Archivo de la etiqueta: Patrick Wilson

Crítica de Expediente Warren: El último rito de Michael Chaves

Tenía ganas de que me gustara la última película de Expediente Warren: El último rito, dirigida por Michael Chaves. Lo que no esperaba era encontrarme un peliculón que lo hace todo bien.

PUNTUACIÓN: 8.5/10

Los investigadores de lo paranormal Ed y Lorraine Warren se enfrentan a un último caso aterrador en el que están implicadas entidades misteriosas a las que deben enfrentarse.

Expediente Warren: El último rito es la cuarta película de la serie The Conjuring creada por James Wan, tras Expediente Warren (James Wan, 2013), Expediente Warren: El caso Enfield (James Wan, 2016) y Expediente Warren: Obligado por el demonio (Michael Chaves, 2021). Dentro de este universo cinematográfico de terror encontramos las películas Annabelle (John R. Leonetti, 2014), Annabelle: Creation (Adam F. Sandberg, 2017), La monja (Corin Hardy, 2018), Annabelle comes home (Gary Dauberman, 2019) y La monja 2 (Michael Chaves, 2023).

Michael Chaves (1984) empezó su carrera realizando cortometrajes, consiguiendo llamar la atención de James Wan con su ópera prima La maldición de La Llorona (2019). Tras esto ha realizado varias de las películas del universo The Conjuring, hasta el punto de poder decirse que Chaves es uno de los hombres de confianza de Wan: Expediente Warren: Obligado por el demonio (2021), La monja II (2023) y ahora esta última película.

La película de 135 minutos de duración y un presupuesto de 55 millones de dólares ha contado con un guion de Ian Goldberg, Richard Naing y David Leslie Johnson-McGoldrick, a partir de una idea de Johnson-McGoldrick y James Wan, con fotografía de Eli Born, montaje de Gregory Plotkin y Elliot Greenberg, y música de Benjamin Wallfisch. Aunque esta cuarta película de Expediente Warren (The Conjuring) está pensada para cerrar la historia, su arrollador éxito de taquilla hace que sea casi imposible que la productora de James Wan Atomic Monster no se vaya a plantear una nueva película. Y es que tan sólo en su primer fin de semana de estreno la película ha recaudado más de 190 millones de dólares, lo que asegura que vaya a ser una de las películas más rentables del año.

La película está protagonizada por Patrick Wilson y Vera Farmiga, que vuelven a interpretar sus papeles como los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren. Mia Tomlinson es Judy Warren, la hija de la pareja. Ben Hardy como Tony Spera, el novio de Judy, Steve Coulter como el padre Gordon, Rebecca Calder y Elliot Cowan como Janet y Jack Smurl, los padres donde sucederán los hechos traumáticos de la película, completan el reparto.

Cuando una serie cinematográfica se alarga con múltiples películas, normalmente los espectadores esperamos que la calidad de cada nueva entrega vaya disminuyendo. Sobre todo en el género de terror, pero no sólo. Empiezo con este comentario porque fui al cine esperando que la película fuera entretenida y ya. Con eso ya me conformaba, no esperaba encontrarme ninguna genialidad. Y por eso podéis imaginaron el sorpresón positivo que me he llevado al descubrir que Expediente Warren: El último rito es un peliculón.

Hablamos de un películón dentro del género de terror al que se adscribe. Aunque sea un poco tonto decirlo, esta es la cuarta película de Expediente Warren, si te están esperando otra cosa no te puedes sorprender porque no sea lo que esperas. No es un terror de gore ni de giros loquísimos de guion. Además, como en películas anteriores, El último rito viene con la frase de «inspirada en hechos reales». Esto no significa que todo lo que vayamos a ver vaya a ser realista, dado que los sustos y las posesiones demoniacas van a estar presentes en todo momento, con escenas muy potentes situadas en el plano onírico / astral. Si entendemos que a partir de algo que pasó o no pasó en 1986 la película crea la historia que más les interesa, mejor para todos.

