Archivo de la etiqueta: Chris Pratt

Crítica de La lista final de Prime Video

Prime Video parece querer especializarse en la producción de series de acción de calidad, con los ejemplos previos de Jack Ryan o Jack Reacher. La lista final con Chris Pratt es el último ejemplo de un buen entretenimiento de temática militar.

PUNTUACIÓN: 7.5/10

James Reece (Chris Pratt) es un miembro Navy SEAL del ejército cuyo pelotón sufre una emboscada durante una misión encubierta de alto riesgo. Cuando Reece regresa a casa con su familia, cuestiona su propia culpabilidad con recuerdos confusos del suceso. Sin embargo, a medida que sale a la luz nuevas evidencias, Reece descubre fuerzas oscuras trabajando en su contra. Para averiguar qué sucedió Reece contará con el antiguo compañero Edwards (Taylor Kitsch), con conexiones con la CIA.

La Lista Final es una serie de televisión de acción basada en la novela homónima de Jack Carr. La serie de 8 episodios ha sido creada por David DiGilio y cuenta con la dirección de Antoine Fuqua en el primer episodio, siendo Chris Pratt productor ejecutivo de la serie. La serie cuenta con fotografía de Armando Salas y Evans Brown, y música de Ruth Barrett.

La serie está protagonizada por Chris Pratt, que interpreta al Comandante James Reece, un oficial de los SEAL de la Armada estadounidense con 8 despliegues de combate. Comandante del pelotón Alpha del equipo SEAL 7. Taylor Kitsch es Ben Edwards, un ex SEAL de la Marina y antiguo compañero de equipo de James Reece que actualmente trabaja en la CIA. Constance Wu es Katie Buranek, una experimentada corresponsal de guerra de Voltstream News, mientras que Riley Keough y Arlo Mertz interpretan a la mujer e hija de Reece, Lauren y Lucy. Jeanne Tripplehorn es Lorraine Hartley, Secretaria de Defensa, mientras que Jai Courtney interpreta a Steve Horn, presidente del contratista de defensa Capstone Industries, mientras que Sean Gunn es Saul Agnon, Vicepresidente de Capstone.

La lista final es una historia de venganza. A partir de la muerte de su familia, un condecorado SEAL se lanza a la búsqueda de la verdad para hacer que todos los que fueron responsables de su muerte y de las de su pelotón paguen por lo que han hecho. Hay un mensaje muy claro que cuando el ejército entrena a hombres para la muerte, no pueden sorprenderse que su respuesta ante una tragedia personal provocada por motivos espurios sea la violencia. Un mensaje que siendo sencillo, no deja de estar ahí y de estar bien ejecutado durante toda la serie.

Chris Pratt es el omnipresente protagonista, y agradezco que se aleje del clásico papel de héroe «simpático» con el que es fácil conectar, creando un personaje oscuro para el que no existen matices a la hora de perseguir a los que estuvieron involucrados en el asesinato de su familia. Reece trata a patadas a la periodista Katie Buranek incluso a pesar de estar ayudándole, porque no quiere que nadie interfiera en su misión. Sin embargo, dentro que para los culpables hay una única salida aceptable, evita matar a policías o agentes del FBI que intentan detenerlo, lo que indica un alto elemento moral en sus acciones que lo convierten en un HÉROE sin matices en el contexto de esta historia.

El resto del reparto creo que cumplen con profesionalidad con lo que la serie demanda de ellos, siendo en general un buen complemento a la presencia y la fuerza que Pratt incorpora a la serie. Dentro que todos cumplen, le gusta la química que Taylor Kitsch comparte con Pratt en pantalla, la villanía de un Jai Courtney muy cómodo en su papel y de Sean Gunn añadiendo un toque de patetismo a su personaje.

Esta historia clásica de venganza está muy bien ejecutada. El guion me parece muy interesante porque no te muestra todas las cartas de inicio, sino que a medida que Reece va tachando nombres de su lista va sumando otros, a menudo sorprendentes, mientras avanza su investigación y ahonda en la conspiración, encontrando conexiones económicas, políticas e incluso dentro del ejército que se beneficiaron económicamente de esas muertes.

