tendría que contratarse a personas menos dotadas (profesionalmente). Un par de años más tarde, se confirma la mediocridad visual y la intrascendencia en las historias.

Nick Fury como personaje importante del MCU ha salido muy dañado de esta Invasión secreta. Hemos descubierto que ama a su mujer skrull Varra, pero eso no le impidió abandonarla sin una llamada durante años. En realidad, no han sabido explicar de forma satisfactoria más allá de «soy un mierda» porqué se fue a trabajar al satélite S.A.B.E.R. (el satélite en órbita de S.W.O.R.D.) y abandonó a todo el mundo durante varios años. Porque una depresión de caballo le hubiera impedido trabajar en cualquier cosa, no para unas cosas no puedo pero para el resto si. Si sumamos esto a la forma en que se aprovechó de los skrulls, queda un personaje nada heroico y bastante odioso. Tras cinco episodios previos en los que todos anticipábamos un enfrentamiento final entre Fury y Gravik que de alguna manera nos recordara que Fury es el puto amo, sobre todo teniendo en cuenta que Gravik mató a María Hill delante de él al comienzo de la serie usando la cara de Fury, la serie ha planteado un giro de bombero torero que ha dejado a Fury en muy mal lugar al dejar que otra persona se enfrente al villano.

G’iah ya se había confirmado como una Super Skrull en el cuarto episodio, y ya anticipé en mis reseñas de los episodios anteriores que todo se dirigía hacia un final que la presentara como una nueva superheroína del MCU. Y si no una heroína, cosa que está por ver debido a su naturaleza ambigua, al menos si un nuevo ser superpoderoso del MCU. Esa parte efectivamente se ha confirmado. Pero el plan de Fury de dejar que G’iah se enfrente sola a Gravik es ridículo. Sobre todo en la parte de darle a ella el vial con «La Cosecha», el conjunto de ADN de todos los superhumanos que estuvieron en la batalla contra Thanos. Esto es ridículo porque G´iah llega hasta Gravik ANTES de darle el vial, por lo que realmente no lo necesitaba para encontrarle y desde luego, para enfrentarse a él, dado que ambos son Super Skrulls. En caso de perder, hubieran dado a Gravik un poder tremendo con el que podría hacerse con el control de la Tierra, y esto es algo que se hacía sin ninguna necesidad. Aparte que si G´iah recibe la dosis del ADN de La Cosecha junto a Gravik es totalmente por casualidad. La ejecución de toda esa parte es ridícula y rompe en pedazos la suspensión de credulidad.

La pelea entre G´iah y Gravik debería ser super potente y emocionante, pero G´iah apenas ha aparecido ¿10 minutos? en total en toda la serie y no hemos llegado a conocerla o a importarnos, por lo que no llega a haber ninguna conexión emocional que haga que nos interese. Por cierto, acabo de recordar que en Hulka hace unos meses se rieron de la supuesta obligación de plantear un climax final entre seres superpoderosos, que es justo lo que han hecho en esta serie sacándose de la manga en el último momento un aumento en sus poderes absurdo que justifique una pelea que se hubiera podido producir igual sin ellos. Aunque hubiera sido menos espectacular. Me da pena la forma en que la serie ha desaprovechado a Emilia Clarke a lo largo de la serie, y un combate de CGI no arregla este problema.

Tengo que reconocer que en general no me ha gustado Kingsley Ben-Adir como el villano Gravik, no me ha parecido que tenga ni el carisma ni la presencia en pantalla esperada para un villano del MCU. Y la verdad es que me parece una pena que justo la escena en la que Ben-Adir está realmente bien al decirle las verdades a Fury sobre como se sintió tras ser abandonado por él, quede negado emocionalmente cuando se descubre que no era Fury sino G´iah con la que estaba. He hecho, al no ser Fury, todo su discurso es un engaño, por lo que el protagonista no tiene una conclusión correcta con el villano, empezando porque no es el quien le derrota. Don Cheadle también ha sufrido como el James Rhodes skrullizado por culpa de un guion de trazo grueso que no le ha permitido ningún margen para hacer nada interesante. La escena de su muerte fue como todo en la serie, un momento sin chispa.

