Archivo de la etiqueta: zombies

Crítica de 28 días después de Danny Boyle

Aunque haya sido de forma desordenada, he visto 28 días después, el clásico del cine de zombies de 2002 de Danny Boyle, protagonizada por Cillian Murphy y Naomi Harris.

PUNTUACIÓN: 8/10

Londres es un cementerio. Las calles antes abarrotadas están ahora desiertas. Las tiendas, vacías. Y reina un silencio total. Tras la propagación de un virus que acabó con la mayor parte de la población de Gran Bretaña, tuvo lugar la invasión de unos seres terroríficos. El virus se difundió, tras la incursión en un laboratorio, de un grupo de defensores de los derechos de los animales. Transmitido a través de la sangre, el virus produce efectos devastadores en los afectados. En 28 días la epidemia se extiende por todo el país y sólo queda un puñado de supervivientes.

Danny Boyle obtuvo un éxito arrollador con Trainspotting (1996) y su retrato de la juventud británica y su (ab)uso de las drogas. The beach (2000) con Leonardo DiCaprio recibió disparidad de opiniones. Para su siguiente película optó por volver a una historia planamente british, con esta película de infectados por una epidemia de rabia sumamente contagiosa y violenta. Para esta película Boyle colaboró con Alex Garland, escritor de la novela The Beach que acababa de adaptar al cine, que se encargó de escribir el guion de esta película. 28 días después se convirtió en un gran éxito de taquilla, recaudando 82 millones a partir de un presupuesto de 8 millones, pero durante la producción y rodaje sufrieron numerosos problemas presupuestarios hasta que firmaron los acuerdos de distribución mundial. La película de 113 minutos de duración cuenta con Fotografía de Anthony Dod Mantle, montaje de Chris Gill y música de John Murphy.

Cuando se piensa en 28 días después, varias de las cuestiones más comentadas son la elección de Boyle de rodar partes de la película con una cámara Canon XL1 de vídeo digital (DV), más pequeña y manejable, que rompía con la idea de tener que rodar películas comerciales con las grandes cámaras tradicionales. Además, para el rodaje de las escenas en una Londres completamente vacía, el equipo de rodaje tenía que rodar en domingo apenas amanecía, no teniendo más que 30-45 minutos como máximo mientras la policía local cortaba el tráfico de las calles clave de la ciudad.

En el reparto encontramos a Cillian Murphy como Jim, un courier que se despierta en el hospital de un coma tras haber sido atropellado. Naomie Harris es Selena, una superviviente en Londres que comparte viaje con Mark (Noah Huntley) y que salvarán a Jim de un ataque de infectados. Brendan Gleeson como Frank, un taxista, Megan Burns como Hannah, la joven hija de Frank, Christopher Eccleston como el Mayor Henry West, Stuart McQuarrie como el Sargento Farrell y Ricci Harnett como el Cabo Mitchell completarían el reparto.

Antes de empezar, os recuerdo que podéis leer mis reseñas de 28 semanas después y 28 años después en los links correspondientes. Ya entrando en 28 días después , volver a verla un porrón de años después de la última vez ha resultado un ejercicio de memoria interesante. Porque las escenas de Cillian Murphy en una Londres vacía son super icónicas y se han quedado grabadas en mi retina. También tenía cierto recuerdo de la parte en la mansión en el campo al norte de Manchester en la que un enajenado Christopher Eccleston interpretando al Mayor Henry West atrae a gente inocente con la esperanza de conseguir mujeres para sus soldados. Pero en realidad todo lo demás se me había borrado de la memoria.

No sólo eso, mientras veía la película creía que tenían que pasar cosas que en realidad no eran de esta película, ni siquiera de esta saga, sino de otras películas de este genero. No sólo de este género, porque hubo un momento que pensaba que Jim y el grupo escapaban en un ferry cuando esa es una escena de Un lugar tranquilo: Día 1. O que cuando llegan a casa de Frank y Hannah en lo alto del edificio, se iban a encontrar a la mujer de Frank atada a una cama por estar infectada. Como digo, películas muy diferentes permeaban mis recuerdos de esta, lo que provocó una sensación rara de novedad con una película que había visto varias veces. Otra de las cosas que no recordaba y que resulta curioso es que recordaba la mansión en el campo en la que tiene lugar el climax final, pero pensaba que era una película ambientada la mayor parte del tiempo en Londres, y en realidad el grupo protagonista abandona la ciudad a la mitad de la película. Otro cambio respecto a lo que recordaba.

Antes de Danny Boyle, Alejandro Amenábar planteó en Abre los ojos (1997) mostrar a su protagonista solo en medio de un espacio icónico de Madrid como es la Gran Vía. algo que en el remake americano se trasladó a Times Square de Nueva york. Las influencias son constantes en el entretenimiento, de forma que cosas que ahora estoy cansado de ver como son los zombies corredores en realidad se vieron por primera vez en esta película. O la idea de infectado que en pocos segundos se transforma. Dentro del género de zombies 28 días después marcó mucho en su momento, incluso a pesar que su final positivo sea una rareza en el género. Sin ir más lejos, comparándola con otra película que también ayudó a revitalizar el género, Amanecer de los muertos (Zack Snyder, 2004), vemos que su final es completamente diferente, potenciando el nihilismo y la idea de que la civilización está perdida por sus propios pecados.

