Archivo de la etiqueta: Zoe Saldana

Crítica de Lioness temporada 2 (SkyShowtime)

El visionado de la segunda temporada de Lioness, la serie militar creada por Taylor Sheridan en SkyShowtime, me ha proporcionado una sorpresa muy positiva.

PUNTUACIÓN: 8/10

Un grupo de agentes secretos de la CIA compuesto en su mayoría por mujeres, hace todo lo necesario por mantener el mundo a salvo. Descubre la nueva serie de espionaje, solo en SkyShowtime.

La lucha de la CIA contra el terrorismo ahora se desarrolla en suelo estadounidense. Joe, Kaitlyn y Byron reclutan a una nueva agente para el equipo de Lioness, quien deberá infiltrarse en una organización que hasta entonces desconocían. Joe, sometida a una fuerte presión de todos los lados, deberá hacer frente a los profundos sacrificios personales que ha hecho como líder del programa Lioness.

Taylor Sheridan (Carolina del Norte, 1970) es un cineasta, productor, guionista y actor estadounidense. Como actor, Sheridan trabajó en series como Hijos de la anarquía y Veronica Mars. Dio el salto a guionista con Sicario (2015), la brillante película de Denis Villeneuve por la que fue nominado al premio Writers Guild of America al mejor guion original. Con Hell or High water (David Mackenzie, 2016), fue nominado al Óscar al Mejor Guion Original. Su primera película como director y guionsta fue Wind River (2017), tras la que escribió la secuela de 2018 de Sicario: El día del soldado dirigida por Stefano Sollima. En 2021 estrenó su segunda película como director, Aquellos que desean mi muerte, protagonizada por Angelina Jolie.

En televisión, Sheridan ha construido un imperio en Paramount Network y lo ha hecho a partir de buenas historias que han ido creciendo paso a paso. Además de Yellowstone, serie de la que es co-creador junto a John Linson, productor, guionista y director de algunos episodios, ha creado sus precuelas 1883 (2021) y 1923 (2022), y es cocreador del thriller policíaco Mayor of Kingstown con Jeremy Renner, con quien coincidió en Wind River. También ha creado la serie policíaca Tulsa King, que co-escribe y dirige con Terence Winter y está protagonizada por Sylvester Stallone.

Taylor Sheridan está on-fire en SkyShowtime (Paramount+ en USA). Si alguien pensaba que se iba a tomas unas vacaciones tras el final de Yellowstone, no podía estar más equivocado. Sheridan escribe los 8 episodios que forman parte de esta segunda temporada de Lioness, además de dirigir los dos primeros episodios. El resto han sido dirigidos por Michael Friedman (2 episodios) y Stephen Kay (4). Tras ver Lioness, me queda empezar a ver Landman, drama también creado por Sheridan ambientada en el mundo de los pozos petrolíferos de Texas y que está protagonizado por Billy Bob Thornton.

En este segunda temporada tenemos de vuelta a Zoe Saldaña como Joe, oficial de la CIA a cargo del programa Lioness sobre el terreno. Junto a ella tenemos a Laysla De Oliveira como Cruz Manuelos, una marine de reconocimiento novata en el programa Lioness en la primera temporada que ya es una agente veterana en esta segunda. Dave Annable como Neil, marido de Joe y cirujano oncológico pediátrico. Jill Wagner como Bobby, jefe de equipo del QRF del programa Lioness. Thad Luckinbill como Kyle, oficial de la CIA y colega de Joe. Hannah Love Lanier como Kate, la hija adolescente de Joe y Neil. Nicole Kidman como Kaitlyn Meade, funcionaria de alto rango de la CIA en el programa Lioness y jefa de Joe. Morgan Freeman como el Secretario de Estado de EE.UU. Edwin Mullins y Michael Kelly como Byron Westfield, subdirector de la CIA y supervisor de Kaitlyn. El nuevo personaje de esta temporada es la capitana Josephina Carrillo, interpretada por Génesis Rodríguez, una piloto de helicópteros Apache del ejército de los EE.UU. reclutada para el programa Lioness debido a su conexión familiar con el cártel mexicano que secuestró a una congresista estadounidense. Por cierto, otro detalle curioso es que al igual que en Yellowstone, Taylor Sheridan se ha guardado un papel para si mismo en la serie, el veterano miembro de los Delta Cody Spears, que trabajará con la CIA a lo largo de la temporada.

El concepto de Lioness era un grupo de la CIA que entrenaba a mujeres militares para que se infiltraran en lugares de gran peligro para conseguir información que permitiera el asesinato de los principales líderes del terrorismo internacional. En la primera temporada la novata Cruz se hizo amiga de la hija de un líder de un grupo terrorista árabe, consiguiendo eliminarle. Y tengo que reconocer que la premisa de «nueva agente infiltrada, ahora en un cártel de la droga de México» me parecía un poco más de lo mismo. Algo que no estaba mal pero en realidad no me parecía especialmente atractivo cuando se estrenó la serie. Esto es una sensación totalmente aleatoria y subjetiva, porque por ejemplo la segunda temporada de Reacher, pensando en series de acción, claramente fue «más de lo mismo», y no pudo dejarme más satisfecho. Por suerte, el principal acierto de esta temporada de Lioness es que Sheridan se sale de la tangente y la trama no tiene nada que ver con la premisa inicial de «agente femenina infiltrada». Y lo que tenemos es mucho más, mucho mejor.

En esta segunda temporada, tras secuestrar un cártel mexicano a una congresista americana, la CIA descubre que este grupo criminal tiene conexiones con el gobierno chino, que busca probar las defensas y aprovecharse de las debilidades a lo largo de la frontera. Ante esto, el plan es el mismo de siempre, captar a una militar con vínculos familiares con este cártel para que se infiltre y encuentre a su tío, con el objetivo de asesinarle. Lo que pasa es que el plan nunca llega a realizarse, al complicarse todo una barbaridad. Y me gusta la idea que los mejores planes en el papel se convierten en papel mojado cuando empieza la acción sobre el terreno.

Hablando de acción, hay un montón a lo largo de los 8 episodios de esta temporada. Una acción seca y directa que deja claro que las fuerzas especiales no disparan dos veces si con una bala pueden completar el trabajo. La acción está super bien rodada y es otro de los hechos destacables y diferenciales de Lioness. El primer ataque a la casa de la congresista, el rescate realizado por el grupo de Joe, o las misiones con el helicóptero Apache pilotado por la capitana Carrillo son momentos super potentes que sólo por ellos se justifica el visionado de la serie si eres fan de las historias de acción militar.

Lioness tiene un problema casi insalvable, y es que la protagonista Joe, interpretado por Zoe Saldaña, es una gilipollas que me cae mal. No es de ahora, ya en la primera temporada que cayó super mal y esa percepción no sólo no ha cambiado, sino que se ha confirmado. La forma en que coacciona a la capitana Josephina Carrillo para que renuncie a toda su vida en el ejército para trabajar con la CIA, lo quiera ella o no, es asquerosa. Y entiendo que en parte Joe es como el personaje del Coronel Nathan R. Jessep de Algunos hombres buenos, interpretado por Jack Nickolson, el militar que no teme ensuciarse las manos y hacer lo que haga falta para que los Estados Unidos puedan mantener su pureza. Pero Joe encarna todo lo malo de las agencias black-ops del gobierno americano que actúan sin control por todo el mundo haciendo lo que quieren porque están «protegiendo la seguridad nacional». Por ejemplo, viendo como tratan (torturan) al agente de la DEA que creen se ha vendido a los narcos para resultar que no es así.