Samuel L. Jackson tiene 71 años y claramente ya no está para muchos trotes en lo relativo a la acción. Dentro de los parámetros del género de superhéroes era lógico y esperable un combate final entre los dos Super Skrulls, pero tras el final del episodio anterior en el que Fury se preparaba para la acción, en lo referido a él este final es una decepción anticlimática total. Por cierto, en la reseña del quinto episodio ya comenté lo absurdo que fue que Fury dejara vivo al Skrull Rhodes junto al presidente herido en el hospital porque podría intentar asesinarlo cuando quisiera. En este episodio se ha confirmado que si lo hubiera matado entonces hubiera revertido a su forma skrull, con lo que nos hubiéramos ahorrado muchos de los problemas posteriores. Pero la ejecución del final me ha parecido muy muy floja también. Comenté en las semanas anteriores que no he conectado nada con el papel que le han hecho interpretar a Olivia Colman, al hacer que Sonya Falsworth sea una super espía del MI6 que alterna una actitud de maruja empática y divertida con su trabajo como fría asesina. En este final hay que añadir unas habilidades de ninja que han provocado que este climax haya resultado ridículo.

Y por si fuera poco, el final en lo relativo al millón de Skrulls que viven entre nosotros me parecido un bluf tremendo. 6 episodios para esto. Han matado a Talos (da la sensación que Ben Mendelsohn estaba que se moría por escapar del MCU) y han sido expuestos ante la opinión pública y los gobiernos, que quieren destruirles, pero siguen entre nosotros. Unos Skrulls que sin embargo si eran conocidos en ámbitos de SHIELD y SWORD sin que nunca hubiera un problema. El no-final que tuvimos no me deja son ganas de ver nada que tenga a esta raza de protagonista, a no ser que Grant Morrison lo escribiera, cosa que no va a pasar.

Como ya se podía anticipar, los humanos suplantados no están muertos, luego no hay un problema real para los personajes del MCU. Se dice que Rhodes lleva prisionero bastante tiempo, pero no se concreta cuanto, y si esto puede haber tenido repercusiones en el robo de la tecnología de Máquina de Guerra. Algo que entiendo que será el punto de partida para la próxima Armor Wars, que no se sabe si va a ser serie o película. Sin embargo, Rhodes ha sido otro elemento muy muy flojo, y no tengo claro que aguante por si sólo una película individual. Desde luego, si Invasión secreta debía servir de plataforma de lanzamiento de próximos contenidos, la jugada no ha salido bien.

Como todo en la serie, la ejecución de todo ha sido super mediocre y descafeinado. Habían momentos y escenas de sobra para hacer flipar a los aficionados, como por ejemplo la muerte de Talos al final del cuarto episodio. Pero el resultado final ha sido super decepcionante. Otro elemento que a estas alturas hay que criticar más es el concepto planteado por creativos poco dotados de Marvel Studios de hacer series de 6 episodios con una historia unitaria como si fuera una película ampliada. La televisión como entretenimiento periódico igual que los comics debe resultar satisfactorio en cada episodio o los espectadores no acudiremos la semana siguiente. Conozco mucha gente que vio algún episodio y dejó la serie a mitad porque lo que vieron les resultó aburrido. Y tenían razón porque la serie lo era. Entiendo que la propuesta de Daredevil con 24 episodios y volviendo a la idea del «caso de la semana» indica que Marvel se ha dado cuenta de este problema y busca ofrecer algo diferente a lo visto hasta ahora, pero la verdad es que esta idea de «película ampliada» como todo en la Invasión secreta podía lucir genial en el papel pero ha fracasado en su ejecución.