Una serie de este tipo no está para hacer profundas reflexiones filosóficas, sino para mostrar acción. Y La lista final en eso me parece un triunfo. Me encanta que Prime Video apueste por invertir un presupuesto importante para hacer series de acción con esta calidad técnica. Porque la verdad es que todas las escenas me parecen super bien ejecutadas desde el realismo de la forma en que actúan las fuerzas especiales de los Estados Unidos. La serie plantea además elementos diferenciadores en cada escena de cada episodio, de forma que consiguen que no sea un «John Wick» de proyección y tiro en la cabeza repetido una y otra vez como vimos en la tercera película. Hay escenas super buenas y diferentes en La lista final. Destacaría el asalto a la base de los narcos del cuarto episodio, el ataque del quinto y el climax final.

Y por si fuera poco, dentro de lo que parecería una historia lineal básica de venganza, la serie se las apaña para crear giros interesantes que rompen lo que yo al menos como espectador esperaba de la serie. En especial, el quinto episodio me parece modélico y sorprendente dentro de la lógica de la serie, a lo que le sigue un sexto episodio también estupendo que rompe la narrativa que llevábamos hasta ese momento. Estos giros de guion me han gustado mucho y han conseguido mantenerme interesado durante todo el visionado.

Hay que reconocer también que La Lista Final no es perfecta. La duración de los episodios va desde los 50 minutos del más corto a los 65 del primer episodio. Y la verdad es que esta duración acaba siendo un pelín larga en general, hasta el punto que el visionado hubiera mejorado con episodios de 5-10 minutos menos. Esto es debido a que en todos los episodios tenemos varios momentos en los que Reece recuerda a su familia con memorias cruzadas debido a su tumor. Esto es algo que tendría sentido en la televisión clásica de episodio por semana, ya que cada episodio debe recordar al espectador lo que ha perdido Reece que motiva la venganza. Sin embargo, al tratarse de una serie de streaming que el público puede ver en maratón (o como fue mi caso, en sesiones de dos – tres episodios), esta repetición acaba resultando redundante y un pelín repetitiva.

Este elemento como digo afecta al visionado de la serie en su conjunto, pero narrativamente tiene todo el sentido ir viendo el deterioro mental de Reece y como esto afecta a su rendimiento, lo que de alguna manera le humaniza frente a la máquina de matar en que se ha convertido. De esta manera, incluso estos aspectos menos buenos que reconozco que existen y están ahí no son gratuitos ni un problema de guion, más bien al contrario. Curiosamente, o no, los mismos que alaban series como Obi-Wan Kenobi que son un queso de gruyere grosero que narrativamente no tiene sentido, han pensado pasar por alto los problemas de la serie de Disney+ para inventarse problemas que no están ahí en esta serie.

Lo cual me lleva al review-bombing que ha sufrido la serie, porque parece claro que para la mayoría de críticos americanos políticamente correctos no es aceptable que Prime Video haga una serie de un hombre blanco buscando venganza por el asesinato de su familia. Por ejemplo, en Slash-film Valeria Ettenhofer comenta «En un thriller de acción completamente podrido, el Navy SEAL James Reece (Chris Pratt) se lanza a una exhaustiva y obsesiva matanza pública, todo ello mientras casi todos los personajes que le rodean le llaman incesantemente buen tipo. La disonancia cognitiva entre las acciones del «héroe» de la serie y la inexplicable lealtad que inspira a todos los que le rodean es ridículamente evidente». Lo cual deja en evidencia que está comentando sobre sus preferencias ideológicas y no sobre lo que la seria la está contando, porque en el contexto de esta historia ¡claro que Reece es el héroe! Que la «crítica» lo ponga en duda como primer elemento fundamental de su crítica es penoso, la verdad. Porque que una mujer busque venganza por su violación como en Promising young woman es «necesario», pero que lo haga un hombre blanco tras ser asesinada su familia es «problemático». Y así todo.

Y obviamente cada persona puede tener una opinión, y para gustos colores. Pero eso es una cosa y otra pretender valorar un contenido de entretenimiento no por lo que es sino por lo que tu querrías que fuera. Otra crítica comenta que «Parece que va a ir de conspiraciones y se convierte en una serie de venganza que no reflexiona sobre la venganza¿Por qué tendría que hacerlo? LA HISTORIA NO VA DE ESO. Pero es que como comentaba antes el mensaje de que es peligroso empujar a la violencia a alguien que lleva toda su vida perfeccionando el uso de la violencia por un gobierno que le ha usado para sus fines, y como para alguien así, la venganza es el único camino, si queda queda claro y diáfano en la historia.

