Archivo de la etiqueta: George Richmond

Crítica de Kingsman: El círculo dorado de Matthew Vaughn

Mi comentario sobre Kingsman: El círculo dorado de Matthew Vaughn va a ser muy sencillo y rápido. ¿Te gustó Kingsman: Servicio Secreto? Entonces disfrutarás un montón esta continuación. Por el contrario, si la adaptación del comic de Mark Millar y Dave Gibbons te pareció soez y over-the-top, entonces mejor que te ahorres esta nueva película. Por suerte, yo me encuentro dentro del primer grupo, así que para mi han sido 140 minutos de diversión políticamente incorrecta protagonizada por personajes carismáticos y con unas escenas de acción espectaculares e imaginativas.

PUNTUACIÓN: 8/10

Kingsman: El círculo dorado es una historia completamente original que no adapta ningún comic de Mark Millar. Está escrita por Matthew Vaugh en colaboración con Jane Goldman, colaboradora habitual del director y productor inglés.

Cuando el cuartel general de los Kingsman es destruido  por un misterioso cártel de la droga liderado por la sociópata Poppy Adams (Julianne Moore), Eggsy (Taron Egerton) tendrá que viajar junto a Merlin (Mark Strong) a los Estados Unidos para pedir ayuda a sus primos lejanos, los Statesmen. Ambas organizaciones secretas de élite tendrán que unir sus recursos para intentar derrotar a su enemigo común y salvar al mundo…

Kingsman: Servicio Secreto (2015) me pareció una película increíblemente divertida y carismática que mejoraba considerablemente el correcto tebeo de Mark Millar y Dave Gibbons. El éxito de esta película en un año en el que se estrenaron infinidad de películas de espías fue todo una sorpresa y un soplo de aire fresco a un género que parecía que ya no tenía nada interesante que contar tras las películas de Jason Bourne.

Fox dió luz verde a la continuación, pero a la vez ponía el listón muy alto y podía provocar unas expectativas imposibles de superar. En este sentido me alegra comprobar que Kingsman: El circulo dorado «sólo» ofrece más de lo mismo. Hablo,  claro, de acción super espectacular con grandes dosis de inventiva e imaginación, multitud de personajes carismáticos en cada fotograma y situaciones irreverentes, over-the-top y políticamente incorrectas que me sacaban la sonrisa constantemente.

No diría que Kingsman: El círculo dorado es mejor que su antecesora, pero seguro que no es peor. Cumple sobradamente con nuestras expectativas y es una película palomitera en el mejor sentido que ofrece lo que se espera de ella sin reirse del espectador.

Técnicamente, la película se sale. Ya no es una sorpresa comprobar como Matthew Vaughn nos ofrece unas imágenes espectaculares y unos planos perfectos en cada escena. Lo increíble es que Vaughn haya realizado esta película con «sólo» 100 millones de presupuesto, una minucia si lo comparamos con otras películas recientes como Batman v. Superman, X-Men: Apocalypse o Transformers 5.

Ayudado por el director de fotografia George Richmond, que ya trabajó en Kingsman: Servicio Secreto, la acción está siempre clara y nítida. Vaughn mete al espectador en medio del meollo y siempre tenemos clara la situación de cada personaje  en la escena, entendiéndose lo que está pasando. Además, los planos generales son espectaculares y en las escenas de diálogos la cámara está en el sitio justo para enfatizar los sentimientos de los personajes.

Otra cosa a destacar es que cuando vi que la película duraba 140 minutos, temí que se me hiciera demasiado larga. Nada más lejos de la realidad, la película pasa en un suspiro gracias al gran sentido del ritmo de Vauhgn, alternando los momentazos para que en ningún momento sientas que una escena o personaje sobran o están para hacer bulto y rellenar minutos. Al final, fueron casi dos horas y media de pura diversión.

Pero es que además el casting es un acierto brutal y se nota que todo el mundo se lo está pasando en grande. Vaughn consigue que conectemos con todos los personajes, independientemente de sus minutos en pantalla, y nos dejan con ganas de más. Para los que sobrevivan, claro.

Julianne Moore lo borda como una maruja psicópata obsesionada con la estética de los 50 que domina el mayor cartel de la droga a nivel mundial y cuyo plan maléfico es casi tan estúpido como el de Samuel L. Jackson en la primera película. La villana es quizá el eslabón más débil de la cadena, pero es la protagonista de algunos de los gags más bestias de la película y su actitud «happy» contrasta con sus acciones brutales.

En el lado de los americanos, tenemos a Jeff Bridges como Campagne, el director de los Statesmen, con pocos minutos pero bien aprovechados. Channing Tatum es Tequila, el agente más duro del cuerpo, Pedro Pascal es Whiskey, maestro en el uso del látigo y Halle Berry es Ginger, la oficial de inteligencia que solo desea un puesto como agente de campo pero que es rechazada una y otra vez sólo por ser mujer. Y por si fuera poco, tenemos al Presidente de los Estados Unidos interpretado por Bruce Greenwood, que dará un nuevo significado a la expresión «ganar la guerra contra la droga».

Por el lado británico, además de Eggsy (Taron Egerton) y Merlin (Mark Strong), descubriremos cómo pudo sobrevivir Galahad (Colin Firth) al final de la anterior película, y volveremos a ver a Roxy (Sophie Cookson), la Kingsman compañera de Eggsy.

