Archivo de la etiqueta: Ross Andru

Crítica de Biblioteca Marvel. La Patrulla-X vol. 7 de Roy Thomas, Ross Andru, Don Heck y Werner Roth (Marvel Comics – Panini)

El séptimo volumen de la Biblioteca Marvel La Patrulla-X de Roy Thomas, Ross Andru, Don Heck y Werner Roth son unos comics flojísimos que explican por qué esta colección fue cancelada en su momento. Se me ha hecho muy dura la lectura de estos comics clásicos de 1967 y 1968.

PUNTUACIÓN: CLÁSICO TERRIBLEMENTE MALO

Es más que un cómic: es una máquina del tiempo. La conclusión de la saga de Factor Tres, con el debut de Mekano, el regreso de Mole y el enfrentamiento contra la mente maestra detrás de esta siniestra organización. Además: presentamos los nuevos uniformes de los cinco miembros de La Patrulla-X y comienzan los orígenes de cada uno de sus miembros. Contiene los correos de lectores de la edición original y la cronología que lo sitúa todo en contexto. ¡Biblioteca Marvel, como siempre y mejor que nunca! ¡No puedes perderte esta edición histórica!

Este séptimo volumen de la Bibioteca Marvel. La Patrulla-X contiene The X-Men 36-40 y Not Brand Echh 4 y 8, publicados entre septiembre de 1967 y enero de 1968.

Cuando empecé a comprar la Biblioteca Marvel de Panini me movía sobre todo las ganas completistas de poder tener en mis manos los comics clásicos de mis personaje favoritos publicados antes que empezara mi afición comiquera. No era tanto las ganas de leer unos comics de hace 60 años que en algunos casos seguro han envejecido mal, sino poder tener completa mi biblioteca. Pero dicho esto, lo cierto es que son sus cosas, he ido encontrando cosas destacables en los comics de Los 4 Fantásticos de Stan Lee y Jack Kirby, Nick Furia de Lee y Kirby inicialmente y en la actualidad de Jim Steranko, y Los Vengadores. De los cuatro títulos que compro tengo que reconocer que los comics de La Patrulla-X eran los que menos estaba disfrutando. Pero los comics de este volumen no es que sean viejos, es que me han parecido realmente malos.

Nos encontramos en lo peor de los comics de La Patrulla-X. Los que explican que la colección se cancelara por bajas ventas. Y por una bajísima calidad. El desastre viene primero y principal con unos guiones de Roy Thomas que me han parecido realmente lamentables. La historia del número 36 USA refleja perfectamente la filosofía de historia mediocre que parece planteada para rellenar páginas y sacar el comic con lo que fuera. En esta historia, tras ser raptados Charles Xavier y Banshee por el malvado Factor Tres, los jóvenes mutantes tienen que buscar dinero para poder comprar los billetes de avión. Antes, el comic emplea casi 5 páginas a mostrar una ridícula pelea de Bestia contra dos ladrones que han entrado en la escuela y le ponen las cosas a Hank a pesar de ser rateros comunes. En Nueva York, acabarán luchando contra un chaval que ha robado una armadura de alta tecnología y hace el cafre en la ciudad para llamar la atención de su rico padre. Un padre que acabará pagando los billetes como agradecimiento por detener a su hijo y devolverle la armadura robada. Lamentable.

El número 37 USA nos trae al Thomas reciclador de ideas que aprovecha a personajes creados previamente. Tras llegar a Europa, la Patrulla-X es echa prisionera por Factor Tres y va a ser juzgada por crímenes contra los mutantes. El fiscal es un mutante llamado El Cambiante, el jurado los villanos Desvanecedor, Unus el intocable, la Mole y Mente Maestra, y el lider de todo, el misterioso Amo Mutante. Tras ser condenados, los héroes descubrirán que el plan del Amo Mutante es provocar un apocalipsis nuclear engañando a Rusia y a los USA para que se ataquen mutuamente. En en nº 38 la Patrulla-X de divide en dos grupos que intentarán parar los planes del amo Mutante, que se tendrán que enfrentar a los ejércitos humanos que ven a la Patrulla-X como una amenaza que está atacándoles, y a los mutantes malvados que buscan detenerles, pensando que el Amo Mutante sólo quiere aniquilar a los humanos normales.

El climax del número 39 USA nos trae la revelación que el Amo Mutante NO es un mutante, sino un alienígena que quería acabar con toda la vida para apoderarse del planeta. La unión de todos los mutantes, héroes y villanos, conseguirá acabar con la amenaza. Finalmente, en el número 40 USA la Patrulla-X luchará contra un extraño monstruo que recuerda al de Frankenstein, que acaba siendo un robot creado por una raza alienígena. Buff, los comics no pueden ser peores.