Tenía ciertos reparos cuando descubrí que la película superaba las dos horas de duración. Sin embargo, me gusta mucho que una vez pasado el intensísimo prólogo inicial, El último rito emplee tiempo en que conozcamos la vida de la familia Warren en 1986, muchos años después de uno de sus primeros casos en 1964 que terminó con el nacimiento prematuro de su hija Judy, y de la familia Smurl, en cuya casa tendrán lugar los hechos que los Warren tendrán que investigar. Como en una buena película de género negro, me gusta mucho que durante más de media película tengamos dos líneas narrativas en paralelo hasta que llegan a encontrarse. Es la típica estructura de «dos casos que acaban siendo el mismo caso» que tan habitualmente hemos visto en las historias de detectives, aplicado al terror.

La dirección de Michael Chaves me parece magistral dentro del género de terror. Chaves sabe colocar la cámara en el sitio justo para provocar el mayor impacto visual, planteando unas composiciones super elegantes que me mantuvieron en el borde de mi asiento a lo largo de toda la película. El ritmo en la primera mitad es lento, pero siempre interesante. En este caso NO se cumple la lógica que no comparto de «lento = aburrido». Además, la forma en que se va incrementando la tensión hasta llegar al climax final me parece modélico. Unido a lo anterior, tanto la fotografía como el montaje me parecen brillantes, dejando claro que los profesionales que han trabajado en la película son gente de gran experiencia que saben acertar en las decisiones que toman.

Por supuesto, si Expediente Warren: EL rito final triunfa, es por la calidad, química y personalidad del reparto de la película. Patrick Wilson y Vera Farmiga como los investigadores paranormales Ed y Lorraine Warren están maravillosos. Los Warren han abandonado sus investigaciones tras sufrir Ed un infarto y el médico avisarles que otro golpe al corazón podría ser fatal. Lorraine (Vera Farmiga) tiene habilidades paranormales, y durante 20 años ha enseñado a su hija Judy (Mia Tomlinson) para que cierre ese portal, a pesar que en los últimos tiempos las visiones son cada vez más fuertes e imposibles de bloquear. El caso de los Smurl conecta con los Warren sin ellos lleguen si quiera a imaginarlo, lo que hace que la amenaza se sienta personal. Me encanta ver la química y el cariño que muestran los miembros de la familia Warren, y eso es éxito de los tres protagonistas.

El resto del reparto empezando con Ben Hardy como Tony Spera, el novio y posterior marido de Judy, Steve Coulter como el Padre Gordon, amigo de los Warren que les informaba cuando había un caso sobrenatural, o todos los miembros de la familia Smurl, creo que cumplen perfectamente con lo que la historia pide de ellos.

En estos tiempos de «terror elevado» y de gafapastas avergonzados de ver una película de terror que buscan añadir calificativos para describir lo que han visto, resulta refrescante ver una película que sabe qué tipo de historia ofrece a los espectadores y lo hace de forma brillante. Michael Chaves no inventa ninguna rueda y todo entra dentro de lo esperable en el género de terror de posesiones. Pero es que todo lo hace bien. Mientras la progresía cultural busca encumbrar cualquier cosa que parezca diferente o que quiera transmitir un mensaje «importante», no me extraña que el público abrace y vaya en masa a ver una película que «solo» es una buena película de terror.

En ese sentido, frente a las consignas de diversidad woke que aún dominan el entretenimiento mainstream americano, entiendo que otro punto que ha ayudado a que el público vaya en masa al cine es tener a dos protagonistas blancos que se quieren y que forman una familia tradicional que transmite valores cristianos, con una hija y un entorno que viven felices con esas ideas. Es un placer tener a Patrick Wilson y Vera Farmiga porque son grandes actores los dos y comparten una química increíble en pantalla. Pero en este mundo políticamente correcto, tener a una pareja protagonista no formada por personas de diferente raza, que se quieren sin reservas y viven una relación adulta en la que no se muestra al hombre como alguien incapaz o incompetente como forma de destacar a la mujer, me parece lo más punki y antisistema que he visto en los últimos tiempos. (Si, te miro a ti, Los Rose, entre otras muchas). Dos protagonistas que confían en el otro y saben que cuando llegue el momento harán lo que tengan que hacer para ayudarle. Buff, que radicales. Quien hubiera pensado que el público es justo eso lo que quiere ver.

