Tenía muchas ganas de leer la nueva serie de Rick Remender con su amigo y colaborador Jerome Opeña (Fear Agent, X-Force), una historia de ciencia ficción que nos traslada en un mundo de fantasía que presenta curiosos paralelismos con la sociedad americana actual.
El Dios de los Susurro ha extendido su paranoia y poder en cada rincón del Reino de Zhal. Sus espías se ocultan en cada reino propagando el miedo y la desconfianza. Frente a esto, Adam Osidis, un caballero agonizante de una casa caída en desgracia, debe decidir si unirse a un grupo de rebeldes que luchan para liberar a este mundo del poder de este casi Dios omnipotente, o aceptar la propuesta del villano Gharils Sulm, que puede conceder lo que su corazón más anhela. En un mundo en el que los hombres se han rendido al miedo, uno de los últimos hombres libres tendrá que elegir.
El equipo creativo es de total confianza. El escritor Rick Remender vuelve a reunirse con sus colaboradores Jerome Opeña y el colorista Matt Hollingsworth para crear una serie de fantasía épica con una sensibilidad moderna basada en la clásica idea de Fausto y su pacto con el Diablo. La idea que transmitían en las entrevistas previas era crear una historia llena de acción, giros inesperados y personajes llenos de carisma y un villano que amenazará con robar el show.
Lamentablemente, este primer tomo me ha sabido a poco por varios motivos. En primer lugar, porque este tomo de presentación solo son 4 números, cuando normalmente un tomo Image agrupa 5 o 6 números. Image vende los primeros tomos de sus series a un precio especial de 9,95$ que invita a nuevos lectores a probar series nuevas por un precio muy asequible. Y si consigue engarcharte, los siguientes tomos ya se venden a precio “normal” de 14,95$ que ya permiten un mayor beneficio para los autores. Lo cierto es que este tomo termina en un suspiro, y espero que la decisión sobre el tamaño del tomo sea totalmente creativa y no fuera provocada por consideraciones económicas.
Pero el principal motivo de decepción es el propio concepto del comic, que gira sobre qué estariamos dispuestos a sacrificar por salvar a tu familia o seres queridos. La historia genera paralelismos sobre el mundo actual, con una sociedad que busca la homogeneidad y lucha contra los que intentan salirse de la norma. E incluso diría que hay una crítica hacia la creciente radicalización de la sociedad americana, que es cada vez más radical y ultraconservador, llegando a negar verdades científicas como el cambio climático, y aceptando mentiras fragrantes como «post-verdades».
De la misma forma, la pregunta central también deriva en qué clase de hombre eres si estas dispuesto a condenar a una vida de penurias a tu familia por mantener tus principios inquebrantables. Lo que a priori es una propuesta interesante y diferente, no llega a triunfar, al menos en este primer tomo, porque la historia se centra en exceso en el “high-concept” y se olvida de construir suficientemente a los protagonistas, en especial a Adam Osidis.
Remender siempre ha sido un autor de personajes que tienen que luchar contra sus propias debilidades, pero en Seven to Eternity me ha parecido que ha dado más importancia al origen del propio mundo y el concepto central. Esto ya lo vimos en su serie “Tokyo Ghost” junto a Sean Murphy, en la que presentaba el conflicto entre el mundo tecnológico actual frente a la naturaleza, y como esta dependencia digital nos está convirtiendo en corderos que seguimos los dictados de las corporaciones. Y en esa serie los personajes principales tampoco engancharon. Esperemos que no pase lo mismo en Seven to eternity.
Entiendo que él y Opeña están creando un mundo de fantasía con una enorme amplitud, pero si los personajes no enganchan, al final la serie está destinada al fracaso. El primer volumen lo componen los primeros 10 números, por lo que en el próximo tomo podremos saber seguro si esta va a ser una serie para mi.
En el acabado artístico, Jerome Opeña con colores de Matt Hollingsworth, realiza un notable trabajo con el diseño de los personajes y su mundo, pero creo que la historia de Remender no le da verdaderos momentos para lucirse. En todo caso, comparto algunas páginas del primer número sin rotular para que podais disfrutar de su increíble fluidez narrativa, que permite seguir perfectamente lo que está pasando sin necesidad de textos de apoyo.
Seven to Eternity me ha dejado cierta sensación de decepción debido quizá al propio concepto de la serie, que parece que da protagonismo a la metáfora frente a los personajes, algo que se está volviendo cada vez más habitual en la obra de Rick Remender. Con todo, creo que estamos ante un equipo artístico de total garantía, por lo que siguen contando con mi confianza.
PUNTUACIÓN: 6.5/10
Fuente previews: CBR