Las historias de Thomas no me han gustado nada. Pero es que editorialmente lo hacen todo mal. Empezando porque la portada de este volumen es la del número 39 USA, el climax del combate contra Factor Tres anticipada los nuevos trajes del grupo. Pero en el interior resulta que no vemos los trajes hasta la última página, una vez han vencido el combate y han vuelto a casa. Una viñeta de Don Heck y entintado de Vince Colletta que parece un boceto no demasiado trabajado. El bajón que debieron sentir los lectores leyendo este comic creo que debió ser importante. Dentro que podría decirse que la presentación en realidad fue en la misma portada. Si los lectores se hubieran ahorrado comprar y ller el comic, no se hubieran perdido gran cosa.

Aparte de una historia muy floja, Stan Lee le permitió a Thomas que a partir del número 38 el comic contaría con una historia de complemento también guionizada por Thomas en la que nos contará la creación de la Patrulla-X antes del número 1 de X-Men. Unas historias de 5 páginas que estarán dibujadas por Werner Roth, con entintado de John Verpoorten. En ellas, Charles Xavier contactará con el agente del FBI Fred Duncan para que le ayuden a encontrar y ayudar a jóvenes mutantes, evitando que se conviertan en villanos. En la segunda historia, Scott Summer, huyendo de una turba de violentos y de la policía acaba en casa de un mutante que luego conoceremos que se llama Sota de Diamantes. Un mutante que tiene intenciones malvadas y que se enfrentará contra Charles Xavier, que ha acudido para rescatar a Scott.

Estos complementos son posiblemente lo mejor de estos comics. Pero lo cierto es que son 5 páginas que se restan de la historia principal, haciendo que por ejemplo el climax de Factor Tres fuera una historia de apenas 15 páginas. Que no es que fuera a estar mejor aunque hubiera tenido 20 páginas. Pero la realidad es que las historias al ser más cortas daban una sensación aún más insatisfactoria.

Las historias de Thomas no me han gustado nada. Pero mucho peor, si es que eso es posible, son los dibujos que tenemos en este volumen. Ross Andru fue durante muchos años dibujante de Spiderman, y entiendo que estos comics debieron servirle de entrenamiento pagado. Y lamento lo que voy a decir, pero me parecen penosos. Empezando porque son lo contrario a dinámicos, emocionantes o atractivos. Con montones de viñetas casi enteras con una cara, que no está demasiado bien para empezar. Aparte de cumplir los plazos de entrega, se me hace difícil entender cómo Andru mantuvo su trabajo después de dibujar los dos comics de este volumen, los números 36, con entintado de George Bell, y el 37 con entintado de Don Heck.

Los siguientes números están dibujados por Don Heck con entintado de George Bell (nº 38), Vince Colletta (nº 39) y George Tuska (nº40). Y dentro que Heck mejora a Andru, podemos estar ante los comics peor dibujados de toda la Bilbioteca Marvel de Panini. De hecho, creo que Heck siendo bastante soso y poco espectacular en Los Vengadores estaba mucho mejor que en estos comics. No tengo claro el motivo, aunque es posible que la muy floja historia de Thomas haya provocado esta sensación.

Y no es que Werner Roth sea mucho mejor, pero en lo referido a su dibujo, me ha gustado mucho más que todo lo anterior.

Los comics de X-Men de este volumen han sido super decepcionantes. Pero el siguiente bajón es tener que sufrir dos historias del comic de humor Not Brand Echh, los números 4 y 8 publicados en 1968, en esta edición de Panini. Estos comics de «humor» no me hacen ninguna gracia. Y me dan la sensación, como ya me ha pasado cuando he visto estas historias en otros volúmenes de la Biblioteca Marvel, que son páginas «basura» (copiando el término baloncestístico de la NBA) para ocupar espacio que justifique el precio de portada de Panini. No se si es el caso, o si estos comics se incluyeron en ediciones Omnibus de la que han sacado el material para esta edición. Pero la sensación es lamentable.