Expediente Warren: Los últimos ritos está pensada como un cierre satisfactorio para esta serie de películas creadas por James Wan. Un final que creo es perfecto. Sin embargo, como pasó con la franquicia de John Wick (también 4 películas), creo que viendo como han roto la taquilla, va a ser imposible que Atomic Monster no piense formas de seguir haciendo más películas en este mundo. Desde luego, si siguen planteando películas con buenas historias y un trabajo tan notable de todo el equipo, el éxito está mas que asegurado. Y yo iré encantado al cine a verlas.

Comparto el trailer de la película:

Expediente Warren: El último rito me ha parecido un películón. Da gusto ver una película que resulta tan satisfactoria en todos los aspectos. Si te gustaron las películas anteriores de Expediente Warren, no te puedes perder esta, de momento, última película de la saga.

PUNTUACIÓN: 8.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Aquaman y el reino perdido de James Wan

Aquaman de James Wan es de largo mi película favorita de la última hornada de películas inspiradas en los personajes de DC Comics. Es por esto que tenía muchas ganas de ver esta segunda parte, Aquaman y el reino perdido, sobre todo al seguir James Wan de director.

PUNTUACIÓN: 7/10

Al no poder derrotar a Aquaman la primera vez, Black Manta, todavía impulsado por la necesidad de vengar la muerte de su padre, no se detendrá ante nada para derrotar a Aquaman de una vez por todas. Esta vez Black Manta es más formidable que nunca y ejerce el poder del mítico Tridente Negro, que desata una fuerza antigua y malévola. Para derrotarlo, Aquaman recurrirá a su hermano encarcelado Orm, el ex rey de la Atlántida, para forjar una alianza improbable. Juntos, deben dejar de lado sus diferencias para proteger su reino y salvar a la familia de Aquaman, y al mundo, de una destrucción irreversible. (FILMAFFINITY)

La película fue dirigida por James Wan a partir de un guion de David Leslie Johnson-McGoldrick, colaborador habitual de Wan, que parte de una historia de Wan, Johnson-McGoldrick, Jason Momoa y Thomas Pa’a Sibbett. la película de 124 minutos de duración cuenta con un presupuesto de 200 millones y fotografía de Don Burgess, montaje de Kirk Morri y música de Rupert Gregson-Williams. Debido a los cambios en la dirección de Warner en lo referido a los personajes de DC Comics, el montaje final de la película ha sufrido numerosos cambios, al tratarse de la última película del DCEU, antes del reinicio que lideran James Gunn y Peter Safran.

Jason Momoa repite su papel protagonista como Arthur Curry / Aquaman. al igual que Patrick Wilson como Orm Marius, hermanastro atlante de Arthur, Amber Heard como Mera, la esposa de Arthur y madre de su hijo Arthur Jr, Yahya Abdul-Mateen II como David Kane / Black Manta. Dolph Lundgren como Nereus, rey de Xebel y padre de Mera, Temuera Morrison como Tom Curry, padre de Arthur y Nicole Kidman como Atlanna: La madre de Arthur y Orm y la antigua reina de Atlantis. El nuevo personaje de esta película es Randall Park como el doctor Stephen Shin, un biólogo marino obsesionado con encontrar Atlantis que trabaja para Black Manta.

Hay un término que me molesta mucho aplicado al mundo del entretenimiento, y es el de «innecesario». En redes sociales se crean narrativas tóxicas que perjudican a los estrenos en cine, y en el caso de Aquaman y el reino perdido además de innecesario se han inventado una nueva, y es la que opina que al ser la última película del DCEU, no merece la pena verse dado que esta película no va a tener continuación en el futuro, sea cual sea ese futuro. Y es una opinión perversa y muy dañina, dado que el objetivo de cualquier película es y siempre ha sido ofrecer un buen entretenimiento con principio y final sin pensar en nada más que lo que la película es. Y es este sentido, esta película cumple sin duda con su objetivo.