De alguna manera veo que Sheridan ha planteado en Joe una inversión de los típicos papeles de militares duros interpretados por hombres en el entretenimiento. Siendo ella la que pone la seguridad de los Estados Unidos por encima de todo lo demás, mientras su marido se queda en casa lamentando que les deje solos y que pueda morir en cualquier momento. En negativo, la serie se alarga demasiado tiempo con este subargumento, de forma que prácticamente en todos los episodios tenemos que ver al menos una escena del marido de Joe, que no acaba de ir a ningún sitio. Aparte del problema que es ver la interpretación super over-the-top de Zoe Saldana, alternando fases de super dura motherfucker con momentos lamentables llorando por las esquinas pensando que está dejando sola a su familia. Aparte que el personaje de Joe me parece super chungo, lo cierto es que la interpretación super sentida / super exagerada de Saldana no ayuda a hacer este personaje más aceptable.

Hablando del resto del reparto, Morgan Freeman está super mayor, pero al mismo tiempo los dos monólogos que tiene son super potentes. Nicole Kidman como la jefa de Joe en la CIA tiene una cara imposible desde que se operó y se la estiró tanto que parece que no va a poder expresar una emoción. Pero lo cierto es que encaja con una alto cargo de la CIA que vendería a su madre si eso es lo que necesita para llevar a cabo una misión. Y me hace gracia lo que Michael Kelly, que lleva ¿10 años? repitiendo su papel de House of Cards que le lanzó a la fama, con la misma cara seria y sus tics afectados. Dicho esto, creo que Lioness tiene un reparto estupendo con un carisma bestial en el que todo el mundo cumple con nota con lo que Sheridan les pide.

Hablando de Sheridan, me gusta que en la conclusión de la temporada muestre que las cosas no pueden verse en términos de blanco y negro puros, dado que el mundo es complejo y toda acción provoca múltiples derivadas y ramificaciones. Aunque Sheridan plantea un gran climax de acción en Irán, lo más importante tiene lugar en México cuando la CIA llega a un acuerdo con los narcos para que se desvinculen de sus amigos chinos. Las consecuencias de ese pacto y el propio hecho de llegar a un acuerdo con un grupo criminal es tremendo.

Una de las cosas que más escuece en España sobre las series de Taylor Sheridan es su ideología, siendo catalogado por mucha gente en redes sociales como un «facha». Creo que debe molestar mucho que una persona esté teniendo tanto éxito entre el gran público contando buenas historias que refutan muchos aspectos de las modas de lo políticamente correcto, por ejemplo que no estar de acuerdo con algo que dice una persona NO ES UN DISCURSO DE ODIO. Al igual que el que haya una ideología que exige adhesión ciega sin que nadie pueda contraponer ninguna idea diferente, por miedo a ser tachado de «__ista», es lo contrario a democrático. Yellowstone, 1923, Tulsa King, Mayor of Kingstown o incluso esta Lioness pueden considerarse series «para hombres». Y no entiendo que esto puede verse como un problema cuando en el 99% del entretenimiento de Netflix o Disney+ claramente son contenidos de «progresismo activista» que quiere decirte como tienes que pensar, hablar y relacionarte. El mensaje de Taylor es mucho más sencillo y directo, y no busca cambiar el mundo, simplemente entretener con una buena historia. Desde luego, yo lo prefiero.

Junto a las claves narrativas, que me parecen super interesantes sin perjudicar el factor entretenimiento que debe tener cada episodio, me hace gracia que Sheridan haya creado para si unos personajes que son el ejemplo claro de ideal de poder. Si en Yellowstone su papel era un adiestrador de caballos super experto que seduce a todas las mujeres a su alrededor, en Lioness es un DELTA tirador super experto de gran veteranía que controla como nadie las misiones de combate. En todo caso, dado que esta es su serie, me parece bien que haga lo que quiera, mientras el estudio se lo permita.

Zoe Saldaña comentó recientemente que había firmado un contrato para tres temporadas de Lioness. No se qué audiencia ha tenido esta segunda temporada, pero si tengo claro que yo veré lo siguiente que realice Sheridan para SkyShowtime. Empezando por Landman, la segunda temporada de 1923 o esperemos que una tercera temporada de Lioness ya para el año que viene. Pensar que todos estas series vienen de la mente de Taylor Sheridan me parece una locura. Ahora mismo veo a Sheridan al nivel (cada uno en lo suyo) de lo que Brandon Sanderson significa para la narrativa fantástica. Y mientras siga ofreciendo este nivel en sus series, yo las veré encantado.

Comparto el trailer de esta temporada:

Me ha gustado mucho la capacidad de Taylor Sheridan de no ir a lo fácil y ofrecernos en la segunda temporada de Lioness una historia muy diferente a la de la primera temporada.

PUNTUACIÓN: 8/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Special Ops: Lioness (SkyShowtime)

La nueva serie creada por Taylor Sheridan en SkyShowtime no es un western sino un thriller ambientado en el mundo de las operaciones especiales que luchan contra el terrorismo internacional. Hoy analizo Special Ops: Lioness.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

8 episodios. Está basada en un programa militar real de EE.UU. y relata la historia de Cruz Manuelos (Laysla De Oliveira), una joven marine que se incorpora al equipo Lioness Engagement con el objetivo de infiltrarse en una organización terrorista y desmantelarla.

Taylor Sheridan (Carolina del Norte, 1970) es un cineasta, productor, guionista y actor estadounidense. Como actor, Sheridan trabajó en series como Hijos de la anarquía y Veronica Mars. Dio el salto a guionista con Sicario (2015), la brillante película de Denis Villeneuve por la que fue nominado al premio Writers Guild of America al mejor guion original. Con Hell or High water (David Mackenzie, 2016), fue nominado al Óscar al Mejor Guion Original. Su primera película como director y guionsta fue Wind River (2017), tras la que escribió la secuela de 2018 de Sicario: El día del soldado dirigida por Stefano Sollima. En 2021 estrenó su segunda película como director, Aquellos que desean mi muerte, protagonizada por Angelina Jolie.

En televisión, Sheridan ha construido un imperio en Paramount Network y lo ha hecho a partir de buenas historias que han ido creciendo paso a paso. Además de Yellowstone, serie de la que es co-creador junto a John Linson, productor, guionista y director de algunos episodios, ha creado sus precuelas 1883 (2021) y 1923 (2022), y es cocreador del thriller policíaco Mayor of Kingstown con Jeremy Renner, con quien coincidió en Wind River. También ha creado la serie policíaca Tulsa King, que co-escribe y dirige con Terence Winter y está protagonizada por Sylvester Stallone. Special Ops: Lioness es su última serie.