Kevin Feige debe empezar a tomarse en serio contratar a profesionales válidos únicamente por su habilidad profesional y no pensando en cubrir primero algún tipo de cuota identitaria y dentro de ese nicho se busca a los profesionales disponibles. Las series del MCU han sabido ser diferentes entre si, pero eso por si sólo no es suficiente si el resultado final no es bueno. Por eso hacen falta profesionales válidos que generen un salto de calidad y carisma que no han tenido las última series, cuyo cuestionable resultado final está provocando una huida de clientes y unas audiencias cada vez menores. Hay mucha gente que ya tiene claro que no pasa nada por saltarse una serie de televisión del MCU porque las últimas han sido malas. Al ser todo MCU, eso plantea la siguiente pregunta ¿por qué hay que pagar por ver una película por mucha marca MCU que tenga si pinta a que no va a resultar satisfactoria y pinta a malilla como las series? No es una pregunta retórica, ya está pasando. Y si a eso sumamos el hecho que en pocas semanas o meses se sabe que estará disponible en Disney+, todo parece que se está alineando contra los próximos estrenos del MCU.

Por mucho amor que le tenga a los comics de Marvel, no puedo decirle a todo el mundo que ha dejado a mitad Invasión secreta o ni siquiera la empezaron que se equivocan, porque la verdad es que la serie ha sido bastante mediocre. Es normal que el público no quiera ver estas series. Por cierto, si los creativos de Marvel pensaban que Invasión secreta iba a provocar un aumento de interés para The Marvels, dado que Nick Fury también aparece en la película, la mediocridad de esta serie ha provocado el efecto contrario, porque no tengo ningún interés en ver nada más de Fury. Tampoco me interesa Kamala Khan. Visto lo visto, The Marvels puede ser la primera película de Marvel Studios que no veré el primer fin de semana de estreno, creo que me esperaré a ver opiniones de gente que conecte con mis gustos que me indiquen si merece la pena pagar para verla en el cine. Ahora mismo, Marvel Studios no tiene elementos para estar contenta.

Comparto el trailer de esta serie:

Sumando Ms. Marvel, Hulka y ahora Invasión secreta, Marvel Studios acumula en televisión una racha negativa tremenda. Hace falta una corrección de rumbo urgente porque esto ya está afectando la rentabilidad de las películas y a la imagen de marca de Marvel en su conjunto.

PUNTUACIÓN: 4.5/10

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Crítica de Invasión secreta episodio 4 (Disney+)

Cuarto episodio de Invasión secreta en Disney+ y las cosas mejoran respecto a lo visto hasta ahora al mostrarse el plan de Gravik para desestabilizar la Tierra.

PUNTUACIÓN: 6/10

Episodio 4. Amado

Furia ha de hacer algunos sacrificios difíciles.

El episodio de 38 minutos (34 sin los títulos de crédito finales) ha sido dirigido por Ali Selim, director de todos los episodios de esta serie creada por Kyle Bradstreet. El guion lo firma Brian Tucker en solitario, que ha participado en la escritura de los guiones de todos los episodios.

En el reparto tenemos a Samuel L. Jackson como Nick Fury, Ben Mendelsohn como Talos, Kingsley Ben-Adir como Gravik, el líder de un grupo de Skrulls rebeldes, Emilia Clarke como G’iah, la hija de Talos, Charlayne Woodard como Priscilla Fury / Varra, la Skrull la esposa de Nick Fury. Por último, Don Cheadle como James «Rhodey» Rhodes y Dermot Mulroney como Ritson, el presidente de los Estados Unidos completan a los principales personajes de este episodio.