Cuando ves 28 días después puede verse una crítica al mundo moderno que fabrica virus mortales para buscar luego una cura que no sería necesaria de no haber creado dicho virus. Los buenistas de los activistas en defensa de los animales tampoco salen bien parados, al provocar el estadillo del virus con su acción irresponsable. Pensando que van a ayudar han condenado a (casi) toda la vida de Gran Bretaña. La inutilidad del gobierno y los servicios públicos que en el momento en que más se necesitan colapsan es otro elemento evidente, lo que sugiere que la civilización moderna está a un estornudo de colapsar. El COVID en 2020 casi lo consiguió. Es curioso como una película pueda ser tan anticipatoria ante lo que casi estuvo por suceder. La idea de «hombre mata a hombre» que expresa el Mayor West en medio de un apocalipsis también es un elemento clave de esta película y del género zombie, algo que luego hemos visto ampliado en comics, juegos y series de televisión como The walking dead o The last of us.

Por cierto, otro de los elementos curiosos de ver esta película es que en 28 días después vemos como los infectados están muriendo de hambre pasadas unas semanas. El Mayor West mantenía a un infectado encadenado precisamente para conocer cuanto tardan en morir sin alimentos, lo que acabó siendo su perdición. Ese fue el punto de partida de la secuela 28 semanas después, cuando se intenta la reconstrucción de Londres a partir de la muerte de la mayoría de infectados. Digo esto porque cuando vi 28 años después la semana pasada, me pareció que Boyle había ignorado a la secuela que no dirigió él sino Juan Carlos Fresnadillo (aunque él fue productor ejecutivo). Pero en realidad en esta 28 días después ya muestra claramente que los infectados se están muriendo de hambre, lo que hace que la idea de 28 años después sea aún más imposible. Hablando de saga de películas mal conectada, lo de estas tres películas es de traca.

Visualmente la película no ha perdido su fuerza, recordándome lo gran director visual que es Danny Boyle. Las imágenes grabadas con la cámara Canon XL1 de vídeo digital no desentonan, al estar conectadas con un montaje muy acertado. Otro de los elementos llamativos es lo poco que aparecen los infectados en esta película. Cuando se piensa en una película de zombies (aunque Boyle nunca ha querido que se etiquete a su película de esta manera), se espera una mayor presencia y más sustos de los que encontramos en la película. Dicho esto, cuando aparecen son siempre escenas de gran tensión.

En lo referido al reparto, Cillian Murphy ya mostraba sus aptitudes delante de la cámara, apareciendo como Dios le trajo al mundo. Naomi Harris y Brendan Gleeson están geniales el tiempo en que stán en pantalla. Al igual que un Christopher Eccleston que es un villano estupendo debido a lo razonable que es su planteamiento en medio del caos. Sobreviviri y continuar la especie es una idea razonable, si no fuera por la parte de violar a mujeres y niñas indefensas.

El metraje de la película me parece el justo y necesario, dentro de estar a un minuto de empezar a mostrar que no tienen nada más que decir sobre este mundo desolado y se han quedado sin ideas. En todo caso, la idea que la humanidad sobrevive a pesar de todo, aunque sea fuera de Gran Bretaña, es una idea positiva en medio de tanto caos y muerte. Que me dejara con buen sabor de boca pensando en que los protagonistas iban a sobrevivir es algo que me ha gustado mucho. Como en general toda la película.

Comparto el trailer de la película:

28 días después sigue siendo una película estupenda a pesar de haber pasado más de 20 años desde que se estrenara.

PUNTUACIÓN: 8/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de 28 años después de Danny Boyle

Tenía ganas de ver 28 años después, la nueva película de Danny Boyle con guion de Alex Garland que continúa la historia de infectados que creó en la mítica 28 días después.

PUNTUACIÓN: 7/10

Años despúes de los sucesos de «28 días después» y «28 semanas después», el virus de la ira ha regresado y un grupo de supervivientes debe sobrevivir en un mundo asolado por hordas de infectados. Realizada con un iPhone 15 Pro Max y con la ayuda de numerosos accesorios especializados. (FILMAFFINITY)

Daniel Francis Boyle (Lancashire,1956) es un director y productor inglés. Es conocido por su trabajo en las películas Shallow Grave (1994), Trainspotting (1996), La playa (2000), 28 días después (2002), Sunshine (2007), Slumdog Millionaire (2008), 127 horas (2010), Steve Jobs (2015) y Yesterday (2019). Boyle fue productor de 28 semanas después (2007), secuela de su clásico de zombies, y vuelve con fuerza con esta continuación 23 años después de la película original.

Boyle produce y dirige esta película que cuenta con guion de Alex Garland (guionista habitual de Boyle y director de Ex-Machine, Aniquilación, Civil War y Warfare entre otras). La película de 115 minutos de duración ha contado con fotografía de Anthony Dod Mantle, montaje de Jon Harris y música de Young Fathers. El rodaje tuvo lugar principalmente en el norte de Inglaterra, en las regiones de North East y Yorkshire and the Humber. Uno de sus principales hechos distintivos tiene que ver con principalmente con un iPhone 15 Pro Max, recordando al rodaje de 28 días después con la videocámara digital Canon XL-1.

En el reparto tenemos a Alfie Williams como Spike, el hijo de 12 años de Jamie (Aaron Taylor-Johnson) e Isla (Jodie Comer), que irá primero con su padre en un rito de iniciación como cazador dentro de territorio infectado, y que luego intentará llevar a su madre en busca de un doctor que trate su enfermedad, el Dr. Ian Kelson interpretado por Ralph Fiennes. Edvin Ryding como Erik Sundqvist, un soldado sueco de la OTAN, Chi Lewis-Parry como «Samson», un imponente líder alfa de los infectados y Jack O’Connell como Sir Jimmy Crystal, líder de la secta de los «Jimmies» y superviviente del brote original, completan el reparto en sus papeles principales.