Sheridan ha creado y producido Special Ops: Lioness, además de escribir los ocho episodios que forman esta temporada. Estos episodios han sido dirigidos por John Hillcoat (4 episodios), Anthony Byrne (2) y Paul Cameron (2). Con esta serie Sheridan se toma un respiro de los westerns modernos que está realizando con la saga de Yellowstone, planteando un thriller de naturaleza militar.

En el reparto tenemos a Zoe Saldaña como Joe, oficial de la CIA a cargo del programa Lioness sobre el terreno. Laysla De Oliveira como Cruz Manuelos, una marine de reconocimiento y novata en el programa Lioness. Dave Annable como Neil, marido de Joe y cirujano oncológico pediátrico. Jill Wagner como Bobby, jefe de equipo del QRF del programa Lioness. Thad Luckinbill como Kyle, oficial de la CIA y colega de Joe. Stephanie Nur como Aaliyah Amrohi, la hija de un presunto terrorista. Hannah Love Lanier como Kate, la hija adolescente de Joe y Neil. Nicole Kidman como Kaitlyn Meade, funcionaria de alto rango de la CIA en el programa Lioness y jefa de Joe. Morgan Freeman como el Secretario de Estado de EE.UU. Edwin Mullins y Michael Kelly como Byron Westfield, subdirector de la CIA y supervisor de Kaitlyn.

Special Ops: Lioness es una correcta serie de acción cuya premisa es ver a una joven agente de las fuerzas especiales hacerse amiga de una rica heredera saudí para poder llegar hasta su padre, un poderoso hombre de negocios que financia a grupos terroristas en todo el mundo, para eliminarle. La serie sigue a dos personajes femeninos: Laysla De Oliveira como Cruz, una joven sin futuro reclutada por los marines que tras sufrir un duro entrenamiento se verá trasladada a un mundo de lujo que la es totalmente ajena. Saber si va a poder mentir sin ser descubierta y como poco a poco se va a ir involucrando emocionalmente van a ser sus principales desafíos mientras esté de incógnito.

Además de Cruz, Zoe Saldaña es Joe, la oficial de la CIA a cargo del programa Lioness sobre el terreno que recluta a Cruz. Aunque estamos en una serie de acción, la historia de divide casi en dos al conocer los problemas de Joe para conciliar su vida militar con la familia, en especial con su hija adolescente Kate. Joe tiene el rango dramático perfecto para que este papel sea un caramelo que cualquier actriz querría, y Zoe Saldaña realmente está super bien. Aparte de Saldaña, verla compartir pantalla con Nicole Kidman es uno de los grandes lujos de la serie, que casi consigue por si solo que Lioness merezca la pena.

Siguiendo el patrón de la narrativa actual, el primer episodio es el más espectacular de la serie, al asistir a una misión del grupo Lioness antes de empezar su siguiente misión con la llegada de Cruz. Al estar hablando de misiones de fuerzas especiales, la acción y los tiroteos son secos y directos, como supongo serán en la vida real, cosa que yo agradezco tremendamente. Y en este episodio se marcan las reglas del juego, ya que incluso cumpliendo la misión la soldado encubierta es muy probable que no viva para contarlo.

Dentro del elemento de entretenimiento que tiene la serie, si tengo que comentar algo menos bueno diría que el propio Sheridan se dio cuenta en seguida que la historia del entrenamiento de Cruz y su posterior infiltración no aguantaba por ella misma la serie, de forma que añade los problemas de Joe en su vida familiar para añadir un dramatismo que la otra trama posiblemente no tenía. En este sentido, el drama que vive la hija de Joe casi parece la forma de Sheridan de mostrar en televisión un enorme «Fuck You!!» a la generación adolescente actual, que es todo caprichos y nunca tuvo que trabajar por nada, y por tanto le falta el carácter de la gente llana de Wyoming o donde sea.

Además, para evitar la falta de acción, algo que no puede ser en una serie de este tipo, los miembros del equipo Lioness se ven envueltos en otras misiones en paralelo que no aportan nada a la trama general más allá de eso, tener la excusa para que haya una escena de acción en el episodio. Y aunque el final conecta con la idea de acción seca y directa, este final resulta un tanto anticlimático, no estando al nivel de los primeros episodios.

Además, Sheridan muestra un intento de mostrar elementos interesantes de geopolítica con la explicación de las conexiones de las empresas petroleras en todo el mundo, que se unen al propio interés de los políticos de Washington para que no se altere el actual equilibrio, dado que sería malo para los negocios. Dentro de este contexto, Sheridan da los detalles clave, pero no evita que el conjunto quede un poco maniqueo. En todo caso, ver Special Ops: Lioness semana a semana me ha entretenido bastante, pero sin enamorarme, excepto el episodio piloto que si me pareció muy bueno.

Por cierto, otro elemento a destacar aparte del estupendo reparto es que la serie transmite la sensación de haber sido una producción en la que Sheridan ha contado con todos los recursos que necesitaba para contar la historia que él quería. Aparte de tener múltiples localizaciones, y unos vehículos y armamentos que lucen espectaculares en pantalla, la serie sabe ser espectacular cuando toca, y cuando tocar la fibra emocional.

Special Ops: Lioness es una buena historia, pero su final anticlimático aunque lógico no me ha dejado en lo más alto. Se nota que Sheridan sigue contando las historias que más interesantes le parecen a él. Pero en este casi diría que más allá de la idea de mostrar a mujeres participando en misiones de combate de las fuerzas especiales, la premisa no ha acabado de ser todo lo carismática e interesante que me hubiera gustado.

Comparto el trailer de esta serie:

Special Ops: Lioness estuvo bien, pero a la vez debería haberme gustado más. Sin encontrar nada especialmente malo, tampoco nada me ha parecido notable después del piloto. Pero sigo confiando en Sheridan para que me entretenga.

PUNTUACIÓN: 6.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Guardianes de la Galaxia vol. 3 de James Gunn

Tenía muchas ganas de ver Guardianes de la Galaxia vol. 3, la última película de James Gunn en Marvel Studios antes de su marcha a presidir DC Studios. Y la verdad es que no ha decepcionado, ofreciendo un final super emocionante al viaje de estos personajes.

PUNTUACIÓN: 8.5/10

La querida banda de los Guardianes se instala en Knowhere. Pero sus vidas no tardan en verse alteradas por los ecos del turbulento pasado de Rocket. Peter Quill, aún conmocionado por la pérdida de Gamora, debe reunir a su equipo en una peligrosa misión para salvar la vida de Rocket, una misión que, si no se completa con éxito, podría muy posiblemente conducir al final de los Guardianes tal y como los conocemos.

James Gunn escribe y dirige la tercera y última película de los Guardianes de la Galaxia, que se estrena 6 años después del estreno de su volumen 2. La película de 150 minutos de duración ha tenido una larga y complicada producción provocada por el despido de Gunn por parte de Disney en julio de 2018 y su posterior readmisión meses más tarde, cuando ya se había comprometido con Warner para hacer The Suicide Squad. Tras los problemas y retrasos derivados del COVID, por fin podemos disfrutar del final del camino para Gunn en Marvel Studios, al hacer aceptado el puesto de CEO de DC Studios.