Existe una tremenda disonancia entre el entretenimiento que los «creadores de opinión» quieren que veamos y los gustos del público a los que una historia de venganza muy bien planteada y resuelta nos vale perfectamente. Son esos mismos críticos los que no se explican el éxito de series como Yellowstone, que de momento y si no me equivoco en España sigue siendo imposible de ver en ninguna plataforma, y que se llenan la boca pidiendo variedad de contenidos pero renegando cuando una cadena plantea una historia que no coincide con su ideología.

La lista final puede tener elementos mejorables, empezando por la duración de los episodios, pero todo lo que plantea lo hace estupendamente bien. Si te gusta el cine de acción es una serie que no te puedes perder.

Comparto el trailer de esta serie:

La lista final es un entretenimiento estupendo que sabe qué tipo de historia es y cual es su público, entre el que me encuentro.

PUNTUACIÓN: 7.5/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Jurassic World: Dominion de Colin Trevorrow

Tercera película de la franquicia de Jurassic World de nuevo dirigida por Colin Trevorrow, director de la primera película de 2015. Una cinta entretenida pero que quedará como la más floja de toda la franquicia.

PUNTUACIÓN: 6/10

Cuatro años después de la destrucción de Isla Nublar, los dinosaurios ahora conviven -y cazan- con los seres humanos en todo el mundo. Este frágil equilibrio remodelará el futuro y determinará, de una vez por todas, si los seres humanos seguirán en la cúspide de los depredadores en un planeta que comparten con los animales más temibles de la creación.

Colin Trevorrow, director de la primera Jurassic World en 2015 vuelve a la dirección de esta película tras dejar a Juan Antonio Bayona que dirigiera la polémica Jurassic World: Fallen Kingdom (2018). A partir de una historia suya y de Derek Connolly, Trevorrow escribe el guión junto a Emily Carmichael, un guion que resulta ser lo más flojo de la película de largo.

La película de 146 minutos de duración cuenta con fotografía de Emily Carmichael, montaje de Marc Sanger y música de Michael Giaccino. La película cuenta con un presupuesto de casi 200 millones de dólares que prácticamente ya han sido rentabilizados con la taquilla del fin de semana de estreno, lo que pone de relevancia el interés del público en los dinosaurios. Este éxito de taquilla, aunque con cifras inferiores a las de las dos películas previas, hace muy complicado que esta vaya a ser «el final de la historia» tal y como se ha publicitado.

El reparto es el elemento más importante de importante de Jurassic World: Dominion. A los protagonistas de las películas anteriores Chris Pratt (Owen Grady), Bryce Dallas Howard (Claire Dearing) e Isabella Sermon (la adolescente Maisie Lockwood), se les unen el trio protagonistas de la primera trilogía: Laura Dern como la Dra. Ellie Sattler, Jeff Goldblum como el matemático Dr. Ian Malcolm y Sam Neill como el Dr. Alan Grant.

Junto a este sexteto protagonista tenemos el retorno de BD Wong como el Dr. Henry Wu y Campbell Scott como el Dr. Lewis Dodgson, director general de Biosyn Genetics y villano de la función, además de la presentación en la franquicia de DeWanda Wise como Kayla Watts, una antigua piloto de las Fuerzas Aéreas que ayuda a Owen y Claire en su misión.

Empezando por los elementos positivos, Jurassic World Dominion es una película súper entretenida en la que están están pasando cosas todo el rato y jamás llega a parecerme larga. Hay además un buen par de sustos buenos durante las diferentes persecuciones que me gustaron bastante, y la verdad es que a mi mujer y mi hijo les ha gustado bastante, así que en ese sentido hay que reconocer que el objetivo de entretenimiento está más que conseguido.

Dentro de lo básico de la historia (sobre lo que volveré luego), la verdad es que es una gozada volver a ver a Dern, Neill y Goldblum, sobre todo porque tienen una gran importancia en la trama y aparecen muchísimo en la película. Junto a ellos, Chris Pratt y Bryce Dallas Howard les dan una buena réplica, consiguiendo que el reparto sea lo más destacado de la película. Dicho esto, os dais cuenta de lo problemático que es esto en un gran blockbuster palomitero de dinosaurios, ¿verdad?