El género de zombies me gusta mucho, así que no es sorpresa que tuviera ganas de ver 28 años después. Entrando a valorar una película que me ha gustado, una de las primeras cosas que me han parecido curiosas es que Danny Boyle y Alex Garland parece que obvian la película de 28 semanas después, que ni fue dirigida por Boyle aunque si se mantuvo como productor. Si en la película de Juan Carlos Fresnadillo los infectados murieron de hambre en apenas unas semanas, lo que provocó el intento de recuperación de Londres, en esta película los infectados siguen viviendo tras todos estos años, manteniéndose eso si su cualidad de ser unos zombies corredores.

Danny Boyle es un director brillante a la hora de crear imágenes super impactantes. En el caso de estos 28 años después, una parte importante de este éxito está en el montaje de la película, que intercala imágenes perturbadoras en muchos momentos, o se recrea en la sangre y el gore en varias escenas en las que los protagonistas lanzan flechas a infectados y el estallido de sangre queda congelado en pantalla. Cuando terminó la película nos preguntamos si se notaba que la película estuviera rodada con un iPhone, siendo yo de los que pensaba que no. Desde luego, no como un elemento negativo de la película.

Si en 2002 los zombies corredores de 28 días después impactaron a los espectadores, la principal sorpresa y añadido de esta película son los infectados Alpha, seres a los que el virus de la rabia actúa como un chute de anabolizantes que les transforma en seres más grandes, poderosos y difíciles de matar. Estos alpha nos van a dar un par de momentazos muy fuertes en la película con su hobby de arrancar las cabezas de sus víctimas como si de predators se tratara.

Más que una película unitaria, me ha sorprendido la naturaleza episódica que tiene la película. Y es que 28 años después plantea varias historias que son casi independientes entre si. En la primera, Jamie (Taylor-Johnson) quiere iniciar a su hijo de 12 años Spike (Alfie Williams) en el trabajo de cazador / buscador de su comunidad, ubicada en la isla de Lindisfarne, una isla ubicada en la costa norte de Inglaterra unida al continente solo en momentos de marea baja por una calzada fuertemente fortificada. Jamie lleva a su hijo a territorio infectado para que se cobre su primera presa en la forma de un infectado. Su aventura se encuentra con varios problemas e imprevistos, siendo el peor cuando se encuentran a un alpha que quiere comérselos. Sin embargo, tras una misión compleja, ambos consiguen volver con vida a la isla.

La segunda parte empieza cuando Spike descubre la existencia de un doctor que podría tratar a su madre enferma Isla (Jodie Comer), lo que le hace empezar un segundo viaje aún más peligroso que el anterior. Sobre todo cuando el posible doctor Kelson es una persona enloquecida a la que ningún humano ha visto en muchos años, y el viaje les hace pasar por territorio alpha.

Como fan del cine de zombies, la verdad es que la película tiene momentos super potentes y algunos bastante chungos, pero globamente creo que ha saciado mi sed de este tipo de historias. El poderío visual de Danny Boyle sale super reforzado tras ver la película en pantalla grande.

Sin embargo, me ha costado conectar con una historia que en muchos aspectos plantea el típico «gente tonta haciendo tonterías» como motor de la historia. Si Spike no hubiera ido nunca a «tierra firme» infectada, tendría algo de sentido que se fuera con su madre enferma que apenas puede andar a buscar al doctor. Pero que lo haga tras una misión en la que casi muere, y si no lo hace es gracias a su padre, es completamente una tontería ridícula. Y si, tengo claro que sin eso no hay película, pero me llama la atención que un guionista super inteligente como Garland (y el propio Boyle) tengan que acudir a estas «trampas» porque no se les ocurren otra forma mejor de hacerlo.

La película tiene otro problema grande, que es que no acabo de creerme este mundo 28 años después del primer estallido del virus de la rabia. Empezando porque los infectados hayan sobrevivido tanto tiempo, incluso naciendo nuevos niños infectados. De nuevo, esto es un problema pequeñito, porque tengo claro que sin eso no hay película. Pero dentro de este mundo con recursos super escasos de 28 años después, me parecía super imposible que por ejemplo Jamie no recuperara las flechas con las que había matado a infectados. (¡Si hasta Daryl lo hacía en The Walking Dead). Incluso pensando en que la sangre de los infectados mancha la flecha, pensar que algo tan valioso se deje sin más en el bosque me volaba la cabeza cada vez que pasaba. Porque me muestra a unos creadores que no han pensado del todo bien este mundo.

La llegada de unos soldados suecos varados en Inglaterra al estropearse su barco también ofrece varios momentos de «gente tonta…» super decepcionantes, al disparar en modo ráfaga malgastando munición escasa cuando deberían ser quirúrgicos en su enfrentamiento con los infectados. Aunque visualmente ya digo que hay momentos chulísimos, también me sucedía que esas escenas resultaban inverosímiles. Y eso es un problema.

Cuando Spike y su madre llegan hasta el doctor interpretado por Fiennes tenemos algunos de los momentos más potentes de la película con el monumento que ha creado para los muertos, realizado con calaveras de personas fallecidas. El papel del personaje de Ralph Fiennes me parece super interesante y añade un elemento excelente, si bien comete también alguna locura ridícula cuando duerme a un alpha y no le mata, algo que es de nuevo ridículo. Como digo, en lo relativo a la historia, junto a cosas muy chulas siempre me encontraba otras que me costaban digerir, y que provocan mi sensación de decepción.