En el reparto tenemos el retorno de un montón de caras conocidas: Chris Pratt como Peter Quill / Star-Lord, Zoe Saldaña como Gamora, Dave Bautista como Drax el Destructor, Karen Gillan como Nébula, Pom Klementieff como Mantis, Bradley Cooper y Vin Diesel como las voces de Rocket y Groot, Sean Gunn como Kraglin Obfonteri y Elizabeth Debicki como Ayesha, Suma Sacerdotisa y líder del pueblo Soberano al que conocimos en el volumen 2. Las nuevas incorporaciones son Chukwudi Iwuji como el Alto Evolucionador, Will Poulter como Adam Warlock, y Maria Bakalova como la voz de Cosmo, el perro cosmonauta ruso.

La película ha contado con un enorme presupuesto de 250 millones de dólares. Haciendo la cuenta del x2.5 sobre el presupuesto, necesita recaudar 625 millones en todo el mundo para cubrir los costes de producción. Recordar que la primera película recaudó 773 millones, mientras que el volumen 2 consiguió 869 millones. Para terminar con datos de producción, comentar que la película tiene fotografía de Henry Braham, edición de Fred Raskin y Greg D’Auria, y música de John Murphy.

Para James Gunn, lo importante en Guardianes de la Galaxia siempre han sido los personajes. Es normal por tanto que en este volumen 3 de sus aventuras tengamos una historia que no va tanto del mcguffin de turno, sino de los héroes y sus interacciones, de como se comportan para llegar hasta llegar a su objetivo y cómo este viaje les cambia y afianza su sentimiento de familia disfuncional. Una de las cosas que me han volado la cabeza es que el corazón de esta película se construye alrededor de Rocket, al conocer su terrorífico origen y como fue creado por el villano de la película, el Alto Evolucionador. Un personaje creado totalmente por CGI es el corazón, el centro emocional de todo, y consigue que las lágrimas broten de nuestros ojos en varios momentos claves de la película. Esto confirma la realidad que tantos y tantos gafapastas, espectadores pero también profesionales del mundo del cine, no entienden. Que el problema no son los efectos especiales o las pantallas verdes, sino el uso que se hace de ellas. Y James Gunn pone tanto corazón y tanta emotividad, en el buen sentido del término, que sólo queda levantarse y aplaudir por el viaje que hemos vivido con ellos.

El Alto Evolucionador me ha parecido un gran villano que aporta un elemento super perturbador a la historia, sobre todo en la parte del flashback en la que conocemos el origen de Rocket. Su experimentación y cómo transforma adorables animales es grotescos cyborgs con implantes metálicos ofrece unas escenas de body-horror que no esperaba en un blockbuster familiar de estas características, dándonos unos momentos dolorosos de ver. Y, de nuevo, que esto se haga con personajes CGI que nos transiten tanto me parece una pasada. El elemento clave de un villano que cree estar mejorando a la humanidad mediante experimentación genética pero en realidad no lo hace por motivos altruistas sino porque odia como son las cosas en realidad, me parece un elemento muy interesante que puede servir además de metáfora sobre personas y actitudes muy actuales en nuestra sociedad. En este sentido, que la Contra-Tierra sea una especie de mundo idealizado sacado de los años 80, también sería un comentario sobre la idealización de un pasado que igual nunca fue tan perfecto cómo se quiere recordar ahora.

Como decía, el centro de todo son los personajes, y cuando unos héroes consiguen hacernos reir y llorar casi en la misma escena, es que algo ha hecho muy muy bien James Gunn. Dentro que todos están bestiales, me tengo que quitar el sombrero ante Chris Pratt, que consigue sacar adelante brillantemente un viaje super doloroso mientras Peter Quill aprende que la Gamora que amó se fue y no va a volver, y que en lugar de perder una amante igual puede ganar una amiga. Pratt tiene momentos de patetismo, momentos de mucho dolor, otros graciosos y sobre todo, la clave de levantarse a pesar de todo para ayudar a su amigo Rocket cueste lo que cueste. Y todos los saca adelante de forma brillante. En los últimos tiempos hemos asistido a una campaña de descrédito contra él vergonzosa, pero Pratt muestra en pantalla que ES una gran estrella con un carisma y una presencia que se sale de la escala. Muy bien por él.

Pero no sólo es Pratt, claro, porque el resto del grupo es increíble. Dentro de esta familia disfuncional, las mejor paradas son Karen Gillan y Pom Klementieff, que como comentaba nos dan siempre una risa y un momento que resalta que siguen teniendo dolor en su corazón. Nébula está empezando a aprender a ser feliz, algo que jamás pensó que conocería, y Mantis dentro de su superficialidad aparente resulta que sabe leer el dolor que se esconde debajo de cada uno de sus compañeros. Empezando por supuesto por un Drax, que como todos alterna unos diálogos super buenos marca de la casa Gunn con un momento dramático de los que tocan el corazón de los espectadores.

En este sentido, quizá la peor parada de este volumen 3 es Gamora y Zoe Saldaña, al ser este personaje el que está más desconectado de los demás y que no consigue emocionarnos como sí lo hacen todos. En parte, esto reafirma el hecho que esta Gamora NO es la que conocimos en las películas anteriores, pero me parece el eslabón débil de un tapiz de relaciones entre los personajes que me parece brillante. Y si nos ponemos puntillosos, podría criticarse la versión de Warlock que nos presenta Gunn, interpretado por Will Poulter. Sin embargo, este ser evolucionado recién nacido de una crisálida evolutiva que tiene el cuerpo super poderoso de un adulto pero ninguna experiencia con el mundo real no se alejaría demasiado de la primera versión del personaje que vimos en la páginas de Thor, que era un ser con la mente de un niño que no sabe interactuar con el mundo a su alrededor. Creo que este Warlock cumple bien con lo que la historia de Gunn pedía de él, aunque tengo que reconocer que el que desaparezca casi completamente de la segunda mitad de la película es una pena. En todo caso, el momento en que le explican que todo el mundo merece una segunda oportunidad me parece una escena super emocionante y un gran resumen a lo que significa esta familia disfuncional que se ha ganado mi corazón.

Había intentado llegar a la película lo más libre de spoilers posible, pero fue inevitable leer algún comentario sobre que la duración de la película era excesiva y que se hacía un poco larga. Nada más lejos de la realidad. Soy el primero que me he quejado de la moda actual de alargar muchas películas por encima de las dos horas y media, pero al final si se conecta con lo que nos cuentan y con el sufrimiento y evolución de los personajes, las duración no solo no es un problema sino que es imprescindible para tejer las relaciones y construir el climax. Volviendo a los personajes, que incluso Kraglin y Cosmo tengan momentazos emotivos y con el uso de sus poderes como el resto, me parece una pasada que habla muy bien de Gunn como creador de personajes con corazón. No, no me ha parecido nada larga la película.