Todos los elementos de producción creo que lucen bastante bien en la película, y transmiten la idea de gran espectáculo. La música de Giacchino la encuentro cumplidora pero a mucha distancia de sus mejores partituras. Pero claro, es que la comparación es con John Williams, ahí es nada.

Dicho esto, tengo que reconocer que hubo un elemento que me fastidió bastante durante el visionado, y es ir a ver una película de dinosaurios y que no se les vea casi nunca bien, porque la mayoría de escenas son de noche, lloviendo, con bruma o con las figuras a contraluz. Tiene delito que el original de Spielberg ¡de 1993! sea en eso y en todo muchísimo mejor. Pero sobre todo, en lo relativo a mostrar a los dinosaurios en todo su esplendor.

¿Puede ser que además la bombilla de la sala de los cines Cinesa de Castellón estuviera medio fundida y no se vieran bien las escenas nocturnas (y todo en general)? Pues no lo descarto tampoco, porque no era sólo el tema de la oscuridad, es que además casi no había contraste entre los colores, con lo que no se apreciaban bien las figuras.

Si no ves bien la película no cabe duda que no la disfrutas como deberías, pero en el caso de este Jurassic World Dominion la verdad es que la película tiene un problema adicional, y es el guion super vago del director Colin Trevorrow y Emily Carmichael. Aparte que todo son casualidades y escenas construidas con porque sis para llevar a los protagonistas de un set de acción al siguiente, la película cae en todos los clichés posibles y repeticiones estúpidas de elementos ya vistos, hasta el punto que da un poco de vergüenza pensar que dos personas hayan escrito este guion y les hayan pagado por ello.

Que el malo muera igual que un personaje de Jurassic Park o la necesidad absurda de presentar en esta película a un nuevo dinosaurio aún más grande y peligroso que los anteriores son dos ejemplos de cosas que no son un agujero pero muestran una vagancia tremenda y casi una aversión a intentar crear elementos que sean realmente novedosos. Ver al T-Rex peleando con el Gigantosaurio es cualquier cosa excepto novedoso.

Trevorrow es un guionista más bien malo, pero como director no acaba de acertar tampoco a la hora de crear escenas o planos para el recuerdo. Globalmente, la verdad es que no puedo evitar pensar que su contratación ha sido más bien fallida, porque los espectadores hubiéramos ido a ver estas películas las dirigiera quien las dirigiese. En el caso de esta película, hay por ejemplo varias escenas super mal resueltas en las que un dinosaurio está a punto de atrapar a alguien y en el siguiente salto de montaje no lo ha hecho con poca o ninguna explicación que nos dejó con cara de WTF?! total. A eso habría que sumarle un villano que ralla el ridículo más espantoso con una motivación que nunca acaba de estar bien presentada más allá del tópico «soy un empresario rico malo que quiero ser más rico y malo mientras digo que trabajo a favor del medio ambiente y los animales». De nuevo, parece que Trevorrow y los productores se limitan a presentar tópico tras tópico igual pensando que los espectadores nos los vamos a comer con patatas.

Dentro del cine comercial, hay películas dejan poso como Doctor Strange en el Multiverso de la Locura o Top Gun: Maverick. Jurassic World Dominion no forma parte de este grupo. Probablemente acabe siendo un éxito de taquilla mayor que estas dos películas, pero veo difícil que nadie se acuerde de ella dentro de 3 meses, y desde luego no va a ser de las que deje poso en los espectadores. Al menos en mi caso, no tengo ninguna intención en volver a verla, ni siquiera cuando se estrene gratis en alguna plataforma. Entretenida sin más.

Comparto el trailer de la película:

Dentro de ser una película super entretenida, Jurassic World Dominion es de largo la peor película de esta última trilogía, y por supuesto se queda a años luz de los clásicos de Steven Spielberg e incluso de la tercera película de Joe Johnston.

PUNTUACIÓN: 6/10

Gracias por leer este post. Espero tus comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales y que te suscribas para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de La Guerra del mañana de Chris McKay (Prime Video)

Prime Video estrenó ayer viernes una de sus apuestas fuertes para este verano. La Guerra del Mañana, película de ciencia ficción dirigida por Cris McKay con Chris Pratt de protagonista, que ofrece un correcto entretenimiento si no piensas demasiado en lo que estás viendo.