Me encanta James Wan y creo que aún está por llegar el día en que haga una película mala. Porque Aquaman y el reino perdido es una película super entretenida. Wan se ha especializado en el terror, pero en lo referido a la aventura pura, su habilidad como narrador nos ofrece unos momentazos alucinantes, unos planos increíbles y una imaginación genial a la hora de crear seres y sets donde tiene lugar la acción.

La película ofrece la misma premisa de la primera Aquaman, al presentar un problema que obliga a Aquaman a vivir una aventura por múltiples localizaciones a cual más exótica. La novedad es que Orm, el villano de la primera película y hermano de Arthur, se convertirá en involuntario compañero de aventuras, sirviendo esta película de rehabilitación al hacer las paces los hermanos, lo que es un elemento super satisfactorio de la película que me ha gustado mucho.

Si tengo un problema con la película, es el propio Jason Momoa. Esto no es un problema achacable a James Wan, dado que el casting del actor vino marcado desde BvS de Zack Snyder. Momoa creo que fue un error de casting tremendo al intentar resaltar la faceta de tío duro «bad-ass» frente a una caracterización fiel del personaje de los comics. Y en esta película Momoa no es tan gracioso como él se cree que es, forzando unos momentos de humor que no acaban de funcionar casi nunca y rompen el tono. Aparte, al tocar Momoa el guion hace que su personaje navegue entre su papel de padre que hará lo que sea por proteger a su hijo, el de un Rey aburrido que no consigue realizar cambios reales en Atlantis, el de aventurero gracioso que duda entre ser un héroe de acción y un chistoso. Y son muchas facetas que en dos horas es complicado unir adecuadamente.

Aparte, Momoa hace unos años era un tío duro cachas, algo que recuerdo de la primera película con sus múltiples escenas descamisado. En esta segunda película siempre lleva ropa y su papada cervecera me da la sensación que en su vida real se está divirtiendo a lo grande. Me da la sensación que Momoa se está convirtiendo en un Vin Diesel, alguien que intenta parecer duro cuando su cuerpo ya no le apoya. Los trajes que lleva parecen más armadura rígida que marca músculos que ya no están en la realidad, y esa es una sensación que tuve en numerosos momentos viendo la película.

En realidad, viendo Aquaman y el reino perdido, me reafirma en algo que ya pensé en la primera película, y es que Patrick Wilson hubiera sido el casting perfecto para Aquaman, aparte de por su parecido físico al personaje de los comics DC, porque es mucho mejor actor que Momoa. La parte de buddy-movie está bastante bien, aunque como digo que Aquaman haga bromas a costa de su hermano son detalles que no molan nada. Excepto la escena de la cucaracha, esa si está bien. En todo caso, Wilson y el resto de casting cumplen con lo que la película pide de ellos.

La película tiene numerosos momentos de voz en off que me sugieren las múltiples reescrituras que sufrió la película, al contar algún personaje los elementos de la trama necesarios para desarrollar la historia. Sin embargo, estas escenas no impiden que la película se disfrute. Un elemento que muestra estos cambios es el papel mínimo que le ha quedado para Mera, interpretada por Amber Heard, actriz envuelta en el juicio de Johnny Depp, que prácticamente ha desaparecido de la película.

En la parte del villano, Yahya Abdul-Mateen II como David Kane / Black Manta creo que lo hace bastante bien. Un villano que cumple bastante bien con su función y que ante su ansia de venganza no le importa ver el mundo arder, sobre todo al dejarse poseer por un poder ancestral que le dará unas habilidades sobrenaturales que sobrepasan a las de Aquaman. La parte del villano me gusta, empezando porque la película emplea bastante tiempo en que conozcamos su plan, algo que ayuda a que la amenaza sea más importante y funcione.

El diseño de producción y los efectos especiales me parece que están super bien. Por ponerle un pero, el reino perdido del título a veces se parece demasiado más de la cuenta a Mordor. Además, en la parte final la película cae con el vicio que han sufrido las películas de Warner, al acabar con un villano de CGI que no puede imponer al ser la primera vez que aparece en pantalla. Hechas estas apreciaciones, la verdad es que me encantan las diferentes localizaciones de la película, y el efecto subacuático me parece una pasada. Cuando estás viendo la película se justifica el presupuesto que ha tenido la película.