Guardianes de la Galaxia tiene una selección de canciones abrumadora. El momentazo con Beastie Boys me ha parecido increíble, pero los hay a patadas. Por ejemplo, el comienzo con Rocket tarareando Creep de Radiohead, que nos marca desde el primer fotograma el tono de dolor pero también de alegría que se abre para los personajes. Otra cosa que me vuela la cabeza de esta película es que puede decirse que hay poca acción, pero nunca la echas de menos porque el centro emocional como digo son los personajes. Que esto suceda en un blockbuster palomitero como es esta película es otro detalle que me parece alucinante, y es todo gracias a un Gunn que me parece brillante. Y ojo, que puede haber poca acción, pero la que tenemos está rodada de forma alucinante. El primer combate contra Warlock tiene una fuerza y una sensación de amenaza bestial, mientras que la huida de Orgoscopio, sede de la compañía Orgocorp del Alto Evolucionador, está llena de momentos super imaginativos. Además, el climax final con el combate del grupo en un largo plano secuencia en el que vemos como todos pelean y se ayudan entre sí para eliminar a sus enemigos me parece una genialidad visualmente apabullante.

Otro elemento a destacar es la creación de mundos super imaginativos por parte de Gunn. El planeta Orgoscopio es diferente a todo lo visto en la ciencia-ficción reciente (o no), lo que añade el plus de sensación de maravilla que debería tener la ciencia ficción y que a menudo se olvida, planteando por falta de originalidad o presupuesto mundos genéricos con tecnología startrekizada. El brillante diseño de producción sirve para añadir el plus de personalidad a una película que ya se siente única de principio a fin. Gunn ha comentado en varias ocasiones que cuando Marvel Studios le pidió su idea de película para los primeros Guardianes, él no quería crear una película que pareciera Star Wars, sino una que hiciera sentir a los espectadores lo que la primera Star Wars nos hizo sentir, con personajes estrambóticos con corazón que vivían en una galaxia extraña pero cercana que el público querría conocer. El éxito es total.

Buscando algún elemento menos bueno a una película que como veis me ha gustado mucho, como decía por un lado tendriamos a Gamora, no estando mal, ojo. A esto añadiría que las partes más aterradoras del Alto Evolucionador están en el flashback del origen de Rocket, no teniendo demasiado que hacer en la parte del presente. Sin embargo, esto conecta con la parte que comentaba sobre que lo importante para Gunn no es la aventura o la pelea con el villano sino el crecimiento de los personajes, y por eso es un elemento que no supone ningún problema. Por cierto, que no lo he comentado, pero Chukwudi Iwuji me parece que está muy bien en su papel de villano que cree que está haciendo lo correcto, aunque lo correcto para él sea destruir un planeta lleno de seres vivos porque no son «perfectos». El toque de villano perturbado salido de La isla del doctor Moreau queda super bien en la película.

Aparte de todo, obviamente James Gunn plantea la película sabiendo que es el final de su trilogía dentro de Marvel Studios. La forma en que conecta las tres películas a lo largo de los 150 minutos de duración me parece genial, consiguiendo la sensación de haber vivido una larga historia río en la que todos han cambiado, mejorado y aprendido a ser felices como una gran familia disfuncional. Como final de trilogía nos regala un final perfecto, porque estos personajes merecían un final feliz. Aunque eso no incluya el típico «consigue a la chica». Siendo un momento a lo mejor agridulce para Quill, para los personajes igual lo que tenemos es mejor.

Este final super satisfactorio nos muestra que el cambio ha sido una constante en el grupo, que empezó con Nébula como villana y termina siendo uno de los puntales emocionales. Además, los detallitos sacados de los comics me alegraron también el corazón, como ese Warlock ahora ya si en modo héroe o la presentación de Phylla-Vell (aunque sea diferente al comic) me dejan con la mejor de las sensaciones. No se que nos deparará el futuro para estos Guardianes de la Galaxia, pero me daría pena que Marvel no los aprovechara, porque el potencial es infinito. Hay actrices como Zoe Saldaña que han comentado que para ella esta es la última película en Marvel. Y respetando esto, Gunn igual ha planteado un final para Gamora que encajaría con estos deseos. Sin embargo, yo quiero ver más Nébula, más Rocket y Groot, y desde luego, más de Adam Warlock. Esperemos que su historia no termine aquí.

La película recaudó 120 millones el primer día de estreno (incluyendo el preestreno del jueves), y parece que el boca a boca es bueno, algo que no sucedió con Quantumanía. Está por ver si Guardianes de la Galaxia vol. 3 conseguirá igualar la taquilla de la segunda parte (870M), pero mientras sea rentable para Marvel el éxito será más que suficiente. Para ello sería suficiente conseguir 700 millones de taquilla, cifra incluso inferior a la de la primera primera película. Hay muchas webs que viven de estas estadísticas y las comparaciones de unas películas con otras, pero teniendo un final tan satisfactorio para la historia de estos personajes (espero que por el momento), con que Marvel obtenga beneficios con esta película, aunque no igualen los de las anteriores, yo contento.

Por cierto, mientras despedimos a James Gunn de Marvel Studios, esta película y el corazón y el cariño que ha mostrado para estos personajes me confirma que es la persona indicada para escribir y dirigir la próxima película de Superman. Un Gunn que no lo he comentado pero consigue un equilibrio perfecto entre momentos super dramáticos, con Rocket pero no sólo, con un humor que me funciona prácticamente siempre construido a partir de unos diálogos brillantes jugando con la personalidad de cada personaje. Reconozco que el hecho que en El Escuadrón Suicida a veces se riera DE algunos personajes y no «con» ellos hizo que no estuviera del todo convencido, pero tras ver esta película, las dudas han desaparecido. Up, up and away!!

Comparto el trailer de la película:

Cuando un final es tan emocionante, no queda más que levantarse a aplaudir lo que James Gunn ha regalado a los fans. Guardianes de la Galaxia vol. 3 ya es historia de Marvel Studios, y ¡qué viaje!

PUNTUACIÓN: 8.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones. Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

Crítica de Avatar: El sentido del agua 3D de James Cameron

Por fin se ha estrenado uno de los principales eventos cinematográficos de 2022. Avatar: El sentido del agua de James Cameron se estrena 13 años después de la revolucionaria primera Avatar, y su visionado en la mejor pantalla y en 3D era algo obligado.

PUNTUACIÓN: 9.5/10

Ambientada más de una década después de los acontecimientos de la primera película, ‘Avatar: The Way of Water’ empieza contando la historia de la familia Sully (Jake, Neytiri y sus hijos), los problemas que los persiguen, lo que tienen que hacer para mantenerse a salvo, las batallas que libran para seguir con vida y las tragedias que sufren. Secuela del éxito de taquilla Avatar (2009).

James Cameron declaró incluso antes del estreno de Avatar que si su película tenía éxito, tenía en mente la realización de varias continuaciones. Obviamente, tras convertirse en la película más taquillera de la historia y ganar tres Oscars, tuvo vía libre para llevar a cabo sus planes. Sin embargo, la adición de tres secuelas más, para un total de cinco películas de Avatar, y la necesidad de desarrollar una nueva tecnología para filmar escenas de captura de rendimiento bajo el agua, algo nunca antes realizado, condujeron a retrasos significativos para permitir que el equipo tuviera más tiempo para trabajar en la escritura, la preproducción y los efectos visuales.