Y a todo lo anterior hay que sumar un último aspecto que este si considero lamentable. En lugar de plantear una película con una historia con principio y final, lo mínimo que se exige cuando se va al cine a ver una película, Boyle y Garland deciden NO terminar la historia, dejando la historia en un cliffhanger absoluto.

Tengo que decir que había leído la intención de Boyle de crear una trilogía de películas de la que esta 29 años después sería la primera parte. Y también a la vez que esta película habían rodado casi en secreto su continuación. Pensando que el protagonista Alfie Williams es un chaval que tiene que crecer, tiene sentido rodar la segunda película a la vez para que no crezca entre rodajes y no cuadre con que la segunda película tenga lugar justo a continuación del final de esta. Desde un punto de vista logístico, es algo que se entiende.

Pero lo que no tiene un pase es que la película podría haberse planteado con un final que diera la sensación de historia cerrada de forma satisfactoria. Y sin embargo, Boyle creo que mete la pata con el final abierto en medio del meollo con que termina esta película. Incluso sin cambiar nada, simplemente jugando con el montaje y tomando la misma solución que planteó Ryan Cloogler en Los pecadores, terminando la película en un momento concreto para luego colocar el epílogo como una escena extra entre los créditos de la película, la sensación con que me hubiera dejado la película hubiera sido radicalmente distinta. Esto en realidad sería copiar la narrativa de Marvel Studios, que plantea las claves de las siguientes películas en las escenas entre y post-créditos. Y no se si esto les da vergüenza porque sería admitir que Marvel Studios planteaban buenas ideas en la parte de narrativa serializada.

Creo que los estudios y directores como Danny Boyle se equivocan completamente con estos no-finales. Hasta ahora, la principal diferencia del cine con la televisión es que el cine ofrecía una historia completa con inicio y final. Incluso las películas de Marvel Studios, tan criticadas por gente que no sabe de lo que habla, acertaban en este aspecto ofreciendo historias con principio y final satisfactorio, que luego dejanban tramas que serán desarrolladas más adelante. La actual moda / obsesión de los estudios de crear franquicias está provocando situaciones ridículas como en Fast X (de la que 2 años después de su estreno aún no se sabe cómo o cuando va a rodarse la continuación). Que se repite en esta película al no ofrecer un final satisfactorio me parece una tomadura de pelo.

El modelo de exhibición de películas en los cines está en crisis dado que mucha gente prefiere quedarse en casa viendo cine y series en streaming. Plantear películas sin final es la forma más rápida que puedo imaginar para echar de los cines a los pocos que aún vamos. Porque para tragarme una película sin final, incluso con las cosas destacables que tiene esta película, mejor me hubiera quedado en casa y cuando estrenen la historia completa ya si eso ya las veré en casa. Me parece un error de bulto que al final quien lo va a sufrir son los cines, cuando noten que cada vez va al cine menos espectadores.

28 años después me estaba gustando incluso con las pequeñas trampitas en la historia. Pero este no final me ha dejado con las peores sensaciones posibles. Muy mal, Boyle.

Comparto el trailer de la película:

28 años después está bien hasta que comete el pecado de dejar la historia sin final. Una moda terrible que acabará pasando factura a la industria.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de 28 semanas después de Juan Carlos Fresnadillo (Disney+)

A modo de previa al inminente estreno de 28 años después en los cines, volví a ver 28 semanas después, la película del director español Juan Carlos Fresnadillo secuela de clásico del género de zombies 28 días después de Danny Boyle.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

Seis meses después de que la propagación de un virus haya devastado las Islas Británicas, el ejército de los Estados Unidos declara que, vencida la epidemia, ya se puede acometer la reconstrucción del país. Los evacuados regresan entonces al país y las familias se reúnen de nuevo. Sin embargo, el virus aún no ha sido destruido y es más peligroso que nunca. (FILMAFFINITY)

28 semanas después es la continuación de 2007 del clásico de cine de zombies 28 días después dirigida por Danny Boyle y escrita por Alex Garland. Para esta continuación Boyle no pudo dirigirla al estar ocupado con el rodaje de Sunshine (2007), película también con guion de Garland. Boyle se mantuvo como productor ejecutivo, con el productor de la primera película Andrew Macdonald también involucrado en esta continuación. Garland eligió al director español Juan Carlos Fresnadillo (Tenerife, 1967) para dirigir esta película, tras quedar impresionado del trabajo de Fresnadillo en la película Intacto (2001), protagonizada por Leonardo Sbaraglia.

Fresnadillo de involucró completamente en la película. A partir del primer guion escrito por Rowan Joffé, Fresnadillo y sus colaboradores E.L. Lavigne y Jesus Olmo reescribieron completamente la historia de una familia que vuelve a reunirse tras los inicios de la reconstrucción de la sociedad en Gran Bretaña. La película de 99 minutos de duración cuenta con fotografía de Enrique Chediak, montaje de Chris Gill y música de John Murphy. Con un presupuesto de 15 millones, recaudó más de 60 en las salas comerciales, siendo además un éxito en la venta de DVDs, demostrando el tirón del género de zombies.