Comentaba al principio que en realidad compro la Biblioteca Marvel por un ánimo completista y no tanto para leerlos pensando que me van a flipar. Pero obviamente leerlos los voy a leer. Y ningún tomo anterior me ha desagradado tanto como lo ha hecho este. Teniendo claro que Patrulla-X es la colección más floja del inicio del Universo Marvel, ya desde el primer volumen. Pero el nivel ha bajado de forma tremenda. Hace unos meses ya comentaba que tenía ganas de llegar hasta la etapa dibujada por Neal Adams, que supuso una revolución casi al nivel de lo que supuso Jim Steranko. Sin embargo, Neal Adams no llegó hasta el número 56 USA. Esto supone que aún quedan 3 volúmenes más con este nivel deficiente de guion y dibujo. Se me va a hacer muy duro seguir comprando esta colección, a pesar del ánimo completista que me lleva a comprar estos comics antiguos.

Comparto las primeras páginas de este volumen, obra de Ross Andru:

Nos encontramos en lo peor de los comics de La Patrulla

PUNTUACIÓN: CLÁSICO TREMENDAMENTE MALO

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Punisher de Netflix

Tras las decepciones de Luke Cage, Iron Fist e incluso Defenders, habían muchas dudas de la solvencia de las series de Netflix y Marvel. Me alegra poder decir que Punisher ha renovado mi fe en las posibilidades de los personajes Marvel en la pequeña pantalla.

PUNTUACIÓN: 7.5/10

Una de las sorpresas más positivas de la segunda temporada de Daredevil fue la presentación en sociedad de Punisher -Castigador- interpretado por Jon Bernthal.

El famoso antihéroe Marvel, fue creado en 1974 por Jerry Conway y los artistas John Romita Sr. y Ross Andru, debutando como villano de Spider-Man. Frank Castle, es un veterano de Vietnam cuya familia es asesinada por el fuego cruzado de un enfrentamiento entre grupos mafiosos mientras celebraban un picnic familiar en Central Park.

Tras años como secundario, obtuvo su serie regular y alcanzó una enorme popularidad en la segunda mitad de los años 80 y principios de los 90, llegando a publicarse tres series mensuales y actuando de secundario en muchñisimos comics Marvel de la época. Sin embargo, su popularidad fue perdiendo fuelle hasta el punto que en 1995 Marvel había cancelado todas sus colecciones.

Es bien sabido que algunas de las mejores etapas de Marvel han surgido en series al borde de la cancelación, o canceladas, cuando los editores decidían arriesgar con autores que consiguieron sacar oro de estos personajes. Ejemplos de esto los tenemos en el Darevil de Frank Miller, el Thor de Walter Simonson o incluso los X-Men de Chris Claremont y John Byrne.

El trauma de la cancelación de las series regulares de Punisher sirvió para unir al personaje al escritor que ha creado la que muchos opinamos que es la versión definitiva del personaje: Garth Ennis. Su etapa para el sello MAX de comics para adultos de Marvel no creo que pueda superarse, y ha servido en parte de inspiración de esta serie de televisión.

Gracias a esta serie de televisión recién estrenada en Netflix se ha roto con la mala racha del personaje con sus apariciones en la gran pantalla.  Y es que pocos personajes pueden presumir de haber estrenado 3 películas, que a decir verdad no dejaron satisfecho a casi nadie, interpretadas por Dolph Lundgren (1989), Thomas Jane (2004) y Ray Stevenson (2008).

El Punisher presentado en Daredevil es ante todo un personaje complejo. Un soldado que sufre por la pérdida de su familia y que no dudará en tomarse la venganza de la forma más brutal posible. Frank Castle comparte con el Punisher de Ennis sus fuertes valores que defenderá cueste lo que cueste, pero no es la fuerza de la naturaleza su versión MAX, y es herido de gravedad en varias ocasiones. Castle es el compañero de armas, amigo y hermano que todos querríamos tener a nuestro lado cuando hay un problema grave, y protagonizaba algunos de los momentos más gores de Daredevil, haciéndose merecedor de una serie en solitario. Pero la violencia extrema queda en segundo plano ante el drama que sufre con la pérdida de su familia.

Marvel eligió como showrunner a Steve Lightfoot, un veterano de series como Fargo y Hannibal que no había leído ningún comic Marvel pero al que le encantó el personaje interpretado por Jon Bernthal y su química con Karen Page (Deborah Ann Woll), que le hizo pensar que existían los mimbres para una gran serie.

Personalmente, creo que el principal éxito de Punisher es consecuencia de su separación respecto al personaje que conocemos en los comics. Y es que Lightfoot, que también es el escritor de la serie, plantea la serie como un alegato sobre la situación de los veteranos de guerra que sufren Síndrome de Stress Post-Traumático (PTSS). Aunque físicamente han retornado a sus casas, mentalmente su guerra nunca termina, y en su mayoría han sido abandonados por su gobierno.