Avatar: El camino del agua cuenta con un guion escrito por James Cameron junto a Rick Jaffa y Amanda Silver. Josh Friedman y Shane Salerno aparecen también acreditados en la historia, ya que Cameron ha utilizado un proceso similar al de las salas de escritura de las series de televisión, creando desde el principio la historia que contarán las 4 secuelas previstas para que luego sean unos escritores concretos os que escriban el guion de cada película. Se habla mucho del retraso debido al desarrollo de la tecnología, pero hay que destacar que Cameron y su equipo estuvieron años refinando la historia hasta conseguir que estas secuelas tuvieran el nivel de emoción, espectacularidad y worldbuilding que Cameron demandaba.

Avatar: El sentido del agua y Avatar 3 se rodaron a la vez, empezando el rodaje en agosto de 2017 y concluyendo a finales de septiembre de 2020, después de tres años de rodaje. Las películas cuentan con fotografía de Russell Carpenter, montaje de Stephen E. Rivkin, David Brenner, John Refoua y el propio Cameron, y música de Simon Franglen. Con un presupuesto estimado de 350-400 millones de dólares, es una de las películas más caras de todos los tiempos

Para el reparto de la película tenemos el retorno de Sam Worthington como Jake Sully y Zoe Saldaña como Neytiri. Sigourney Weaver regresa como Kiri, la hija adolescente adoptada por Jake y Neytiri, mientras que Stephen Lang también regresa como el coronel Miles Quaritch, que será como no puede ser de otra manera el villano de la película. Muchos de los secundarios de la primera película vuelven también para esta continuación.

Las nuevas caras de la película son Kate Winslet como Ronal, una buceadora de los Metkayina y esposa embarazada de Tonowari (Cliff Curtis), jefe del clan de los Metkayina. Los hijos de Jake y Neytiri tienen una gran importancia en la película. Son Neteyam (Jamie Flatters), el hijo mayor, Lo´Ak (Britain Dalton) el segundo y Tuktirey «Tuk» (Trinity Jo-Li Bliss) la hija de ocho años e hija menor de Jake y Neytiri. Además, Bailey Bass como Tsireya («Reya») y Filip Geljo como Aonung, son los hijos de Ronal y Tonowari.

Entrando a valorar la película, Avatar: El sentido del agua es un milagro cinematográfico. Tengo que reconocer que antes de entrar a verla tenía un poco de miedo por la duración de más de tres horas, pero la película pasa en un suspiro sin hacerse nunca larga, dejándote con la sensación que si hubiera durado una hora más, la hubieras disfrutado igual o más. Y es que Cameron ha conseguido un prodigio cinematográfico. De nuevo.

Cuando se habla de «director visionario» realmente sólo debería aplicarse el término a Cameron, que ha llegado a crear tecnología que nadie podía ni imaginar para poder crear la historia que quería de la forma que él estima más conveniente. Que haga cine mejor que nadie y sea una voz propia e independiente de las modas del momento o de los deseos de los grandes estudios entiendo que debe molestar a mucha gente dentro del negocio del cine. Como lo es que su cine sea popular y guste a los espectadores a pesar de haber sufrido una vergonzosa campaña de acoso y derribo durante más de diez años por gente que ninguneaba y restaba importancia a su filmografía. La forma en que esos críticos caen en la irrelevancia porque su opinión de lo que es o no «buen cine» interesa cada vez a menos gente, es algo de lo que no puedo más que alegrarme.

Es muy difícil explicar con palabras la sensación inmersiva que se crea en los espectadores al ver la película y entrar en el mundo de Pandora. Porque todo es real, sientes que todo es físico, tiene peso, textura, gravedad, a pesar de saber intelectualmente que son ambientes creados digitalmente. Es una locura volver a Pandora con este nivel de realismo, pero cuando llegan al arrecife y entran en el agua es una maravilla añadida a la maravilla. Los seres acuáticos y en general todo el ecosistema es increíblemente complejo y se siente perfectamente real en un mundo de estas características. He leído como crítica que la segunda hora de la película parece un documental de National Geographic, y qué queréis que os diga, dame más de esto y pónmelo en vena, porque me ha flipado.

Cameron argumentalmente repite el tema general de historia ecologista con unos humanos tratando de hacerse con el control del planeta y esquilmando los recursos naturales y unos Na´vi oponiéndose a ellos, ambientada en el mar. La escena de la caza de la ballena gigante de Pandora es un momento doloroso de ver, sobre todo al comprobar que la han matado únicamente para conseguir unos pocos gramos de líquido cerebral, desechando el resto. Hace más por el ecologismo Avatar que 18 documentales de la ONG de turno que nadie ve para empezar. Se habla que la historia es sencilla, pero aparte del prodigio visual, Cameron y su equipo han creado todo un ecosistema de la nada que es real y sitúa a una personajes dentro de este ambiente para vivir sus vidas y tener ahí sus aventuras. Como pasa siempre con estas cosas, cuando algo se hace tan bien, hace que parezca fácil, pero pensando en todos los elementos de la película, se entienden los más de tres años que Cameron pasó desarrollando la historia hasta que estuviera perfecta.

Pero no se trata de una repetición de la primera Avatar, sino de una continuación. Es normal que temáticamente hayan elementos comunes, pero el añadido de los hijos de Jake y Neytiri hace que la historia adquiera una nueva dimensión, ya que son ellos los que tienen el peso dramático y emocional durante una parte importante del tiempo del metraje, algo que le funciona de maravilla a la historia. Con Jake y Neytiri ya teniamos conexión emocional, pero es tremendo la forma con la que he conectado con los niños, algo que sólo puede ser calificado como de buena escritura y buena narrativa audiovisual.

Quiero destacar de nuevo esto. Porque Avatar 2 no es un prodigio visual con una historia vacía, el guion de la película funciona increíblemente bien ofreciendo una aventura que se siente completa y satisfactoria, aunque hay numerosos elementos que notas que han dejado abiertos para las continuaciones de forma consciente. La relación de Jake con su segundo hijo Lo´Ak va a sufrir problemas importantes en el futuro, y aunque la identidad del padre de Kiri está claro, queda mucho que contar sobre otro de los personajazos de esta película. Y por supuesto, queda la amenaza de los humanos, que siguen en Pandora y no se irán así como así. Tenemos Pandora para rato y a mi eso me encanta.

Hablaba de tres horas que se me hicieron cortas, y la verdad es que puestos a buscarle algo menos bueno da la sensación que al arranque de la película en el bosque le faltaron 15 minutos más, ya que Jake nos cuenta con voz en off cosas que hubiera molado más ver en directo, por así decirlo. Dicho esto, Cameron ha pegado un golpe encima de la mesa afeando al resto de la industria que no apuesten como él por una tecnología que permite añadir una potencia visual y expresiva que no tienen las películas «normales». Descubrir el mundo del mar contiene imágenes de belleza poética que me cautivaron y me hipnotizaron, pero cuando Cameron de pone con la acción en el climax final recuerdas que a la hora de crear acción no le gana nadie. Los momentos de Neytiri son brutales y el combate entre Jake y Quaritch es bestial. De nuevo, es increíble pensar ahora que lo que vi no fue rodado físicamente sino que ha sido creado por un ordenador, no salgo de mi asombro.