Además, comprobaremos cómo la Princesa heredera Tilde de Suecia (Hanna Alström), protagonista de la criticada broma del final de la primera Kingsman ha encontrado con Eggsy al amor de su vida, lo que demuestra que algo bueno salió después de todo y siempre hay luz al final del túnel. Ya lo se, es una broma de mal gusto, pero no pude evitarla…  y encaja perfectamente con el tono irónico y desmitificador de la película.

Y destacar también la impresionante aparición de Elton John interpretándose a si mismo, que protagoniza uno de los numerosos momentazos de la película. Viéndole en pantalla no me cabe duda que todo el reparto de lo ha pasado de p#$@ madre rodando esta película.

Vi la película en versión original, y me encantó el exagerado y divertido contraste entre el perfecto acepto British de los Kingsman y el cerrado acento tejano de los Statesmen yankis. Pero es que Eggsy cambia mucho cuando está en misión oficial, compórtandose como un perfecto gentleman, a cuando está con sus colegas del barrio y su acento es el un pandillero más. Habla y se comporta completamente diferente. Estos los pequeños gustazos que solo se disfrutan con la V.O. y que seguro se pierden con la traducción.

Esto me lleva a las escenas de acción. Como en todo en Kingsman: El círculo dorado, la acción no sorprende como lo hizo en la primera película. Pero ya le gustaría al 99% de los directores de acción actuales tener el sentido del ritmo y la continuidad que tiene Vaughn. Las persecuciones son increíbles y las peleas y tiroteos cuentan con unas coreografías fluidas y espectaculares. Aún sin elemento sorpresa, diría que el climax final está a la misma altura que el ya clásico tiroteo en la iglesia protagonizado por Colin Firth en la primera parte.

Si, Kingsman 2 es más de lo mismo. Pero si es un producto de esta calidad, ya pueden empezar a rodar la tercera parte, que yo pagaré encantado por verla en el cine. Como dirían en los USA, «Shut up, bitch, and take my money!» Vaya, Matthew Vaughn me está convirtiendo en un mal hablado…

Esto me lleva al tema de las críticas de los medios «serios». La verdad es que las críticas a Kingsman 2 no están siendo demasiado buenas, y en muchos artículos se comenta como negativo que la película no sorprende porque es igual a la primera. Aunque esto es un hecho objetivo, me sorprende como esto se expresa masivamente con una connotación super negativa que pesa más que todo lo bueno que la película ofrece, que es mucho. ¿Por qué no leí esos mismos comentarios de «más de lo mismo» con Fast 8, cualquier película de James Bond, Jurassic World o Star Wars VII? Pongo estos ejemplos, pero eso mismo podría decirse del 75% del cine comercial americano.

Compruebo además que la broma sexual del final de Kingsman 1 no le gustó nada a algunos críticos. En especial a las de sexo femenino, pero no exclusivamente. Y no han perdido tiempo en recordarlo cuando comprobamos que Kingsman 2 tiene este mismo tipo de gags sexuales. Pero ¿tan difícil es de ver que esas bromas buscan exponer de forma irónica (y un poco burra, por qué no decirlo) el machismo de las películas de James Bond en las que en cada película tiene una nueva novia de la que está enamoradísimo de una forma pura, para luego tirarla a la basura? El final de Kingsman 1 en ese sentido era muy bestia, pero más honesto. «Si salvas el mundo te daré tu premio», dijo la princesa. Y cumplió. No había amor, solo cumplía el acuerdo con Eggsy.

Entiendo que es mucho más machista una película al azar de James Bond que las de Kingsman, que reconociendo el machismo implícito en este tipo de cine, subvierten las reglas tradicionales y crean escenas super divertidas y over-the-top para poner encima de la mesa todos estos clichés y reirse de ellos. No se, a lo mejor el raro soy yo…

Como comentaba, viendo la calidad de Vaughn, ojala hubiera dirigido él películas decepcionantes como Logan o X-Men: Apocalypse, también producidas por Fox. Otro gallo hubiera cantado. Además, lleva tiempo comentándose que Vaughn sería el director perfecto para dirigir una hipotética Man of Steel 2, que devolviera al personaje al tono correcto que Snyder nunca entendió. No puedo estar más de acuerdo, con Vaughn a los mandos, la película sería increible. Dicho lo cual, lamentablemente no creo que lleguemos a ver nunca estrenada esta película. Aunque Vaughn ha trabajado para Fox en X-Men: First Class, tuvo muchísima libertad porque prometió una película barata y rápida de rodar y los ejecutivos no sabían muy bien qué hacer con la franquicia tras X-Men 3. En el caso de Warner, no tengo duda que sus ejecutivos intentarían controlar y cambiar los planes de Vaughn. Aunque ojala me equivoque.

Comparto el primer trailer de la película:

Como ya he comentado, Kingsman: El círculo dorado es una excelente película de entretenimiento que tiene claro que quiere ofrecer a los espectadores y triunfa al cumplir con nuestras expectativas, algo que no puede decirse de la mayoría de películas palomiteras actuales.

PUNTUACIÓN: 8/10