Aquaman y el reino perdido no inventa ninguna rueda pero ofrece un entretenimiento más que digno que merece verse en una pantalla que proyecte bien la película. Me lo he pasado de maravilla viéndola, aún reconociendo el problema que le veo a Jason Momoa como protagonista. En todo caso, la aventura está genial y ofrece un final satisfactorio a esta serie de películas. No se le puede pedir más a una película de este tipo, lo que me da me vale.

Por desgracia, por un motivo o por otro, la sensación es que la película va a fracasar en taquilla, no interesando al gran público. o pensaba que la primera película había gustado a nivel general, pero parece que los cinco años transcurridos han provocado que esta película y su protagonista han restado el interés que pudiera haber. Y es una pena, porque como película de aventuras a mi me funciona completamente. Queda la opción que el público familiar acabe yendo aprovechando la temporada navideña, unas fechas muy propicias para ir al cine. Pero parece difícil que Warner recupere su inversión, siendo la cuarta película de Warner de este 2023 que fracasa, tras Shazam 2, Flash y Blue Beetle. Le deseo suerte a James Gunn y Peter Safran, les queda muchísimo trabajo para recuperar la ilusión del gran público por los personajes de DC Comics.

Comparto el trailer de la película:

Aquaman y el reino perdido es pura aventura y puro espectáculo. Es una pena la mala elección de Momoa, porque la película podría haber sido un éxito brutal. En todo caso, yo la he disfrutado.

PUNTUACIÓN: 7/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Insidious: La puerta roja de Patrick Wilson

La franquicia de Insidious de James Wan acaba de estrenar la que parece su última película: Insidious: La puerta roja dirigida por Patrick Wilson, que vuelve a los protagonistas de las primeras películas.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

El Capítulo 5 continúa con la familia Lambert casi diez años después de los eventos del Capítulo 2. Para poner finalmente a sus demonios a descansar, Josh (Patrick Wilson) y su hijo Dalton (Ty Simpkins), ya un universitario, deben de ir más profundo hacia «el Más Allá» de lo que nunca habían ido, encontrándose con el pasado oscuro de su familia y un sin número de espantosos terrores que se esconden detrás de la puerta roja. (FILMAFFINITY)

Patrick Wilson hace su debut en la dirección con esta película que cuenta con un guion de Leigh Whannell y Scott Teems. La fotografía es de Autumn Eakin, el montaje de Derek Ambrosi y Michel Aller y música de Joseph Bishara. Al tratarse de una producción de Blumhouse, la película ha contado con un ajustado presupuesto de 15 millones de dólares, que han sido más que amortizados con los más de 150 millones que ha recaudado en todo el mundo en el momento que escribo estas líneas. Otro exitazo para Blumhouse, que confirma lo rentable que sigue siendo el terror en los cines. Se anunciaba esta película como el final de la serie, pero visto el éxito no puede descartarse que Blumhouse quiera continuar esta serie con estos personajes u otros.

La película está interpretada por Ty Simpkins como Dalton Lambert, el hijo mayor de los Lambert que 10 años después se marcha a la universidad. Patrick Wilson como Josh Lambert y Rose Byrne como Renai Lambert retoman sus papeles de las películas anteriores como los padres de Dalton, al igual que Andrew Astor como su hermano pequeño Foster. Por último, la incorporación es Sinclair Daniel como Chris Winslow, una joven afroamericana que compartirá habitación con Dalton y que intentará ayudarle cuando surjan los problemas sobrenaturales.

La novedad de esta película, la quinta de la serie Insidious, es la forma en que los guionistas y productores solucionan el salto temporal de 10 años en que la familia vivió sin sufrir nuevos viajes astrales o manifestaciones sobrenaturales. Y es que tras los traumáticos acontecimientos de la segunda película Josh y Dalton (padre e hijo) decidieron olvidar lo sucedido mediante amnesia. Aunque eso les dio un poco de paz en lo referido a lo sobrenatural, mentalmente no están bien, sintiendo que algo falta en sus vidas. La entrada de Dalton en la Universidad provocará que Dalton abra la puerta que llevaba diez cerrada, entrando de nuevo en comunicación con el mundo astral. Y con ello, a los seres oscuros que allí se encuentran que quieren entrar en el mundo físico.