Mi principal problema con Invasión secreta en los tres primeros episodios fue que la serie había decepcionado al plantear una serie de Marvel Studios en lo que los personajes hablaban todo el rato, con unos diálogos francamente mejorables, sin hacer nada interesante en pantalla. Este cuarto episodio es de momento el más corto de toda la serie, lo cual es una buena noticia, ayudando a que el ritmo sea más acertado, y mejora sustancialmente en ambos apartados. Por el lado de la acción, tenemos una gran escena con una emboscada que sufre el Presidente de los Estados Unidos a manos de los rebeldes dirigidos por Gravik que luce como si una parte importante del presupuesto se hubiera guardado para este momento. Esta escena nos ha dado una pincelada de lo que se espera en una serie de Marvel Studios, lo cual no puede ser más que positivo.

Además, la serie presenta varias escenas muy emocionantes, dos de Fury con su esposa Priscilla (Varra en su identidad Skrull), en las que veremos que ella siempre le amó aunque en su momento adoptó esa identidad humana para que Fury se sintiera atraído por ella y así poder controlarle. También está muy bien la conversación de Talos y su hija G’iah, que nos muestra lo desaprovechada que ha estado hasta ahora Emilia Clarke y que Talos se engaña a si mismo con su sueño de una existencia pacífica en la Tierra con unos políticos humanos dando territorios que los Skrulls puedan llamar «suyos» al descubrir que los skrulls son seres pacíficos aliados de los humanos.

Uno de los subargumentos de la serie trataba de las investigaciones de los Skrulls para crear un Super Skrull. En este episodio ya sabemos que no hay un único skrull mejorado sino dos (que sepamos): Gravik y G´iah. Esto anticipa lo que puede ser el climax final dentro de dos semanas y el posible nacimiento de una nueva heroina del MCU, y confirma lo imposible que resultaba que Marvel hubiera contratado a Emilia Clarke para un papel tan minúsculo como el que había tenido hasta la semana pasada. Por cierto, Emilia Clarke vuelve a aparecer en apenas una escena en este episodio, por lo que aún estoy esperando el salto adelante en importancia de su personaje a partir de ahora. Cosa por otro lado inevitable tras el shock que hemos tenido en el final de este episodio.

La semana pasada comentaba que una parte fundamental de la trama de la Secret Invasion comiquera fue la paranoia al no saber quien podía ser un skrull infiltrado. Esa sensación nunca ha existido en la serie de Disney+, pero está bien que el episodio confirme lo que era un secreto a voces tras ver el episodio de la semana pasada: que James «Rhodey» Rhodes es un skrull infiltrado. De hecho, era algo tan evidente dado que no podía ser nadie más que ni intentan que la revelación provoque algún impacto en el espectador. Queda por ver en qué momento sustituyeron a Rhodey, pero como vimos al comienzo de la serie los Skrulls guardan los cuerpos de los secuestrados como forma de acceder a sus recuerdos (o por el motivo que sea), por lo que no puede descartarse que al final de la serie veamos al verdadero Rhodey humano retomar su vida con una personalidad diferente a la que hemos visto hasta ahora. Gracias a este giro (que no es tanto) cabe la posibilidad que descubramos que la personalidad de gilipollas de Rhodey mostrada hasta ahora no fuera suya sino del skrull. Por cierto, que un skrull renegado haya tenido acceso a la armadura de Máquina de Guerra, ¿será la clave de las anunciadas Armor Wars? ¿A quién han vendido los Skrulls la tecnología Stark?

El episodio mejora por unos diálogos intensos que conectan con el meollo de la cuestión, pero también por la escena de acción antes mencionada. Dicho esto, ¡qué mal rodada está! Es difícil hacerse una idea de la ubicación espacial y cómo se mueven los combatientes. Bueno, lo malo es que sí te puedes hacer una idea, pero no tiene sentido. La llegada de Fury y Talos y como llegan hasta el presidente adelantando a los skrulls de Gravik es también una situación ridícula siendo generosos. Busco cosas buenas que comentar, y que se haya invertido pasta en esta escena es una realidad. Sin embargo, hay que lamentar que lo que tienen en medios no lo tengan en calidad para coreografíar un buen tiroteo.