PUNTUACIÓN: 6/10

Un día el mundo se paraliza cuando un grupo de viajeros en el tiempo se transporta desde el año 2051 para entregar un mensaje urgente: La humanidad está perdiendo la guerra mundial contra una especie alienígena letal. La única esperanza de supervivencia es que los soldados y los ciudadanos del presente sean transportados al futuro y se unan a la lucha. Entre los reclutados está el profesor de instituto y padre de familia Dan Forester (Chris Pratt) quien, decidido a salvar el mundo por su hija, se une a una brillante científica (Yvonne Strahovski) y a su padre (J.K. Simmons) en una búsqueda desesperada por reescribir el destino del planeta. (FILMAFFINITY)

Chris McKay, (1968), es un director de cine y televisión, escritor, productor, editor, animador y artista de efectos visuales estadounidense. Dirigió tres temporadas de Robot Chicken y trabajó como codirector de animación en The Lego Movie (2014) con Phil Lord y Christopher Miller. Hizo su debut como director de largometrajes con The Lego Batman Movie (2017). La Guerra del Mañana es por tanto el debut de McKay como director de una película de imagen real, y creo que globalmente realiza un buen trabajo.

La guerra del mañana tiene un guión de Zach Dean, fotografía de Larry Fong, montaje de Roger Barton y Garret Elkins y música de Lorne Balfe. La película de 138 minutos es una coproducción de Skydance y Paramount que inicialmente estaba planteada para ser estrenada en cines. Debido al COVID finalmente Prime se hizo con los derechos de distribución a nivel mundial, estrenándola el pasado 2 de julio, una fecha señalada para los grandes blockbusters palomiteros. De hecho, su presupuesto está estimado en unos 200 millones de dólares, confirmando que estamos ante una apuesta potente de uno de los estudios de Hollywood con más solera.

La película cuenta con el reclamo comercial de Chris Pratt, que interpreta a Dan Forester, un militar veterano de Irak y profesor de biología. Junto a él tenemos a Yvonne Strahovski como la coronel Muri Forester, la hija adulta de Dan en el futuro, J.K. Simmons como el padre de Dan James, un veterano de Vietnam que abandonó a su familia debido al trauma que vivió en la guerra y a Ryan Kiera Armstrong como la niña Muri Forester del presente. En el viaje de Dan al futuro conocerá a Charlie y Dorian, dos soldados muy diferentes interpretados por Sam Richardson y Edwin Hodge.

La Guerra del Mañana ofrece un correcto entretenimiento, más teniendo en cuenta que la hemos podido ver cómodamente en el casa. Como película de ciencia ficción con elementos bélicos cumple y las más de dos horas de película pasan en un suspiro porque desde que Dan viaja al futuro están pasando cosas todo el rato y no dejan un segundo de respiro. Comentaba que estamos ante un gran blockbuster cinematográfico, y lo cierto es que viendo la película antes de saber las cifras de producción ya se notaba que estamos ante una producción de gran presupuesto, con una escala y un nivel de destrucción importante. Para los fans del cine bélico y la ciencia ficción con aliens, creo que la película ofrece elementos más que de sobra para que les guste. Yo de hecho terminé razonablemente satisfecho.

El problema de la película es el guión. McKay creo que hace un buen trabajo como director y hay varios momentos visualmente super potentes, pero estamos ante la típica película que si, puede ser entretenida, pero mejor no pienses en lo que estás viendo porque realmente no tiene sentido, con algunos momentos realmente tontos. Un guión pobre para una película que te vende a Chris Pratt de gran protagonista y él hasta el climax final está en pantalla casi siempre, pero o bien escapando de los aliens o bien viendo a otras personas hacer las cosas importantes. La forma en la que desaprovechan a su personaje es curiosísima.

