The Babysitter fue una de las sorpresas de Netflix nos regaló en 2017, una divertida serie B que ofreció un estupendo entretenimiento sin complejos lleno de gore y puntazos over-the-top. Tres años después nos llega esta secuela que lamentablemente no sabe estar a la altura de su predecesora.
PUNTUACIÓN: 4.5/10
Dos años después de derrotar a la secta satánica liderada por la niñera Bee, Cole trata de olvidar su pasado para centrarse así en sobrevivir al instituto. Cuando viejos enemigos regresan, Cole no tendrá más remedio que volver a enfrentarse a las fuerzas del mal. (FILMAFFINITY)
McG (Los Ángeles de Charlie 1 y 2, Terminator Salvation) vuelve a dirigir esta secuela de su divertida The Babysitter, estrenada también en Netflix. Dan Lagana escribe el guión basado en los personajes creados por Brian Duffield, a partir de una historia suya junto a Brad Morris, Jimmy Warden y el propio McG.
La película cuenta con fotografía de Scott Henriksen, montaje de Martin Bernfeld y Música de Bear McCready.
La película está protagonizada por Judah Lewis como Cole, el joven chaval de la primera película que ha crecido y tiene muchos problemas en el instituto al no conseguir que le creyeran sobre lo que pasó en la primera parte. Repite también papel Emily Alyn Lind como Melanie, la vecina de Cole que es su única amiga del intituto y le invitará a una fiesta de fin de semana. El único personaje nuevo de importancia es Jenna Ortega como Phoebe, una nueva estudiante con aspecto de ser una troublemaker que llega al instituto y se verá metida en todo el meollo.
Aunque parezca mentira, repiten en la película Samara Weaving como Bee, la Babysitter del infierno de la primera parte, junto a sus compañeros de crímenes, Robbie Amell como Max, Hana Mae Lee como Sonya y Bella Thorne como Allison.
McG describió esta The Babysitter: Killer Queen como inspirada en Fausto, pero con bromas ridículas como si fuera una película de Mel Brooks, lo cual no tendría nada de malo si se hiciera bien. Y no voy a alargarlo más de la cuenta, esta película no es buena. No es buena ni como entretenimiento descerebrado.
La primera película partía de una premisa simple que fue desarrollada de forma muy chula, como un montón de puntazos, mucha sangre y un sentido del humor negro que encajaba muy bien con el tono que se quería transmitir. Sin embargo, esta continuación juega a romper con la mayoría de elementos que funcionaron en dicha película sin ofrecer nada mejor, creando un festival de auto referencias chuscas y unos giros ridículos hasta decir basta.
De hecho, los primeros 20 minutos de película, justo hasta el primer giro, sí consiguen recuperar el feeling y toques de humor de la primera película, pero acaban yéndose al traste por el deficiente guión y una puesta en escena chusquera. La primera película jugaba muy bien construyendo al tensión de forma que el climax de sangre y muerte fue una chulada y la guinda de un pastel bien realizado. Sin embargo, esta Killer Queen sufre desde el primer momento de «secuelitis», intentando ser más divertida, más over-the-top, más sangrienta pero sin crear ningún ancla emocional que haya que nos interesa nada de los que está pasando. Además, los momentos aún más sangrientos que la anterior fracasan, además de por todo lo anterior, por un CGI infame que canta a la legua.
Además, durante el visionado hay varios momentos de bromas privadas que sólo les hacen gracia a ellos que hacen aún más difícil conectar con la historia, como unas escenas de baile a mitad de película o el traje de pana que Cole lleva al instituto (inspirado en el cine de Wes Anderson) que solo sirve para crear una referencia vacía que no aporta nada y rompe la idea inicial de la película sobre que Cole era un chaval normal que se ve metido en una situación anormal.
The Babysitter: Killer Queen es una mala película bajo casi cualquier punto de vista. De hecho, su estreno en Netflix la va a permitir alcanzar un público mucho más ámplio del que merecería, y se une a la montaña de películas y series montoneras de usar y tirar del canal de streaming, que sigue más empeñado en inundarnos de contenidos, aunque estos no sean de demasiada calidad.
Comparto el trailer de la película:
The Babysitter: Killer Queen es una película muy, muy floja que cuesta de disfrutar incluso apagando el cerebro y poniéndolo en modo “entretenimiento descerebrado”. Netflix lleva una racha terrible, o quizá soy yo que no acabo de seleccionar correctamente qué ver.
PUNTUACIÓN: 4.5/10
Y si te gustó este artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que sigas mi blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.
¡Saludos a todos!