Esto me devuelve a un comentario recurrente que me viene a la cabeza cada vez que termino de ver un episodio. Invasión secreta no es una mala serie, no hay nada que me parezca terrible como en Ms. Marvel o Willow. Pero tampoco es demasiado buena. A falta que lo peten en los dos episodios restantes, cosa que a estas alturas no creo que vaya a suceder, la serie habrá fallado a la hora de presentar una historia interesante con personajes inolvidables, siendo en gran medida un guion bastante intrascendente. Me gustaría que me callaran la boca con un gran final que me obligara de desdecirme, pero sinceramente lo veo complicado teniendo en cuenta la calidad mostrada hasta ahora por el director Ali Selim.

Con todo, me da la sensación que cada semana menos espectadores vemos Invasión secreta, lo que mostraría a las claves que la serie no ha conectado con el público.

Comparto el trailer de la serie:

Invasión secreta ha mejorado esta semana y podemos decir que estamos ante el mejor episodio de la serie. Teniendo en cuenta el nivel previo, esto tampoco es algo para tirar cohetes.

PUNTUACIÓN: 6/10

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Crítica de Invasión secreta episodio 2 (Disney+)

Segundo episodio de Invasión secreta en Disney+ y mismas sensaciones que la semana pasada. Ya veis por la puntuación que eso no son buenas noticias.

PUNTUACIÓN: 5/10

Episodio 2: Promesas.

Furia se enfrenta a su pasado y a su presente.

Segundo episodio de esta serie creada por Kyle Bradstreet. El episodio ha sido dirigido por el director Ali Selim, que dirigirá toda la serie, con un guion de Brian Tucker a partir de un argumento suyo y de Brant Englestein. El capítulo tiene una duración de 58 minutos, 53 sin los títulos de crédito finales, y mantiene la música de Chris Bowers.

En el reparto tenemos a Samuel L. Jackson como Nick Fury, Ben Mendelsohn como Talos, Don Cheadle como James «Rhodey» Rhodes, Kingsley Ben-Adir como Gravik, el líder de un grupo de Skrulls rebeldes, Emilia Clarke como G’iah, la hija de Talos, Olivia Colman como Sonya Falsworth, una agente de alto rango del MI6 y antigua aliada de Fury.

La semana pasada comenté que una de las cosas que NO me gustó del inicio de Invasión secreta es que el episodio no presentaba adecuadamente el contexto o la historia de los personajes, resultando confusa incluso a espectadores veteranos del MCU como yo. Este episodio ofrece en parte una solución a este problema, al empezar con un flashback en 1997 en el que veremos cómo conoció Fury a Gravik (el villano en el presente) y la promesa que Fury hizo a los skrulls que aparentemente incumplió y que motiva en parte los hechos actuales. Esto es una mejora respecto a la semana pasada, pero en el fondo me indica un problema en el montaje de la serie al colocar escenas en un orden raro.

Furia prometió que si los Skrulls trabajan para él infiltrándose donde les indicara, les encontraría un planeta que llamar hogar con la ayuda de Carol Danvers. 25 años más tarde, los Skrulls liderados por Gravik se han cansado de esta promesa incumplida y han decidido quedarse con la Tierra. Y en estos años los Skrulls se han infiltrado hasta el punto que la Primera Ministra de Reino Unido o el Secretario General de la OTAN son Skrulls y trabajan para Gravik. El episodio tiene como positivo el descubrimiento que el grupo de Gravik está investigando para crear un Super Skrull, o al menos conseguir que los poderes de toda la raza aumenten. También me gusta la idea que Fury creía que habían unos miles de Skrulls en el planeta cuando en realidad todos los Skrulls supervivientes al exterminio Kree, un millón, se encuentran en la Tierra. Que Fury no lo supiera ya es indicativo que el antiguo jefe de SHIELD no es tan bueno como él pensaba. Si esto se ha escapado a su control, ¿qué otras cosas desconoce?