Para ser la primera película de Patrick Wilson como director, creo que realiza un trabajo más que acertado. Se nota que es un veterano del género, aunque sea como actor, porque los sustos y el aspecto visual funcionan perfectamente a lo largo de los 105 minutos de duración, al igual que una tensión perfectamente dosificada. De hecho, la película empieza con un ritmo pausado mientras nos presenta la vida de la familia todos estos años después, y la forma en que Dalton abre sin querer la puerta al mundo astral. La tensión me parece que va aumentando de forma adecuada a medida que avanza la película, ofreciendo un final bastante potente.

El reparto me parece que está adecuado a lo que necesita este tipo de historia, sin florituras pero resultando creíbles en sus interpretaciones. Aunque es un poco spoiler, me parece super curioso haber visto una película con muchísima tensión y buenos sustos en la que en realidad no muere nadie por culpa de los series sobrenaturales. Dicho esto, dentro que todo está bien y la película me ha resultado muy entretenida, me ha faltado la brillantez que James Wan imprime a sus películas, los planazos alucinantes y las sorpresas visuales que siempre nos regala. Wilson hace un buen trabajo, como la película en su conjunto, pero nada es nunca notable.

Otro tema que ayuda a esta sensación de «correcto» es que Wilson es realmente un secundario de la película, al centrarse la historia en la vida de Dalton en la universidad. Y la verdad es que Ty Simpkins no se acerca al carisma y la presencia que Wilson tiene ante las cámaras. Sí vemos como su personaje Josh, el padre de Dalton, sufre al sentir que una parte de su vida se fue al someterse a la amnesia, pero en realidad esta es una película del joven y no tanto de su padre.

Debido al éxito comercial, no descarto que Blumhouse plantee nuevas películas de Insidious, aunque sea con personajes nuevos. Tras unas semanas de estrenos potentes en la cartelera, por ejemplo Misión Imposible y Oppenheimer, ver una película de terror como esta me ha venido muy bien, era lo que me pedía el cuerpo. El terror sigue siendo un género muy rentable para las productoras como Blumhouse, intuyo que lo seguirá siendo.

Comparto el trailer de la película:

Insidious: La puerta roja me parece una buena película aunque inferior a las dirigidas por James Wan, que gustará a los fans del terror.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Expediente Warren. Obligado por el demonio de Michael Chaves

La serie de Expediente Warren se ha convertido en un clásico del género de terror. Y aunque se nota que James Wan no dirige esta tercera parte “Obligado por el demonio”, su director Michael Chaves realiza un estupendo trabajo con esta película inspirada en hechos reales.

PUNTUACIÓN: 7,5/10

Ambientada en los años 80. Ed y Lorraine Warren deberán afrontar un nuevo caso que se presenta con un hombre, Arne Cheyne Johnson, que es acusado de asesinato tras haber sido poseído por un demonio.

Expediente Warren. Obligado por el demonio es la tercera parte de The Conjuring (en el original) y la octava de la serie de películas de terror producidas por James Wan, contando las tres películas Annabelle, La Monja y La Maldición de La Llorona. Y precisamente en la producción de La Llorona, James Wan conoció al director Michael Chaves, y supo que era el hombre adecuado para sustituirle en la dirección de esta película, dado que renunció a dirigir esta película debido a sus múltiples compromisos.

Obligado por el demonio cuenta con un guión de David Leslie Johnson-McGoldrick a partir de una historia de Johnson-McGoldrick y James Wan, basados en el juicio de Arne Cheyenne Johnson, un juicio por asesinato que tuvo lugar en Connecticut en 1981, además de El diablo en Connecticut, un libro sobre el juicio escrito por Gerald Brittle. Con fotografía de Michael Burgess y música de Joseph Bishara, la película se rodó en Georgia durante el verano de 2019, siendo otra de tantas películas con fecha de estreno de 2020 que vieron su estreno pospuesto un año.