Este planteamiento me sorprendió e hizo que empatizara con todos los veteranos que vamos viendo en la serie, que sufren cada uno de forma diferente. Y Frank Castle no es menos, sufriendo en todo momento el dolor por la pérdida de su familia, que vimos en Daredevil y cuyas repercusiones se siguen sintiendo en esta temporada.

El PTSS no solo lo sufren los veteranos, sino que este dolor es compartido por sus familias y amigos, encarnados en la familia de Micro (Ebon Moss-Bachrach), un analista de la NSA que tuvo que fingir su muerte tras encontrar una información que no debería conocer. O la agente Dinah Madani (Amber Rose Revah), que perdió a su compañero en Afganistán y vive para detener a los responsables, a pesar de que sus superiores intentan enterrar el asunto.

John Bernthal ES Frank Castle. Reconozco que físicamente no era mi elección a priori, pero me ha ganado con su enorme interpretación llena de matices. Castle es brutal y salvaje, pero también es alguien que se preocupa y busca ayudar poniendo la seguridad de los demás por encima de la suya.

Desde Daredevil, es la primera vez en una serie Netflix que no me ha parecido que 13 episodios alargaban artificialmente una historia que no daba para tanto. Punisher construye una historia a fuego lento, pero todos sus caminos son satisfactorios y las historias de los secundarios nos aportan algo importante que nos ayuda a rellenar una parte de un puzzle que merece la pena descubrir.

Los niveles de violencia posiblemente no sean para todos los estómagos, pero está muy bien dosificada, y cuando llega, está plenamente justificada y nos impacta. Globalmente, la serie consigue que suframos con el calvario por el que pasará Frank durante estos episodios.

Y encima, el final es enormemente satisfactorio y sirve de cierre para el personaje en caso de que la historia de Frank Castle finalizara aquí. A la vez que abre un buen montón de posibilidades de cara a una eventual continuación, que realmente espero que se produzca.

Si hubiera que poner un pero a Punisher, podría decir dos cosas que para mi no suponen ningún problema pero podría serlo para otros espectadores y sobre todo, para fans de los comics.

Por un lado, la historia es muy muy diferente de la de los comics, decidiendo tomar otro camino. A mi me ha sorprendido y me ha encantado, pero puedo entender que plantear una serie de Punisher centrada en el PTSS y el drama de los veteranos no es lo que se esperaba y haya gente que lo rechace.

Por otro, el trailer con su banda sonora de Metallica invitaba a pensar en una orgía de sangre y muerte parecido a lo que Ennis planteaba en sus historias. Sin embargo, como comentaba antes, la acción está muy dosificada hasta el punto que en episodio 6 no se dispara ni un solo tiro. Pero es que lo importante es el drama psicológico de los personajes más que las brutales escenas de acción. Esto entiendo que también puede ser un problema, pero para mi es un ejemplo de gran calidad narrativa que construye una tensión que cuando estalla, lo hace de forma brutal.

Además, la serie triunfa gracias a todas las interpretaciones, en especial la de los veteranos. Ben Barnes es Billy Russo, compañero de armas de Frank en Afganistán, que es como un hermano para él. Un veterano que supo salirse a tiempo y que ha triunfado profesionalmente con una empresa que ofrece contratos militares a las fuerzas de seguridad. Jason R. Moore es Curtis Hoyle, compañero de Frank y Billy que perdió una pierna y que dirige un grupo de terapia de ayuda a los veteranos. El reverso de la historia lo protagoniza Lewis Walcott (Daniel Webber), un joven que está perdiendo la cabeza debido al trauma sufrido en combate. Son solo tres ejemplos de un reparto bastante acertado que sabe sacar oro del guión que se les ofrece.

Guión que globalmente me pareció bastante bueno, llevando la acción por sendas lógicas que evita los giros sin sentido. Por esto, aunque en el tramo final hay alguna locura, se perdona y no le doy demasiado importancia.

Comparto el trailer de esta serie, que quizá no refleja la verdad de lo que vamos a ver:

https://www.youtube.com/watch?time_continue=64&v=Cr1Ri_zDV0Y

Punisher ha sido una sorprendente experiencia, que aunque no me ha ofrecido lo que esperaba, ha resultado ser tremendamente satisfactoria. Ojalá Netflix confirme en breve una segunda temporada de esta serie, que os recomiendo sin duda.

PUNTUACIÓN: 7.5/10