En los comics Marvel, durante el arco de Invasión Secreta en Nuevos Vengadores escrita por Brian Michael Bendis, la sensación de paranoia al descubrir que algunos héroes y villanos eran skrulls infiltrados fue de largo lo mejor de esa etapa. Sin embargo, en la serie de televisión de momento esa sensación ni está ni se la espera. ¿Cómo va a impactarnos que el jefe de la OTAN sea un Skrull si es la primera vez que le vemos? En relación con la muerte de ESE personaje la semana pasada, comentaba más como wishful thinking que otra cosa que hubiera estado genial que al morir se mostrara como una skrull que había trabajado durante años con Fury sin él saberlo. Eso hubiera sido un puntazo al nivel de la muerte de Elektra en Nuevos Vengadores que inició el arco en los comics. Pero no ha pasado, claro, la sensación que tengo es que la actriz se había casado de ser una secundaria con 30 segundos en pantalla con cero progresión o profundidad, y le viene bien despedirse del MCU para poder hacer otras cosas.

Aún hay tiempo de alguna sorpresa impactante, aunque por ejemplo NO creo que Rhodey vaya a confirmarse como un skrull. Dicho esto, la forma en que confirma que sabe de la existencia de esta raza y al mismo tiempo parece que no va a hacer nada me plantea dudas, la verdad. Aparte de que nunca tuve claro que Fury trabajara para el gobierno de los Estados Unidos tras la caída de SHIELD, aunque haya vivido años en el satélite de SWORD. Y A todo esto, ¿Qué pasó con Everett Ross? ¿Está muerto o sólo murió el skrull que se hacía pasar por él y él está retenido en algún sitio?¿O acaso Ross siempre fue un skrull? Son interrogantes que de momento siguen pendientes de ser aclarados. Dicho esto, el cliffhanger de esta semana no me funciona como no lo hizo descubrir que la Primera Ministra de Reino Unido es una skrull, al ser un personaje que acabamos prácticamente de conocer. Aparte que la sorpresa no es tanto que sea un skrull, cosa que Fury conoce desde el principio, sino que esa persona exista en su vida y la hubiera mantenido en secreto hasta ahora.

No creo que Invasión secreta sea un desastre, pero de momento la historia me parece intrascendente y sin fuerza. Empezando por un Fury que sigue creyendo ser el puto amo que ya no es, y un Gravik que tiene cero carisma y nula sensación de amenaza. Esto es posible que mejore en próximos episodios, pero lo que no tiene solución es la mediocre dirección de Ali Selim y un diseño de producción televisivo cutrillo, a pesar de los continuos saltos de localizaciones. Es curioso que ya he visto dos episodios, un tercio del total, y no tengo sensación de haber visto cosas demasiado interesantes. El reparto lo encuentro super infrautilizado con unos diálogos son chispa y unas situaciones sin chispa. Algo que me parece una pena.

Dado que la serie no es un desastre, sólo muy muy normalita, pienso verla en su totalidad. The Witcher también pinta a cutre, y si puedo ver series malillas en otros ámbitos (te miro a ti, Citadel), creo que no me supondrá ningún problema ver esta serie de Marvel Studios. Por cierto, comentar que mi hijo ya me dijo anoche que no le apetecía ver la serie, como ya pasó en su momento con Willow, lo cual me dice que no tienes que ser alguien muy sesudo para darte cuenta cuando algo no está funcionando.

Y es que es un hecho palpable que las series de Disney+ han bajado el nivel de forma alarmante. Un problema que empieza con la calidad (o falta de ella) de los profesionales contratados para su desarrollo y ejecución, empezando por el creador Kyle Bradstreet pero también el director de la serie, Ali Selim.

Comparto el trailer de esta serie:

Invasión secreta tiene posibilidades de mejorar si aciertan con el desarrollo y la resolución, pero la realidad es que lo visto hasta no me ha entusiasmado.