Hablando de críticos, me hace gracia ver a gente quejándose ayer en redes sociales porque en algunos cines Avatar ha copado la mayoría de salas durante este fin de semana de estreno. El caso es que el año tiene 52 fines de semana en los que se estrenan películas, pero es un problema que uno de esos 52 esté copado por una película que por otro lado el público quiere ver, porque el comentario general es que las salas están llenas y probablemente Avatar 2 vaya a ser la película más taquillera del año en España. Pero es que justo la semana pasada tuvimos el segundo peor fin de semana para la taquilla en España de 2022. Sin grandes blockbusters palomiteros que molestaran a los del «buen cine», resultó que ese fin de semana no fue nadie a las salas. ¡Qué curioso! A ver si no es tanto un tema de el número de salas de Avatar sino de que se estrene una película que no les gusta a ellos, apare que claramente les molesta ver las salas llenas de gente como no han estado desde el estreno de Spiderman No way home precisamente las navidades pasadas.

Por cierto, hablando de la taquilla, creo que Avatar: La forma del agua va a tener un taquillazo. Pero hay que recordar que usando el multiplicador x2.5 sobre su presupuesto, con que recaude 900 millones de dólares en todo el mundo, la película ya estará dando beneficios y asegura la continuación comercial del resto de películas a partir de la tercera que ya está rodada. Se está comparando con la primera película que es la película más taquillera de la historia, y no es lógico plantear que tenga que recaudar lo mismo o será una decepción para sus productores. De hecho, no tiene ni siquiera que superar los 1400 millones que ha recaudado Top Gun Maverick para que la película sea super rentable. Por poner los puntos sobre las íes. Por cierto, me acuerdo de Top Gun y como me flipó la sensación de sentir que todo era real al haberse rodado con aviones de combate reales. Lo que ha conseguido Avatar haciendo que todo se sienta igual de real me vuela la cabeza cada vez que lo pienso.

Avatar 3 se entrenará en las navidades de 2024. Aparte que no tengo duda que compraré seguro el blu-ray de esta película, la única duda que tengo tras ver Avatar 2 es cuando volveré al cine para verla por segunda vez. Y creo que como yo mucha gente hará igual, aparte que el boca a boca tengo claro que va a ser buenísimo, y muchísima gente que no va habitualmente al cine se va a acercar durante estas navidades a ver Avatar: La forma del agua. ¡Qué ganas tengo de volver a Pandora!

Comparto el trailer de la película:

Avatar: El sentido del agua es un milagro cinematográfico. Una película mágica que te traslada a un mundo nuevo que querrás visitar múltiples veces. La película del año que hay que ver si o si en pantalla grande.

PUNTUACIÓN: 9.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

Y si quieres, puedes invitarme a un café.

¡Saludos a todos!

AVATAR 3D HFR de James Cameron: Retorno a Pandora

Aprovechando La Fiesta del Cine de vuelto a ver Avatar en el cine en formato 3D HFR, y he disfrutado como la primera vez con una película de 2009 que sigue luciendo mejor que cualquier película estrenada este año en salas de cine. ¡Grande James Cameron!

PUNTUACIÓN: 9/10

Año 2154. Jake Sully (Sam Worthington), un ex-marine condenado a vivir en una silla de ruedas, sigue siendo, a pesar de ello, un auténtico guerrero. Precisamente por ello ha sido designado para ir a Pandora, donde algunas empresas están extrayendo un mineral extraño que podría resolver la crisis energética de la Tierra. Para contrarrestar la toxicidad de la atmósfera de Pandora, se ha creado el programa Avatar, gracias al cual los seres humanos mantienen sus conciencias unidas a un avatar: un cuerpo biológico controlado de forma remota que puede sobrevivir en el aire letal. Esos cuerpos han sido creados con ADN humano, mezclado con ADN de los nativos de Pandora, los Na’vi. Convertido en avatar, Jake puede caminar otra vez. Su misión consiste en infiltrarse entre los Na’vi, que se han convertido en el mayor obstáculo para la extracción del mineral. Pero cuando Neytiri, una bella Na’vi (Zoe Saldana), salva la vida de Jake, todo cambia: Jake, tras superar ciertas pruebas, es admitido en su clan. Mientras tanto, los hombres esperan los resultados de la misión de Jake. (FILMAFFINITY)

James Francis Cameron (1954) es un director de cine y ecologista canadiense. Conocido por sus películas de ciencia ficción, su primera película Terminator (1984) ya le valió el reconocimiento de público y crítica. Aliens (1986), The Abyss (1989), Terminator 2: Judgment Day (1991) y True Lies (1994) fueron también super éxitos que le consolidaron en el star-system de Hollywood como un director al que merece darle carta blanca para hacer unas películas que tan sólo él puede imaginar. También dirigió Titanic (1997), que le valió los premios de la Academia a la Mejor película, Mejor director y Mejor montaje, y Avatar (2009), rodada con tecnología 3D, le valió nominaciones en las mismas categorías, aunque «solo» ganó otras tres categorías: Mejor fotografía, Mejor dirección artística y Mejores efectos visuales.

Cameron es cofundador de las productoras Lightstorm Entertainment, Digital Domain y Earthship Productions. Además de cineasta, es explorador marino de National Geographic y ha producido numerosos documentales sobre el tema, como Ghosts of the Abyss (2003) y Aliens of the Deep (2005). Cameron también ha contribuido a las tecnologías de filmación submarina y de vehículos remotos y ha ayudado a crear el sistema de cámara digital 3D Fusion. En 2012, Cameron se convirtió en la primera persona en hacer un descenso en solitario al fondo de la Fosa de las Marianas, la parte más profunda del océano de la Tierra, en el sumergible Deepsea Challenger.

Cameron escribe el guion de Avatar y realiza el montaje de la película junto a John Refoua y Stephen E. Rivkin. La mítica música es obra de James Horner, en la que fue su tercera colaboración con Cameron tras Aliens y Titanic. La película cuenta además con fotografía de Mauro Fiore y diseño de producción de Rick Carter y Robert Stromberg. Además de ganar 3 Oscars (Mejor fotografía, Mejor dirección artística y Mejores efectos visuales), Avatar es la película más taquillera de la historia a nivel mundial (sin contar la inflación) superando los 2800 millones de recaudación.

Sam Worthington interpreta al protagonista de la película, Jake Sully, un marine parapléjico que se une al proyecto Avatar para ocupar el puesto que, como científico, ejercía su hermano gemelo recientemente fallecido. Zoe Saldana interpreta a Neytiri Omaticaya, una habitante nativa de Pandora que se ve obligada a enseñar a Jake las costumbres de los na’vi. Sigourney Weaver interpreta a la Dra. Grace Augustine, una astrobióloga y directora del proyecto Avatar que sirve como mentora de Jake y que defiende las relaciones pacíficas entre humanos y na’vi. Stephen Lang interpreta al Coronel Miles Quaritch, comandante militar del proyecto y encargado de la seguridad de la base. Por último, Michelle Rodriguez interpreta a Trudy Chacón, una piloto de helicópteros.

Si hay un término manoseado en los últimos años en el mundo del cine, ese sería el tan manido «director visionario». Pero la verdad es que para pocos directores el término es más adecuado que para James Cameron. Un creador inconformista que ha hecho avanzar a la industria del cine al crear desarrollos tecnológicos que le permitieran contar y mostrar su película de la forma en que él la había imaginado. Ese es el caso de Avatar, una película que puede calificarse de revolucionaria al ser rodada y pensada para ser vista en 3D y que nos llevó a un mundo que nunca antes habiamos visto.