El principal interés de la película viene de ver a Patrick Wilson y Vera Farmiga retomando sus papeles del matrimonio Ed y Lorraine Warren, una pareja de investigadores paranormales que adquirieron cierta notoriedad en los Estados Unidos en los años 70 y 80. La película cuenta también con Ruairi O’Connor, Sarah Catherine Hook y Julian Hilliard como protagonistas.

Expediente Warren. Obligado por el demonio es una película estupenda que mezcla el terror sobrenatural con el thriller criminal, lo que supone un soplo de aire fresco frente a las típicas películas de casas encantadas y serial-killers que suelen dominar el género de terror. Hay que reconocer que Michael Chaves no es James Wan y en ese sentido obviamente se nota la falta de la brillantez visual de Wan, pero dicho esto que resulta obvio, Chaves me gusta mucho como director y creo que realiza un despliegue visual super interesante, manteniendo un ritmo modélico en todo el metraje con una tensión creciente que me ha dejado super satisfecho del visionado. En concreto, la escena en la morgue me ha parecido brillante y me sugiere que Chaves va a tener un futuro que ya es presente super prometedor dentro del género.

Como en las dos anteriores partes de The Conjuring, Obligado por el demonio cuelga el cartel de “inspirado en hechos reales”, aunque está claro que a partir de unos hechos más o menos concretos, toda la investigación y el thriller que vemos entran en el ámbito de la invención más fantástica. Sin embargo, el tono y la forma en que se plantea esta historia como una investigación de un crimen en la que hay que encontrar pruebas físicas de la existencia de fuerzas sobrenaturales me ha parecido que crea un marco muy interesante a partir del cual James Wan y New Line Cinema van a poder hacer todas las películas que quieran, repplicando en el ámbito sobrenatural las series de Misión imposible o 007, cada película con un caso.

Patrick Wilson y Vera Farmiga me chiflan como actores. Su carisma y la química que comparten en pantalla me parece alucinante y, como comentaba antes, para mi es de largo lo mejor de la película. Gracias a su presencia, merece la pena ver este nuevo Expediente Warren, incluso reconociendo que quizá esta tercera parte no es tan potente tampoco en lo relativo a la historia comparada con las dos películas previas dirigidas por James Wan. Pero no pasa nada, incluso siendo así la humanidad y el carisma de esta pareja me compensa el precio de la entrada. Junto a ellos, considero que el resto del reparto también está muy bien y cumplen con las exigencias de este tipo de cine.

Otro elemento que me ha gustado además de las interpretaciones y el apartado visual de Chaves es la edición de sonido, que me provocó un par de sustos increíbles al comienzo de la película. Quizá es debido a que no veo todo el terror que se estrena y me limito a ver ¿8/10 películas al año? De este género, pero he visto una película más que digna que sabe el tipo de entretenimiento que es y nos lo ofrece sin duda.

Realmente no tengo un pero hacia esta película. Quizá lo único es que como digo dentro que me ha gustado no me voló la cabeza como sí consiguió James Wan en las dos películas precedentes. Pero dado que eso ya estaba claro desde antes de entrar en la sala, no es algo que me haya molestado en modo alguno ni me haya impedido disfrutar de la historia. De hecho, creo completamente que es un película super recomendable.

Comparto el trailer de la película:

Expediente Warren. Obligado por el demonio es una estupenda película que confirma que la saga de la familia Warren en el cine está más viva que nunca y puede dura lo que les apetezca a sus productores.

Puntuación: 7,5/10

Espero vuestras opiniones en la zona de comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que te suscribas al blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Midway de Roland Emmerich (Prime Video)

Midway es la mejor película de Roland Emmerich de la última década, una estupenda película bélica que recrea la batalla naval que en 1942 cambió el rumbo de la Segunda Guerra Mundial y que está disponible en Prime Video.