En el reparto tenemos a Robert Carlyle como Don, el padre de Tammy (Imogen Poots) y Andy (Mackintosh Muggleton) y marido de Alice (Catherine McCormack). Rose Byrne como Scarlet, una oficial médica estadounidense, Jeremy Renner como Doyle, un francotirador de la Fuerza Delta, Harold Perrineau como Flynn, un piloto de helicóptero e Idris Elba como Stone, un general estadounidense que supervisa el Distrito Uno, completan el reparto en sus papeles principales.

Antes de empezar mi opinión sobre la película, quiero avisaros que dado que hablamos de una película estrenada hace 18 años que todo el que ha querido verla lo ha podido hacer en Disney+ desde hace años, esta reseña va a ser FULL SPOILERS. Seguir leyendo bajo vuestra responsabilidad.

28 semanas después es una película con un montón de cosas super chulas. Empezando por un prólogo acojonante, en el que Don huye de la casa de campo donde se había refugiado con su mujer Alice, a la que abandona presa del pánico. La escena es un prodigio de tensión y dramatismo, con unos momentos bestiales como la icónica escena de Don corriendo por el campo perseguido por decenas de zombies mientras se dirige al río. La imagen de Alice mirando por la ventana mientras Don la abandona también es una pasada. Dentro de la brillantez de este prólogo, del que se dice que Boyle participó en su rodaje, quizá es necesario comentar que posiblemente sea lo mejor de la película, de forma que 28 semanas después da sensación de ir de más a menos.

Me parece curioso cómo la percepción ante este hecho ha cambiado en los espectadores durante estos 18 años. Recuerdo que cuando vi la película en el cine y la comenté con amigos, la idea general era que Don era un cobarde asqueroso que merecía morir por abandonar a su mujer, siendo este su «pecado original». Claramente Fresnadillo y su equipo de guionistas también plantean un efecto moralizante al hacer que el cobarde de la primera escena acabe sufriendo aquello de lo que escapaba. Un elemento moralizante está presente en todo el cine de terror.

Sin embargo, la llegada de The Walking Dead y otras historias y videojuegos de zombies (por ejemplo, pero no solo, The last of us) ha provocado que en la actualidad se imponga una visión más pragmática y egoísta de la vida en medio de un apocalypsis zombie. Viendo la escena, una vez Don y Alice son separados, él no tenía forma de salvarla sin ser mordido. Pensando en que en este tipo de historias los altruistas son quienes mueren primero, cosa que también veremos más adelante en esta película, creo que la visión hacia Don ya no es tan negativa como hace 18 años. En general se entiende mucho mejor que tenga un ataque de pánico y escape para salvar la vida. Esto no le convierte en un ser horrible, simplemente en una persona con las flaquezas que tendriamos todos.

Los zombies de 28 días / semanas después son transformados en segundos tras entrar en contacto con la sangre o saliva de un contagiado. Eso y que son corredores son las principales características de estos monstruos. En la parte del guion, me parece que la primera parte presenta las ideas más interesantes, como el hecho que tras 5 semanas sin alimento, la mayorías de zombies murieron de hambre. Pensando que una persona sólo puede estar ¿2/3 días? sin beber agua, tiene sentido que el cuerpo físico de los zombies muera, aunque siga siendo un arma bacteriológica a punto de estallar. Esto es una idea muy interesante. Que ello sea aprovechado para iniciar la reconstrucción me parece otra idea brillante con la que da inicio la película.

La otra gran novedad de 28 semanas después que marca su principal separación respecto a otras películas de género es el personaje de Alice. Una persona inmune al virus que no murió tras ser abandonada por Don, y que sobrevivió hasta ser encontrada por sus hijos. Frente a la visión utópica de la persona inmune como ser clave para encontrar una vacuna o cura, la película abraza el nihilismo extremo y nuestra que Alice es portadora del virus y en realidad es la que provoca el nuevo estallido de forma involuntaria, al ser besada por su marido y transmitir el virus con su saliva. Esto me parece brillante y explicaría como el virus pudo extenderse fuera de Gran Bretaña por todo el mundo, como se sugiere en el final de la película. Un desastre sin duda provocado por la decisión errónea del piloto Flynn de llevar a Francia a los hijos de Don y Alice, Tammy y Andy, tras ser mordido el niño por su padre y ser portador del virus.

Aunque el General Stone es visto como «el malo» que ordena el exterminio de la población de Londres una vez empieza un nuevo estallido del virus, en perspectiva te das cuenta que estaba haciendo lo correcto. Él tenía razón y la oficial médica Scarlet se equivocó debido a su buenismo. Unas buenas intenciones que han provocado la extensión del apocalipsis zombie por todo el mundo. En lugar de plantear llevarse a los niños a Francia debería haberlos llevado a las instalaciones militares americanas, porque esa decisión entiendo que es lo que provoca la expansión del virus por el continente europeo.

Por cierto, no recodaba que Jeremy Renner aparecía en la película interpretando al francotirador Doyle. Y la verdad es que me gusta mucho su presencia en pantalla, ofreciendo el carisma que ya en ese momento de 2007 todos sabiamos que tenía. Pensando en las fechas de producción y rodaje, diría que esta película se rodó antes que Renner fuera contratado por Marvel para interpretar a Clint Burton, en el que fue uno de los muchos castings acertados que hizo Marvel Studios en esos primeros años. Su muerte resalta la idea de que las personas altruistas mueren primero, al poner la vida de los niños por delante de su seguridad.