PUNTUACIÓN: 5/10

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Crítica de Invasión secreta episodio 1 (Disney+)

Han pasado casi siete meses desde el estreno del Especial Navidad de Guardianes de la Galaxia en Disney+. Eso es muchísimo tiempo en televisión. Y por fin pudimos ver el arranque de Invasión secreta, la serie que significa el retorno a Samuel L. Jackson a su personaje fetiche Nick Furia. Comento mis impresiones de este primer episodio.

PUNTUACIÓN: 5/10

Nick Furia descubre que una facción de cambiaformas skrulls está invadiendo la Tierra en secreto.

Secret Invasion es una miniserie de televisión estadounidense creada por Kyle Bradstreet, un guionista y productor conocido por su trabajo en Mr. Robot que además de crear la serie dirige al equipo de guionistas. La serie de seis episodios ha sido dirigida por Ali Selim, un director de cine y televisión nacido en Minnesota y de ascendencia egipcia y alemana que ha dirigido más de 850 anuncios de televisión, cinco documentales de media hora y varios vídeos musicales. La serie se inspira en la historia homónima de Marvel Comics aunque irá como suele ser el caso completamente a su aire, y es la novena serie de televisión del Universo Cinematográfico Marvel (MCU).

Además de Samuel L. Jackson retomando a Nick Fury, en la serie asistimos al retorno de caras conocidas dentro del MCU como son Ben Mendelsohn como Talos, Don Cheadle como James «Rhodey» Rhodes, Cobie Smulders como Maria Hill y Martin Freeman como Everett K. Ross.

Los nuevos actores que se incorporan al MCU son Kingsley Ben-Adir como Gravik, el líder de un grupo de Skrulls rebeldes, Emilia Clarke como G’iah, la hija de Talos, Olivia Colman como Sonya Falsworth, una agente de alto rango del MI6 y vieja aliada de Fury, y Dermot Mulroney como Ritson, el presidente de los Estados Unidos.

Empezando a valorar este primer episodio, tengo que reconocer que las sensaciones no han sido buenas. La serie inspirada en el comic de Brian Michael Bendis y Leinil Francis Yu prometía una historia de espionaje y conspiraciones al tener que enfrentarse Nick Furia a la amenaza de unos Skrulls rebeldes que buscan desestabilizar el planeta gracias a sus habilidades de alteración de su apariencia física. Mezclar el género de espías con una buena dosis de paranoia si se hacía bien podía darnosa una serie bien maja. Sin embargo, este primer episodio ha tenido un tremendo problema de falta de tensión que hizo imposible que ninguna escena me enganchara. He leído que se ha calificado a la serie como «sobria», y dentro que es una opinión subjetiva, en mi caso sería sinónimo de «falto de interés» y casi de «aburrida».

El reparto de Invasión secreta es genial, con Samuel L. Jackson, Ben Mendelsohn, Cobie Smulders, Martin Freeman y la presentación en el MCU de Olivia Colman y Emilia Clarke entre otros. A Don Cheadle o Delmot Mulroney no les incluyo porque su aparición en el capítulo ha sido apenas un cameo de pocos segundos. Sin embargo, todos están super desaprovechados con unos diálogos bastante flojos y sobre expositivos y una puesta en escena televisiva cutrilla que convierte en mediocre una trama que debería enganchar desde el minuto uno y no lo hace.

En esto hay que hacer un inciso, porque creo que la serie realiza un salto de fe demasiado grande asumiendo que conocemos a todos los personajes. Y aunque por supuesto sabemos quien es Nick Furia y recordamos vagamente que Talos era el Skrull bueno de Capitana Marvel, la serie no realiza un buen trabajo en la presentación de nadie. Empezando por un Furia que se ha pasado años en la estación espacial S.A.B.E.R. sin de momento darnos una explicación razonable del motivo. No, que Fury diga que tuvo una crisis de fe por el Blip de Infinity War no sirve, dado que en ese momento Fury se encontraba en la clandestinidad tras desaparecer SHIELD. Por no haber explicado bien, creo que de hecho no sabemos que es S.A.B.E.R. (la estación espacial), ni desde luego se nombra a S.W.O.R.D., la organización que teóricamente cubrió el hueco de SHIELD en este caso centrada en estudiar y vigilar posibles amenazas extraterrestres. Y esto es si mismo no es grave, pero si la presentación no es buena incluso para alguien como yo que me considero un fan del MCU que está al día, lo que habrán podido pensar espectadores ocasionales puede ser eso multiplicado por 100. Al final, se trata de ponérselo fácil al espectador, cosa que creo la serie no hace.

