Panini ha publicado un nuevo volumen de los especiales Blanco, Negro y Sangre de tamaño extra-grande dedicado a Caballero Luna, un personaje perfecto para este formato de historias cortas con un dibujo espectacular.
PUNTUACIÓN: 7.5/10
Los mejores creadores de Marvel ponen su marca en el Puño de Khonshu, mediante historias en blanco, negro y rojo sangre. Jonathan Hickman y Chris Bachalo presentan al Caballero Luna del futuro. Marc Guggenheim y Jorge Fornés cuentan una aventura del Caballero Luna al revés. Murewa Ayodele y Dotun Akande unen al cruzado de blanco con Spiderman para una desgarradora noche de aventuras… ¡Y mucho más!
Este volumen extra-grande Marvel Treasure Edition contiene Moon Knight: Black, White & Blood 1-4 USA. En él encontraremos 12 historias de 10 páginas cada una. Además de los autores antes mencionados, tenemos a Benjamin Percy con Vanesa R. Del Rey, David Pepose con Leonardo Romero y Chris Sotomayor, Patrick Zircher, Erica Schultz y David López, Jim Zub con Djibril Morissette-Phan, Ann Nocenti con Stefano Raffaele y Chris Sotomayor, Christopher Cantwell con Alex Lins, Nadia Shamma con Dante Bastianoni y Chris Sotomayor, y Paul Azaceta.
El principal problema de estos especiales es que 10 páginas de historia dan para lo que dan, no pudiendo crear nada increíblemente complejo al estar limitados en muchos casos a apenas una escena de acción. Sin embargo, alguien tan fracturado como Caballero Luna resulta el personaje perfecto para este formato, ya que los diferentes autores pueden jugar a la hora de presentar diferentes aspectos de sus personalidades y sus diferentes encarnaciones, formando un crisol de historias que siendo muy diferentes entre si, se complementan para ofrecer un volumen super satisfactorio.
Curiosamente, la sorpresa negativa de este volumen la tenemos en la historia creada por Hickman y Bachalo. O si lo pienso un poco, quizá no tanto. Porque ofrecen una historia sin punch dibujada de forma ininteligible por parte de Bachalo, de forma que realmente no sabes qué está pasando en cada viñeta, siendo para mi la peor historia de las 12. Tampoco conecto nada con el dibujo de Vanesa R. Del Rey, ni con la historia de Ann Nocenti. Dentro de lo que cabe, el porcentaje de «fallos» entra dentro de lo esperable, no supone un gran problema.
Sin embargo, en el lado positivo, me ha volado la cabeza la historia de Marc Guggenheim y Jorge Fornés en la que juegan con la narrativa y el orden de lectura. Las historias creadas por los dibujantes Patrick Zircher y Paul Azaceta también se encuentran ente mis favoritas de este tomo, a las que habría que sumar la de David Pepose con Leonardo Romero y Chris Sotomayor, por la forma en que presenta a las diferentes personalidades de Marc Spector. Aparte, los diferentes autores dan mucho juego a la hora de crear sus historias, creando historias de acción, de terror cósmico, pero también con elementos de comedia, como en la de Erica Schultz y David López. En lo referido a pijameo, el team-up de Caballero Luna con Spiderman creada por Murewa Ayodele y Dotun Akande también nos ofrece una historia sencilla pero efectiva y super divertida.
De forma bastante inesperada, me estoy convirtiendo en fan de este formato de Blanco, Negro y Sangre. De hecho, volúmenes como este me permiten conocer a artistas que no conocía, como algunos de los antes mencionados pero también el artista italiano Dante Bastianoni. En conjunto, incluso con las cosas que no me han funcionado veo un comic super ecléctico y variado en el lado artístico que ha saciado mi sed del personaje.
Me ha gustado bastante este Caballero Luna: Blanco, Negro y Sangre, volumen que ya acompaña en la estantería a los especiales dedicdos a Lobezno y Elektra. Y descubrir que en Estados Unidos Marvel está publicando un nuevo volumen dedicado a Darth Vader asegura que compraré el siguiente volumen.
PUNTUACIÓN: 7.5/10
Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.
¡Saludos a todos!