La película además se construye a partir de un par de sorpresas, algo esperable teniendo en cuenta que es una película con viajes temporales de por medio. Y durante los dos primeros tercios en los que básicamente es acción la película cumple razonablemente bien. Sin embargo, cuando empezamos a conocer las respuestas, estamos ante un castillo de naipes que se derrumba, empezando por la propia premisa del viaje en el tiempo para combatir en el futuro algo que realmente hay que derrotar en el presente. Además, se notan clarísimamente los referentes en los que se ha inspirado el guión, que van desde Alien, Terminator, La Cosa o Al filo del Mañana, entre otras muchas, quedando cierta sensación de pastiche una vez has visto la película en su totalidad y la analizas, como hago yo ahora.

Otro detalle es el propio diseño de la raza alienígena. Dentro de ser un CGI, luce bien en pantalla y ofrece una buena sensación de amenaza para los protagonistas cuando se trata de guerra de guerrillas en espacios cerrados. Sin embargo, de nuevo cuando empiezas a pensar en ello, no acabas de creerte que unos aliens que no vuelan y no tienen armamento, a pesar de estar más o menos acorazados, puedan destruir a la raza humana y hacer con el control del planeta. Está claro que esto entra en la propia suspensión de credulidad, o entras en la premisa o no hay película. Pero sin duda entra en la parte de no pensar demasiado en lo que estás viendo.

La película busca un target familiar con unos momentos de humor que a mi no me funcionaron. Sin embargo, mi hijo si se tronchó, así que probablemente cumplan correctamente la función. En este sentido, es justo reconocer que a mi hijo de 13 años le gustó mucho más la película que a mi, lo cual creo que entra también dentro de lo esperable y encaja en la idea de ofrecer un poco para todo tipo de espectadores, lo cual encaja además con el protagonismo de la hija de Chris Pratt adulta del futuro, que es la que tiene todo el protagonismo allí.

A pesar del flojo guión que se va desmoronando, es justo reconocer que como entretenimiento ligero, La Guerra del Mañana cumple razonablemente con su objetivo, y no dudo que ahora que entramos en las vacaciones veraniegas para mucha gente, la película se convierta en un gran éxito de audiencia para Prime Video.

Comparto el trailer de la película:

La Guerra del Mañana es una correcta película que gustará especialmente a los fans de la ciencia ficción en su vertiente bélica anti alienígenas.

PUNTUACIÓN: 6/10

Espero vuestras opiniones en la zona de comentarios. Y si te gustó el artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que te suscribas al blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Onward, de Dan Scanlon (PIXAR)

Onward, dirigida por Dan Scanlon (Monsters University), es la la nueva maravilla de Pixar. La historia de dos hermanos con las voces de Chris Pratt y Tom Holland que vivirán una gran aventura mientras intentan recuperar durante un día a su padre fallecido, nos traslada a un mundo fantástico que tiene que recordar lo que es la magia.

PUNTUACIÓN: 8/10

Ambientado en un mundo de fantasía suburbana, dos hermanos elfos adolescentes, Ian y Barley Lightfood, se embarcan en una aventura en la que se proponen descubrir si existe aún algo de magia en el mundo que les permita pasar un último día con su padre, que falleció cuando ellos eran aún muy pequeños como para poder recordarlo. (FILMAFFINITY)

La nueva película de animación de Pixar es una historia original que busca darle una vuelta a las típicas historias de fantasía con seres mágicos y sobrenaturales. Onward ha sido dirigida por Dan Scanlon, que también ha escrito el guión junto a C.S. Anderson. Scanlon es un hombre de Pixar que ha colaborado en películas anteriores del estudio, dirigiendo además Monsters University (2013), y promete un buen entretenimiento familiar para todos los públicos en el sentido más amplio y positivo del término.

Que la animación va a ser brillante es un hecho que no duda nadie, la novedad a priori podemos encontrarla en la química y el carisma que Chris Pratt (Star-Lord en Guardianes de la Galaxia) y Tom Holland (Peter Parker – Spiderman) pueden transmitir a estos hermanos elfos, dado su conocido gusto por la comedia. Y lo cierto es que la cuota de carisma, complicidad y sentido del humor está más que asegurada, con la sorpresa además de disfrutar con sus sentidas y emocionantes interpretaciones.

Cuando empiezo a pensar en Onward, precisamente “emoción” es el término que más veces aparece en mi cabeza. Y es que la película de Scanlon es un emocionante homenaje a los hermanos y a como los queremos a pesar de las luchas y desencuentros constantes. Además, la metáfora de buscar la magia que hemos perdido es maravillosa y perfectamente aplicable a nuestro mundo actual.