PUNTUACIÓN: 7.5/10

Año 1942, Segunda Guerra Mundial. Después del devastador ataque sorpresa que destruyó Pearl Harbor, la Armada Imperial Japonesa se prepara para un nuevo ataque. Pero el Almirante Nimitz (Woody Harrelson) y Dick Best (Ed Skrein), el mejor piloto de la armada estadounidense, preparan un contraataque al imponente ejército japonés. Así, Best encabezará un ataque masivo que hará que Japón se dé cuenta de su error. Una decisión que cambió el curso de la historia para siempre. Mientras estos dos titánicos enemigos emprenden una letal batalla para cambiar el rumbo de la guerra, todas las miradas se vuelcan hacia la remota isla de Midway, donde una serie de contundentes ataques aéreos y marítimos pondrán a prueba la potencia y la fortaleza de ambas naciones. (FILMAFFINITY)

La película cuenta con guión de Wes Tooke, fotografía de Robby Baumgartner y música de Harald Kloser y Thomas Wanker. Con un presupuesto de 100 millones, es una de las películas independientes de mayor presupuesto jamás realizada, ya que Emmerich tuvo casi que ir puerta a puerta con inversores privados para conseguir financiación al no conseguirla de los grandes estudios, consiguiendo los últimos 25 millones de productoras chinas. Y debo decir que estos 100 millones lucen de maravilla en pantalla, de hecho, me parece increíble que pueda lucir todo tan bien teniendo en cuenta este presupuesto.

El reparto está plagado de grandes actores entre los que encontramos a Ed Skrein, Patrick Wilson, Dennis Quaid, Woody Harrelson, Luke Evans y AaronEckhart, todos ellos interpretando a figuras reales que participaron en la guerra y son considerados héroes americanos.

La película dura 138 minutos y cuenta de forma perfectamente entendible lo que fue la contienda en el océano Pacífico desde el ataque a Pearl Harbor en 1942 hasta esta batalla que marcó el principio del fin del Imperio de Japón.

Había leído algunas críticas negativas de esta película y cuando se estrenó en el cine el año pasado reconozco que me dió pereza verla, en parte por la propia figura de Roland Emmerich y sus películas de catástrofes. Una vez vista gracias a mi suscripción a Prime Video me dió pena no verla en pantalla grande, porque todo luce genial. Emmerich rodó en Haway en escenarios reales y las escenas de batallas aéreas lucen super espectaculares.

Sobre las críticas negativas, me recuerda el viejo refrán «si no quieres polvo no vayas a la era». Creo que es absurdo ver una película a sabiendas que no te va a gustar para poder quejarse luego y decir que es «una americanada». Es cierto que para Emmerich una parte fundamental de la película es homenajear a los héroes americanos que son personas normales que se levantaron ante circunstancias excepcionales. Esa es toda la construcción de personajes que necesitamos, en este tipo de películas no buscamos ni son necesarios profundos estudios psicológicos, y no pasa nada si es así.

Lo cierto es que lo que cuenta Emmerich lo hace de maravilla y consigue que un hecho conocido, los americanos ganan, esté envuelto en tensión al no saber qué va a pasar y quién va a sobrevivir.

Otro hecho importante es su controlada duración. Conseguir contar tanto en tan solo 138 minutos me parece un milagro, más en estos momentos en que se ha convertido casi en habitual el estrenar películas de 3 horas. Emmerich triunfa en el uso de la economía narrativa centrándose en aquellos hechos históricos realmente relevantes. Pero recordando Pearl Harbor (Michael Bay, 2001) en la que la batalla duraba más de una hora, o al menos a mí me lo pareció, Emmerich no se recrea en las muertes o las explosiones, sino en la historia que quiere contar. Narrativamente, este Midway le pega mil vueltas a la película de Bay.

Normalmente siempre comento algo menos bueno de todas las películas, pero en este caso creo que todo está en función de la historia y dentro de su modestia y falta de pretensiones, Emmerich triunfa en todo lo que se propuso con esta película.

Comparto el trailer de la película:

Midway es una estupenda película bélica que transmite el encanto de los clásicos del género, con un gran reparto y excelentes escenas bélicas que satisfará a todos los fans del género y que, ahora que está en Prime Video, nadie debería perderse.

PUNTUACIÓN: 7.5/10

 

Y si te gustó este artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que sigas mi blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!