Pensando en otros aspectos de la película, creo que es un acierto que los hijos de Don y Alice sean unos críos guays que no quieras ostiar. Tam y Andy son unos chavales con los que empatizas y quieres proteger, a pesar del hecho de abandonar una zona de cuarentena para ir a buscar una foto de su madre, a la que creen muerta, a su casa a kilómetros de distancia. Este es un momento clave de la película que tiene que pasar o si no, no hay película, dado que es en ese momento cuando encontrarán viva a su madre malviviendo en el sótano. Y podría decirse que dado que estuvieron en Canarias de vacaciones y no vivieron el apocalipsis zombie, no saben a lo que se enfrentaban y por eso se marcharon con esa facilidad. Pero diría que es una de tantas muchas conveniencias que tiene la película. Algunas mejores que otras.

Otro de las cosas más positivas de la película es su ajustada duración inferior a los 100 minutos. Me gusta que la película vaya al grano. Tras el caos de estallido zombi, la película nos deja buenos momentos con la muerte de Renner, por ejemplo, o con la escena por el metro de Londres en la que Scarlet acaba muriendo y los niños se mueven sin ver nada ayudados por el visor del rifle de Doyle.

Visualmente, 28 semanas después sigue teniendo momentazos super chulos. Sin embargo, reconozco que por ejemplo el bombardeo del Distrito Uno no es uno de esos momentos, con una expansión del fuego y la destrucción que no ha envejecido demasiado bien. En esos momentos de pánico, entiendo el uso de la «cámara en mano» como herramienta narrativa que ayuda a transmitir el caos del momento. Sin embargo, esos momentos de «no se sabe qué está pasando» ahora me indica que era un truco más o menos apañado para tapar carencias presupuestarias, al mostrar todo con planos super cortos y casi nunca generales. No diré que queda horrible, pero si que se nota el truco. Dicho esto, en realidad estos aspectos tienen un pase.

Con lo que no puedo conectar es con las chorradas y absurdeces de la historia, que es el verdadero problema de la película y lo que impide que la disfrute. De hecho, tras volver a ver la película en Disney+ entendí por qué no había vuelto a verla desde que la vi la primera vez en el cine cuando he visto innumerables veces El amanecer de los muertos o 28 días después.

Hay una obviedad clara en películas de género. Si no hay estallido zombie no hay película. Pero dentro de la obligación de que eso pase, la ejecución, el como y por qué sucede, es bastante mejorable. Hay una primera chorrada muy grande que es más o menos aceptable, entrando en el apartado de «cosas convenientes necesarias para poner en marcha la acción»: Que Don trabaje en mantenimiento y tenga acceso a zonas restringidas. Lo que es menos aceptable es que Alice esté en aislamiento y sea portadora del virus zombi y no tenga vigilancia, lo que permite a Don entrar en la sala de contención y convertirse en zombie tras besar a su mujer. Hasta ahí podemos aceptar estas conveniencias. Lo que es una trampa grosera del guion es que Don convertido en zombi pueda salir de esta zona de aislamiento para la que se necesita una tarjeta magnética que no sabe utilizar. Terrible. Esta chorrada sumada a otras que se suceden a partir de ese momento de alguna manera me arruinaron el visionado e impidieron que disfrutara de la película. De hecho, el estallido empieza porque Don entra en una sala con centenares de civiles a la que no debería haber podido entrar por lo mismo que no debería haber podido escapar de la sala de aislamiento en primer lugar, dándose un festín con la gente indefensa. Esto para mi es un problema, porque no hay nada que odie tanto en una película como una historia que no tiene sentido en un elemento esencial.

Tras este visionado y pensando en mis vacaciones del año pasado en Londres me he dado cuenta de otra cosa. Y es que cuando Doyle, Scarlet, Tam, Andy y otro civil que es carne de cañón escapan del Distrito Uno, tienen la misión de llegar a Regent Park para ser recogidos por el helicóptero de Flynn. En ese momento hay varios planazos con ellos caminando por calles famosas y cerca de monumentos, el Parlamento, etc… Estas imágenes de los protagonistas pasando por espacios míticos de la ciudad es parte del ADN de la serie y como espectador molan. Pero en realidad el paseo que dan no tiene sentido cuando tienen que llegar al parque lo más rápidamente posible. Son momentos muy chulos, pero vacíos narrativamente.

De hecho, que vayan a Regent Park y el piloto no les coja tras matar a casi todos los zombies, obligándoles a cruzar otra vez media ciudad para alcanzar otro espacio seguro para la recogida es otra conveniencia de guion un poco absurda. Y de nuevo, el guion necesita que tras escapar de los zombis, sobrevivir a la nube tóxica y que muera Doyle protegiendo a los niños, los supervivientes entren en el metro huyendo del ejército, lo que nos da toda la escena a oscuras. Pero la ejecución de este nuevo imprevisto es un poco absurda. Como tantas cosas de la película en su segunda mitad.

Descontando estas conveniencias y absurdeces, en realidad la película me parece muy potente y tiene algunas escenas muy chulas. Además, la idea del portador inmune como vehículo de expansión del apocalipsis zombie me parece una idea genial. Pero me sabe mal quedarme con esta sensación de que con un guion un poco más trabajado la película hubiera podido ser super top y se ha quedado en un bien sin más.

A ver si la tercera parte, 28 años después, consigue dejarme con mejor sabor de boca.

Comparto el trailer de la película:

28 semanas después es una buena película que no se puede desembarazar de las tonterías de un guion poco trabajado que debería haber sido mejor.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Malnazidos de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro

Me ha gustado mucho Malnazidos, la película de zombies de Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro ambientada en la Guerra Civil Española.