Onward tiene un feeling, o al menos a mi me lo pareció, a clásicos de mi infancia como Cuenta conmigo o Los Goonies, no tanto en las aventuras que se viven que son completamente diferentes, sino en el viaje en el que lo que conocen de si mismos es más importante que el tesoro en sí. Y eso que el tesoro de Onward implica ver a un padre que no conocieron, y para los hermanos Lightfoot no hay nada más importante.

Chris Pratt y Tom Holland estás los dos geniales, aunque diría que Holland tiene más momentos de lucimiento y los aprovecha de maravilla. Su química es genial y hay momentos muy divertidos. Como curiosidad, vimos la película en V.O. y solo estábamos en el cine mi hijo, mi mujer y yo en la sesión del domingo. No se si por la hora, por el coronavirus o porque la película no ha captado la atención del público, pero me pareció curioso lo vacío que estaba el cine el pasado fin de semana de estreno.

Otro elemento a destacar es la sobresaliente animación y la creación de esta “fantasía suburbana”. Ver la evolución de seres fantásticos como elfos, cíclopes, centauros o duendes de la imagen clásica que tenemos de ellos hasta su versión “civilizada” en este mundo industrializado provocó momentos super divertidos que yo disfruté mucho. Un personaje estupendo es Corey la Mantícora, un ser mitad león mitad dragón con cola de escorpión que en la fantasía clásica es una feroz guerrera y que en el mundo civilizado es la estresada dueña de un restaurante temático especializado en fiestas infantiles. Onward hace un divertido ejercicio subvirtiendo las expectativas que tenemos de estos seres, aunque para los que no los conocen en primer lugar se hace muy complicado que disfruten la broma, algo que sirve para confirmar mi sensación de que estamos ante una película más pensada en los padres que crecimos en los 80 y 90 más que en los niños.

Onward me ha encantado, pero reconozco que la falta de un antagonista hace que la película sea atípica. Aunque claro, el tema es que la película no va de eso, no necesita un «malo» al que vencer, ya que el viaje es más interior. Personalmente, esta decisión de Scanlon / Pixar me parece muy valiente, y rompe el falso mito de que todo el cine comercial es siempre igual y que las grandes empresas solo repiten patrones una y otra vez sin novedades ni creatividad.

Sin embargo, hay que reconocer que la película empieza muy lenta y le cuesta arrancar, pero de mitad de película en adelante el ritmo, la aventura y la emoción son de 10. Dan Scanlon ha hecho una película pensada para los padres como yo, que de niño jugábamos al D&D con nuestros hermanos, más que en el público infantil al que se supone se dirigen las películas animadas. Y no me malinterpretéis, esto me ha flipado muchísimo y he salido super contento del cine, pero al mismo tiempo entiendo que a mi hijo no le haya gustado tanto como a mí. Normal, ya que todo el componente emocional no iba dirigido a él. De igual forma, tampoco es una película para mi mujer.

En este sentido, lo que sí diría que es un pero comercialmente hablando es que su campaña publicitaria no ha sido especialmente atractiva ni mostraba cosas realmente novedosas o emocionantes, haciendo que la película pueda pasar mayoritariamente desapercibida. Yo soy muy fan de Pixar y siempre que pueda veré cualquier cosa que estrenen, pero, por dar un ejemplo, mi hijo tenía muchas más ganas de ver Trolls 2 que Onward, hasta el punto que puestos a elegir, hubiera preferido no ver este estreno de Pixar.

Como comentaba antes, aunque yo como espectador estoy encantado con Onward en concreto y Pixar en general, cada vez tengo más claro que se dedican a hacer películas para los padres que pueden gustar también a los niños. Y quizá los temas y la ambientación apelan a la sensibilidad de un padre acostumbrado a los juegos me mesa y las lecturas de Espada y Brujería, y para las nuevas generaciones muchos de los elementos que aquí aparecen les son completamente desconocidos.

Probablemente Onward no vaya a estar en ningún Top-3 de mejores películas de Pixar, al menos no está en el mío, pero sí ha conseguido emocionarme en muchas partes de la película y me parece una historia modélica que triunfa en lo que pretendía contar. Lo cual no es poca cosa hoy en día, teniendo en cuenta que comparte cartelera con numerosas películas mediocres que no justifican el precio de su entrada.