Reconozco que no tenía ningún hype previo por esta serie, pero los siete meses sin contenidos de Marvel Studios en Disney+ hizo que fuera a ver seguro esta serie. También tengo claro que la serie de Disney+ coge el nombre del comic-evento de Bendis y Yu pero no iba a tener nada que ver más allá de la premisa básica. Sin embargo, dentro que la historia estaba claro que sería diferente, al menos confiaba que la serie buscara recrear la sensación de paranoia al no saber en quien confiar, al poder ser cualquiera un skrull infiltrado. Y al menos en este primer episodio la falta de este elemento ha sido uno de los mayores chascos del conjunto. Para ser un primer episodio que debe enganchar, no lo ha conseguido.

Por no gustarme, no me gustan ni las localizaciones ni en general el diseño de producción. He leído que la serie se rodó en Inglaterra, pero al menos en este episodio hay dos escenas de persecución, una nocturna y la segunda de día, que diría que pasan por la misma escalera, lo cual me ha parecido super cutre. En ese sentido, los sets de rodaje y las localizaciones no transmiten que estemos ante una superproducción como al menos sí tuvimos en Falcon y el Soldado de Invierno. Todo está planteado de la forma menos atractiva posible.

El episodio de 55 minutos (contando los títulos de crédito finales), plantea un final con una sorpresa super potente a modo de cliffhanger final. Este final incluye varias explosiones que deberían ser de las escenas más espectaculares de toda la serie. Lamentablemente, de nuevo está rodada de forma super montonera, con el plus negativo de unas explosiones de CGI que excepto la primera no se las han currado nada. En esto creo que también juega un factor importante la nula capacidad actoral de Kingsley Ben-Adir como Gravik, el líder del grupo de Skrulls rebelde y a priori villano de la serie, un actor que no tiene ni presencia en pantalla ni transmite ningún tipo de sensación de amenaza, y que pinta a que puede ser lo peor de una serie muy, muy normalita.

La suerte que tiene Invasión secreta es que son tan sólo 6 episodios y que estas semanas están siendo flojillas en cuanto a estrenos televisivos que me interesen. Es por esto que a menos que los próximos dos episodios sean penosos, cosa que no espero que vaya a pasar, creo que veré la serie entera para poder valorarla una vez esté completa.

Dentro de la sorpresa final, me gustaría pensar que existe la posibilidad que la semana próxima descubriremos un giro que conecte con la paranoia de que cualquiera puede ser un Skrull encubierto. Si esa sorpresa se confirmara, creo que podriamos estar ante una buena idea, a falta eso si de la ejecución. Aunque claro, hasta la semana que viene no sabremos si esto es así o no.

Teniendo en cuenta la decepción de Ms. Marvel o Hulka, esperaba que el arranque de esta Invasión secreta fuera la bomba para engancharnos. Me sabe mal comprobar que no ha sido el caso. Y ya no por mi, veo difícil que este arranque enganche a espectadores no fans del MCU. Aunque no es indicativo de nada, mi hijo no parecía muy emocionado con el episodio, y mi mujer se puso a ver videos de Tick-tock. La cosa no pinta bien…

Comparto el trailer de la serie:

Invasión secreta ha empezado de forma decepcionante. Esperemos que aumente su interés en las próximas semanas, porque este arranque no ha sido para tirar cohetes.

PUNTUACIÓN: 5/10

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