PUNTUACIÓN: 8/10

Durante la Guerra Civil Española, meses de sangrientos combates han dejado tras de sí miles de muertos en las trincheras. Jan Lozano, capitán de la quinta brigada, cae prisionero. La única posibilidad de escapar a la sentencia de muerte es hacer frente a una misión imposible en campo enemigo. Pero un peligro mayor del esperado obligará a los bandos rivales a unirse contra un nuevo y desconocido adversario. Tendrán que dejar de lado el odio mutuo y así evitar convertirse en infectados.

Malnazidos está dirigida por Javier Ruiz Caldera y Alberto de Toro. Caldera (Viladecans, Barcelona, 1976) es un director de cine español conocido por su primera película Spanish Movie (2009). También ha dirigido largometrajes como Promoción fantasma (2012), 3 bodas de más (2013) y Anacleto: Agente secreto, una adaptación de la serie de historietas homónima del historietista Manuel Vázquez (2015). Alberto de Toro es un editor y director, conocido por Nicotina (2003), Spy Time (2015) y Killing Cabos (2004).

La película cuenta con un guión de Jaime Marqués Olarreaga, Alberto Fernández Arregui y Cristian Conti basado en la novela «Noche de difuntos del 38» de Manuel Martín Ferreras. La película de 105 minutos tiene música de Javier Rodero, fotografía de Kiko de la Rica y montaje de Martí Roca.

Miki Esparbé interpreta a Jan Lozano, un capitán del bando nacional al que le confieren una misión de cruzar una peligrosa zona de nadie y se va a encontrar un experimento mortal. Manel Llunell interpreta a Decruz, un joven soldado acusado de cobardía que se convertirá en su conductor para escapar del pelotón de fusilamento.

En la zona neutral se encontrarán a un comando de la república dirigido por el Sargento (Luis Callejo) y en que encontramos a Matacuras (Aura Garrido), Mecha (Álvaro Cervantes), Brodsky (Sergio Torrico) o el Comisario (Dafnis Balduz).

En el intento de escapar de un valle en el que está teniendo lugar un terrible experimento el grupo se encontrará con Jurel (Jesús Carroza), Sor Flor (María Botto) y Rafir (Mouad Ghazouan).

Me gusta apoyar mis opiniones con mi cartera. Es por esto que al enterarme de una película española de género no tuve más remedio que ir a verla en el cine, ya que si quiero que se hagan más películas de este tipo, deben resultar rentables cuando se estrenen. Y la verdad es que me alegra poder comentar en la reseña de hoy lo mucho que me ha gustado la película.

La ambientación durante la Guerra Civil Española en 1937 y la idea central de dos grupos enfrentados que deben aparcar las diferencias si quieren sobrevivir me parece un gran acierto. El uso del ejército nazi experimentando un virus mortal en suelo español es una idea sencilla pero que funciona de maravilla en este contexto. Y dentro de que todo es bastante básico y se mueve por territorios esperables, la película resulta super entretenida y se me pasó en un instante.

El mayor problema que tienen las películas de zombies es la caracterización de los personajes y la dificultad que hay en empatizar con gente que sabes que la mayoría van a morir. Sin embargo, Malnazidos es un triunfo en este sentido, ya que con muy pocas pinceladas consiguen crear a unos personajes con los que al menos yo pude conectar desde el minuto cero y que me parecen super humanos y realistas. Unos personajes que reflejan muy bien el drama de la Guerra Civil y como la mayoría de soldados acabaron en un bando no por sus convicciones sino por el lugar donde residían. En este sentido, un par de muertes realmente me sabieron mal porque el personaje había conseguido caerme muy bien.

Malnazidos aprovecha para hacer una españolización de algunos tópicos del géneros de zombies que me han hecho mucha gracia. Estos momentos de humor son super puntuales, y quizá por eso funcionan tan bien. Por cierto, la historia huye del gore y de mostrar muertes truculentas, por no que no diría que se trate de una película de terror, sino más bien una aventura bélica con zombies. Este crossover de géneros es también parte del encanto y lo que hace que la historia funcione tan bien.

Dentro que la película me ha gustado mucho, he encontrado algunos detalles de la historia un poco porque si, sobre todo en lo referido a las transiciones entre los diferentes sets de acción. Son detalles ciertamente menores que no son errores o saltos de lógica groseros, y no me impidieron en ningún momento disfrutar de la historia porque Malnazidos sí acierta en la construcción de los personajes. Por ejemplo, se hace raro que los protagonistas abandonen la casa de campo en la que están atrincherados y con munición al llegar varias decenas de zombies a los que ven llegar y saben como matar. Sin embargo, entiendo que si los personajes se quedan ahí no hay película, dado que tienen que llegar a su siguiente etapa en el camino para ir descubriendo lo que sucede en el valle.

De la misma manera, tampoco no es un gran problema pero hay un par de muertes que quedan raras porque no se acaba de ver cuando han mordido a esos personajes. Aparte de la llegada de hordas de zombies de la nada. Ya digo que no son cosas importantes, pero me veo en la obligación de comentar estos elementos que hacen que el guión, siendo bueno, no sea lo compacto o perfecto que me hubiera gustado.