Comparto el trailer de la película:

Onward ha conseguido emocionarme con la aventura de estos dos hermanos elfos y estoy muy contexto de que Pixar siga ofreciendo un buen entretenimiento para los padres y los más pequeños. De momento, sigo muy fam y seguiré pagando por ver sus próximas películas.

PUNTUACIÓN: 8/10

 

Y si te gustó este artículo, te invito a que lo compartas en redes sociales, y que sigas mi blog para que te lleguen las notificaciones de las próximas publicaciones.

¡Saludos a todos!

Crítica de Jurassic World: Fallen Kingdom de J.A. Bayona

Cuando Jose Antonio Bayona fue confirmado como director de la exitosa Jurassic World, su obligación era no sólo ofrecer un buen espectáculo, sino también hacer avanzar la franquicia hacia nuevos caminos. Y creo que acierta en ambos aspectos.

PUNTUACIÓN: 6/10

Una erupción volcánica amenaza a los dinosaurios restantes en la Isla Nublar, donde las criaturas han vagado libremente durante años tras de la desaparición del parque temático «Jurassic World». Claire Dearing (Bryce Dallas Howard), ex gerente del parque, ahora fundó el Grupo de Protección de Dinosaurios, una organización dedicada a intentar preservarlos. Cuando a Claire le ofrecen la oportunidad de rescatar algunos ejemplares de la isla, acude a Owen Grady (Chris Pratt), el ex entrenador de dinosaurios que trabajó en el parque, para que la ayude a evitar la extinción de los dinosaurios…

Jurassic World: Lost World es cine palomitero sin pretensiones. Desde ese punto de vista, la película cumple con lo esperado. Y lo mejor para mi de esta película es la dirección de J.A. Bayona. Las escenas de acción, como el rescate de Isla Nublar, son super espectaculares y repletos de tensión. Narrativamente, su trabajo es perfecto y demuestra que Steven Spielberg hizo la elección perfecta para la continuación de la franquicia.

Junto a Bayona, me ha gustado mucho la fotografía de Óscar Faura, colaborador habitual en sus películas. La película tiene varios registros, ya que además de cine de aventuras clásico muta hacia una película de miedo con monstruos. Y en todo momento la fotografía resalta la narrativa de Bayona, que demuestra, en mi opinión, que es mucho mejor director que el sobrevalorado Colin Trevorrow, autor de la anterior Jurassic World, que al final era un remake encubierto de la primera película de Steven Spielberg.

Otro tema a destacar es que la película consigue abrir un nuevo horizonte a la franquicia de los dinosaurios, de forma que se abre muchas e interesantes posibilidades para próximas películas.

 

Lamentablemente, Jurassic World no es perfecta. Aunque las escenas de acción están muy chulas y la película pasa en un suspiro, el guión de Colin Trevorrow y Derek Connolly es una sucesión de situaciones trilladas y personajes estereotipados sin ningún interés. De hecho, tiene delito tener a una estrella como Chris Pratt y no saber qué hacer con él, hasta el punto que ni él ni Bryce Dallas Howard hacen nada realmente interesante en esta película.

La película tiene un giro que mola, aunque increíble y lamentablemente Universal lo spoiló en el segundo trailer. Pero lo cierto es que la película telegrafía este giro de forma que nunca hay una verdadera sorpresa, porque este se ve venir a la legua.
Además, ningún actor tiene oportunidad de hacer nada interesante con sus papeles porque más que personajes son cascarones vacíos. El cazador malo, la chica dura, el desahogo cómico, el ejecutivo oportunista… un guión malo fruto de no tener verdadero interés en desarrollar nada.
Incluso los dinosaurios han perdido la sensación de asombro, y ya no resulta tan alucinante verlos como en la película anterior, que precisamente se aprovechó de los 14 años que transcurridos entre la tercera película de Jurassic Park y el remake estrenado en 2015, que hicieron que los espectadores tuviéramos muchas ganas de dinosaurios y fuéramos en masa a ver la película.
Comparto el primer trailer de la película, completamente libre de spoilers:
Jurassic World no es perfecta, pero sí es un buen espectáculo y merece ser verse en un buen cine.

PUNTUACIÓN: 6/10