Da vergüenza echar la vista atrás y comprobar que si la tecnología 3D no ha triunfado y se está empleando masivamente en el mundo mainstream es por culpa de unos estudios cobardes que no se atrevieron a dar el salto e intentaron engañar al público estrenando películas rodadas en 2D a los que añadían algunos efectos en post-producción para dar la sensación de 3D, buscando aprovecharse de la moda del momento, dando mala fama a esta tecnología.

Avatar es una maravillosa locura. Un espectáculo visual increíble que nos muestra un mundo completamente nuevo lleno de animales y seres diferentes a lo que estamos acostumbrados a ver en ciencia ficción. Lo primero que me llamó la atención de una película que tengo comprada en blu-ray y hemos visto en casa seguro una vez cada dos años, es lo espectacular que es el 3D y cómo ayuda a convertir la experiencia en Pandora en una super inmersiva. La profundidad que añade el 3D y la sensación de estar tú en medio de la jungla con los protagonistas está presente en buena parte del metraje. Con el añadido de tratarse de una jungla alienígena con flora y fauna diferente a la nuestra. También la parte de los vuelos lucen increíbles con el 3D.

Junto al 3D, otro elemento que me ha flipado es que estamos ante un mundo creado con ordenador que parece real. La perfección que Cameron consigue en todo, desde los bosques pero también las naves y los animales nos meten de lleno en la película y jamás ves decorados de cartón piedra o un mal uno de ambientes digitales. Todo luce real como si la jungla de Pandora existiera y estamos hablando de un ambiente 100% digital. La suspensión de credulidad es total porque te crees estar en Pandora con Jake, algo que 13 años desde su estreno inicial hace que luzca mejor que cualquier otra película estrenada este año, o en los últimos años.

El otro gran desarrollo de Cameron fueron las cámaras de captura de movimiento que captaban todas las expresiones faciales de los actores con una definición nunca antes vista y que consiguen que las facciones de los na´vi y de los avatares parezcan también reales. Al final Avatar no es una película de tecnología que valorar únicamente por su apartado técnico, sino que esta tecnología permite a Cameron contar su historia y hacer que los espectadores conectemos con los personajes y no nos parezcan humanos pintados de azul inverosímiles como pasa en cualquier película de Star Trek. Todo va dirigido a crear una experiencia inmersiva en el espectador en la que creamos que estamos transportados a un nuevo mundo. Y la verdad es que funciona. Lo hizo en 2009 y lo ha vuelto a conseguir en 2022 incluso sabiendo lo que iba a ver. La experiencia ha sido increíble.

Hay que reconocer que si, el guion de Avatar puede ser resumido como «Bailando con lobos en el espacio». El propio Cameron reconoce la influencia de la película de Kevin Costner (estrenada en 1990, 19 años antes que Avatar) en la que un oficial del ejército norteamericano es destinado a un puesto militar abandonado fronterizo con territorio indio y acabará haciéndose amigo de una tribu sioux de la que aprenderá sus costumbres. Pero Cameron a partir de ahí crea una historia con una profunda vertiente ecologista y de defensa del medio natural, creando un ecosistema y una cultura de los na´vi completamente novedosa.

Esta influencia en el concepto básico de la película es la prueba de cargo para los haters para recordarnos que Avatar «no es para tanto». Incluso pueden encontrarse conexiones con otras películas como La selva esmeralda de John Boorman o Pocahontas en lo referido a la lucha entre civilizaciones o al ecologismo. Sin embargo, lo que olvidan esos haters es que a partir de ese concepto básico Cameron crea a personajes interesantes como la doctora Augustine (Sigurney Weaver) o los propios protagonistas Jake y Neytiri que quieres conocer y que consiguen que te preocupes por ellos. La fábula ecologista está super bien construida y realiza una crítica feroz contra el capitalismo salvaje que destruye el medio ambiente y la historia de amor me la creo y se crea con el ritmo adecuado.

Pero es que además estoy cansado de películas «serias» que cuando rascas la superficie compruebas que tienen guiones vergonzosos que parece que toman por tontos a los espectadores y que ni siquiera respetan las normas que ellos mismos establecen para ese mundo (Star Wars IX, Joker, Batman v Superman), por lo que ver una película en la que el guion es perfecto y no rompe la lógica de las reglas del mundo de Pandora es una refrescante novedad, casi una anomalía. Y eso en el mundo de los blockbusters, pero cuando nos vamos a dramas «adultos» la situación es casi peor, con personajes que no actúan según su naturaleza o que actúan porque si sin mayor explicación. Ver una película con un guion lógico y esperable es una maravilla. De hecho, que el final se sienta inevitable y casi el único posible no es señal de mala historia, en muchos aspectos sería justo lo contrario. Si hubiera que desmerecer cualquier drama «serio» que recomiendan algunos críticos simplemente por compartir argumento básico con otra película, no se podría ver cine. Pero eso es justo lo que se hace con Avatar, en parte por el odio que se le tiene a Cameron y en parte al tratarse de cencia ficción, un género ninguneado por estos creadores de opinión.

Y a todo lo anterior hay que sumarle un climax final super potente con un set de acción alucinante que deja en mal lugar a cualquier película del silo XXI que no sea Vengadores Infinity War y Endgame y que en 2022 ha significado un triunfo total para una película redonda a la que no se le puede poner un pero.

Cameron es un director odiado y envidiado a partes iguales, porque ha demostrado ser un profesional de éxito que ha triunfado donde los demás no lo han conseguido, y no cabe duda que lo ha conseguido haciendo lo que quería en cada momento y realizando mejores películas que la competencia. Eso en lo referido a otros estudios, pero tengo claro que también es aplicable a una parte de la crítica que no puede soportar que el público apoyemos con nuestro dinero las películas de Cameron cuando ellos nos insisten en que no lo merecen, porque hay otras películas mejores. Las que les gustan a ellos, claro. Unos críticos y unos influencers cada vez más irrelevantes que hoy en día solo engañan a su cada vez más pequeño público entregado.

Tras ver Avatar de nuevo en 3D, no tengo duda que Avatar: The Way of the Water va a arrasar las próximas navidades. Y es que incluso sin conocer el argumento, el público sabe(mos) que Cameron nos va a llevar a un mundo que sólo él puede imaginar y que la experiencia va a ser diferente a cualquier otra cosa que hayamos visto en el cine este año. Y en este caso, diferente SI es mejor. Cada vez cuesta más sacar al público de sus casas para ver una película en las salas de cine. Creo que Avatar 2 lo va a conseguir, porque la experiencia de ver de nuevo esta primera película en 3D ha sido una experiencia alucinante que recomiendo a todo el mundo.

Comparto el trailer del reestreno de esta película:

Avatar es un peliculón en si mismo que sigue luciendo mejor que el 100% de las películas estrenadas este año, cuya importancia para la industria del cine es aún mayor si tenemos en cuenta los desarrollos tecnológicos que Cameron creó para esta película y que revolucionaron el medio.

PUNTUACIÓN: 9/10

Y si te gustó este artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que sigas mi blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!