Sin embargo, igual que digo esto también tengo que decir que me gusta del guión que dentro que históricamente la Alemania Nazi colaboró con el bando nacional de Franco, muestre expresamente que si los comunistas hubieran tenido el experimento nazi para crear zombies no hubieran dudado en usarlo para masacrar a la población civil que reside en el lado nacional, demostrando que en una guerra de estas características, ambos bandos realizaron actos terribles. Toda la parte de unos personajes que empiezan odiando a los del bando contrario para acabar descubriendo que no son tan diferentes me parece un acierto total.

Malnazidos es una película que acierta en la mayoría de elementos que plantea y que me resulta super entretenida, algo que no siempre me he encontrado en otras película españolas recientes. Además, me ha dejado con ganas de leer la novela «Noche de difuntos del 38» de Manuel Martín en la que se inspira la película, creo que puede ser un estupendo entretenimiento que amplíe la experiencia de la película.

Comparto el trailer de la película:

Malnazidos me ha parecido una película que lo hace casi todo bien y que sabe darle una vuelta de tuerca a un género como es el de zombies en el que podría parecer que está todo dicho. Más películas así, por favor.

PUNTUACIÓN: 8/10

Espero vuestras opiniones en la zona de comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que te suscribas al blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Year Zero volume 2 de Benjamin Percy y Juan José Ryp (AWA Studios)

Year Zero, el comic de zombies creado por Benjamin Percy en Awa Studios, fue una sorpresa cuando leí hace unos meses el primer volumen. Este segundo volumen viene con cambio de dibujante, Juan José Ryp con Frank Martin en el color sustituyen a Ramón Rosanas y Lee Loughridge, con resultados igual de buenos.

PUNTUACIÓN: 7/10

La exitosa serie Year Zero de Upshot regresa con cuatro nuevas historias desgarradoras de supervivencia de un mundo postapocalíptico, ambientadas varios meses después de los eventos del Volumen uno: una capitana de un barco noruego y sus dos pequeños nietos navegan por un océano lleno de muertos vivientes mientras eluden a los implacables. piratas tras su rastro. Un jefe de un cártel colombiano se entrega a todos sus caprichos más sádicos sin darse cuenta de que una amenaza mucho mayor que los zombis se dirige hacia su fortaleza en la jungla. Un médico ruandés debe superar el miedo paralizante que lo ha atormentado durante toda su vida mientras se tropieza con la maleza africana. Y una mujer embarazada atrincherada en una gran tienda estadounidense descubre que la mayor amenaza para su vida, y la de su hijo por nacer, podría no ser un no muerto. Benjamin Percy (Wolverine, X-Force) vuelve a escribir esta mirada global al apocalipsis zombie, ahora junto al artista Juan José Ryp (Britannia) y el colorista Frank Martin (Infinity Wars).

Este segundo volumen recopila los números 1-5 USA, incluyendo las maravillosas portadas originales de Kaare Andrews.

Year Zero es un curioso experimento narrativo, al plantear Percy una narración fragmentada mientras vemos como se vive el apocalipsis zombie en varias partes del mundo, con personajes que viven o mueren que jamás se encontrarán unos con otros. En su mayoría estamos ante 2 escenas de dos o tres páginas de cada personaje por grapa, lo que obliga a Percy a un ejercicio de síntesis para centrarse en lo más importante de cada situación. Si en el primer volumen Percy contó 5 historias, entre ellas la de la científica que descubrió el virus zombie que puso en marcha el apocalipsis sin ella pretenderlo, en este segundo volumen Percy opta por limitar las historias a 4, lo que le permite tener cierto margen adicional para contar cada una de las historias.

Esto es lo bueno y lo malo del comic, la verdad. Por un lado, no es habitual ver comics con esta narrativa fragmentada con personajes que no tienen nada que ver entre si, lo cual para mi hace que este comic sera diferente a todo lo que estoy leyendo actualmente. Sin embargo, al final tenemos un comic de 100 páginas (cada grapa tiene 20 páginas), que obviamente hace que las historias de 25 páginas de cada personaje den para lo que den y no puedan ser profundas ni complejas. Sin embargo, el objetivo de crear un tapiz de situaciones variadas y entretenidas está más que conseguido.

Sin embargo, Percy acierta completamente al presentar historias variadas de buenas y malas personas, alguna un pelín chorra hay que decirlo, en las que por supuesto la supervivencia no está garantizada. A pesar de la limitación de páginas, Percy se las apaña para colocar puntazos y momentos chungos en cada grapa, lo cual creo que tiene mucho mérito y hace que la lectura sea rápida y en una sentada.

La elección del español Juan José Ryp como dibujante de este arco es un acierto total. Ryp es un dibujante con gran experiencia que ha trabajado con Warren Ellis o Alan Moore en el sello Avatar Press y que está acostumbrado a comic de terror con grandes dosis de ultra violencia y sexo. También ha publicado en DC, Marvel o Valiant, lo que le convierte en un artista de calidad constratada para dibujar el comic. Su dibujo muestra sin florituras la acción sin grandes alardes en cuanto a la planificación de página o los punto de vista de cámara, pero cuenta de maravilla la historia. Además, su estilo encaja perfectamente con los personajes enajenados que encontramos en este comic, sabiendo aportar el toque de locura perfecto que la historia necesita.

Year Zero no es un comic memorable ni creo que vaya a marcar un antes y después a nada. Y sin embargo, ofrece un perfecto entretenimento para todos los fans del género de zombies entre los que me incluyo. Confirmo desde ya que si AWA se decide a publicar un tercer volumen, que de momento no está confirmado, yo lo compraré seguro.

PUNTUACIÓN: 7/10

Espero vuestras opiniones en la zona de comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que te suscribas al blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!